Nueva tragedia en el fútbol profesional toca a Paraná
Cristian Gómez, defensor de Atlético Paraná, se desplomó en pleno partido frente a Boca Unidos y falleció camino al hospital. Fue por “muerte súbita”, informaron los médicos. Es la segunda tragedia en menos de 2 semanas en el fútbol argentino.
Otro domingo en el que gana la tristeza. Como si fuera un estigma, el fútbol argentino parece no poder gambetear el sino trágico que lo envuelve desde hace un tiempo.
El regreso a la actividad, luego de la suspensión de una fecha por duelo por la muerte de Emanuel Ortega (el jugador de San Martín de Burzado que se golpeó la cabeza contra un muro durante el partido), quedó empañada por otra muerte incomprensible.
Cristian César Gómez, defensor de Atlético Paraná se desvaneció en pleno partido frente a Boca Unidos y falleció camino al hospital Escuela “José Francisco de San Martín”, de Corrientes.
Gómez tenía 27 años, le decían Patulo, era oriundo de Rafaela (Santa Fe) y llegó a principios de este año a Atlético Paraná, de Entre Ríos, que milita en la B Nacional. Fue un caso de muerte súbita.
Ayer, a los 32 minutos del primer tiempo del encuentro que su equipo disputaba con Boca Unidos, Gómez se desplomó cerca de la mitad de cancha. El hecho se produjo cuando el equipo visitante concretaba una jugada de ataque en el área de Boca Unidos, y es por eso que nadie se percató, hasta que los gritos desesperados del arquero Ruggiero alertaron al árbitro Facundo Tello, quien detuvo acertadamente el partido para asistir al futbolista.
Gómez intentó reincorporarse, pero no pudo. Los médicos de los dos equipos (Miguel Garré, del local, y Andrés Gaitán, de la visita) trataron de socorrerlo, mientras los jugadores abanicaban sus camisetas para darle aire.
Fueron tres minutos de tensión, hasta que la ambulancia logró entrar al campo de juego. La gente en las tribunas asistía en silencio a la escena conmocionante. Todos trataban de ayudar, algunos se agarraban la cabeza, otros caminaban nerviosos sin rumbo. Y Gómez, tendido sobre el césped, sufría convulsiones.
Era como una misa colectiva de jugadores sin rivalidades ni pequeñas mezquindades tratando de hacerle llegar un aliento de vida a un colega. En medio del drama también afloró el gesto humano de la solidaridad. Se replicó más tarde en los pasillos del hospital cuando se había decretado el descenlace.
La ambulancia tardó no más de siete minutos en llegar al hospital Escuela, ubicado a unos 4 kilómetros del estadio de Boca Unidos. En el camino, Gómez sufrió otro paro cardiorespiratorio, llegó a las 15.55 inconsciente y con los signos vitales apagados.
Se practicó un trabajo de reanimación cardiopulmonar durante más de 45 minutos y no pudieron recuperarlo. Más de tres horas después, la AFA, en acuerdo con Agremiados y con la adhesión de Fútbol para Todos, anunció la suspendió Tigre-River y otros dos partidos de la B Nacional.
Mientras tanto, en la cancha, a las 16.22 y luego de media hora de espera, el árbitro Facundo Tello reunió a los capitanes y les informó la suspensión del partido. El público los despidió con un aplauso cerrado. Iban 32 minutos y ganaba Boca Unidos 1-0 (gol de Juan Bravo). “Me parece perfecto. Si nosotros estábamos consternados, imagínate ellos. Así no se podía jugar”, dijo Gastón Sessa, visiblemente impactado.
“Ingresó con muerte clínica”
Kleia Esquivel, profesional que estaba al frente de la guardia médica en el hospital Escuela al momento del ingreso del futbolista de Atlético Paraná, sostuvo: “Ingresó a la guardia con muerte clínica, sin signos vitales”. Además resaltó que “durante una hora le practicamos tareas de reanimación, pero en ningún momento mostró actividad corporal”.
La Jefe de Emergencias del Hospital Escuela dijo desconocer “que haya tenido algún problema de salud, no tenemos constatación de ningún estudio en nuestras manos que describa las condiciones físicas del jugador”.
“El desfibrilador estaba en la cancha”
El presidente de Boca Unidos, Alfredo Schweizer, también se refirió al hecho que enlutó una vez más al fútbol de ascenso; “estamos muy dolidos, golpeados toda la familia de Boca Unidos por lo que ha sucedido”, manifestó Schweizer en conversación con los medios de prensa.
La AFA entregó a los clubes del fútbol argentino disfibriladores y sobre el particular, el titular boquense afirmó que “el desfibrilador estaba en el banco de suplentes, en el lugar que tiene que estar para uso del médico del club; esta es una situación que, por lo que estuve conversando, no hizo falta usarlo, en realidad no se dio el uso ni siquiera cuando el jugador llegó acá (por el hospital)”. Finalmente aseveró que esperaba conocer el informe de los forenses para conocer las causas de la muerte.
“Al hospital llegó en paro”
“Se hizo todo lo humanamente posible, todo lo que estuvo al alcance de los profesionales para recuperarlo, pero lamentablemente no se pudo”, dijo el facultativo de Boca Unidos en una mini conferencia de prensa en uno de los accesos del hospital Escuela en el atardecer de ayer.
Darré relató que Gómez sufrió una descompensación en el campo de juego: “Se descompuso en la cancha y se terminó agravando el cuadro en los minutos que siguieron. Tenía los signos vitales, se le hizo la rehabilitación cardiopulmonar en la cancha, se lo trasladó al centro especializado y fue atendido por toda la gente del hospital, emergencia, cardiología, terapia intensiva”. Y más adelante agregó que “al hospital llegó en paro, pero se le realizaba reanimación y eso después se extendió por una hora y media, una hora y cuarenta y cinco, más o menos”.
El facultativo de Boca manifestó que trabajó a la par de sus colegas en la emergencia del nosocomio: “Se realizó lo humanamente y médicamente posible, estamos muy dolidos. Se hizo todo y no tuvimos suerte”.
Los equipos en el nosocomio
Al hospital se acercaron rápidamente jugadores de Boca Unidos, encabezados por Gastón Sessa, Leonardo Baroni y José Vizcarra, quienes llegaron para interiorizarse del estado de salud del colega.
El que primero recibió la triste noticia fue el “Gato”, a quienes le franquearon la entrada y fue informado de la triste noticia por el médico del plantel, Miguel Darré.
Los rostros desencajados de los futbolistas que iban arribando, de dirigentes de Atlético Paraná y colegas entrerrianos que vinieron a cubrir el partido se multiplicaban.
Al rato llegaron al hospital dirigentes de Boca Unidos, los árbitros del partido y el colectivo que trasladó a la delegación completa del “Decano”, escoltado por la Policía.
Los jugadores del conjunto entrerriano, que aún no se habían enterado del fallecimiento ingresaron al nosocomio con lágrimas en los ojos, entendiendo la gravedad del cuadro de su compañero.
Fueron invitados a pasar a una sala contigua a Emergencias, donde les comunicaron sobre la muerte de Cristian Gómez.
Algunos descargaron su bronca contra las paredes, o puertas y otros abrazándose entre sí. Enseguida salieron del lugar para volver a ingresar por el sector donde acceden los familiares de pacientes internados.
Tras un buen rato, y por pedido de los jugadores al fiscal Buenaventura Duarte, uno a uno fueron ingresando a la sala donde se encontraba el cuerpo de su compañero, al que le tributaron una emotiva despedida.
En el medio, hubo un intento de la dirigencia de Boca Unidos por concretar una especie de conferencia de prensa con la participación de los médicos de ambos planteles y de autoridades del Hospital Escuela que fracasó por la no comparecencia de las otras partes.
De acuerdo a lo que trascendió, el cuerpo del jugador fue trasladado a la morgue judicial para practicársele la autopsia de rigor, tras lo cual sería entregado a familiares o dirigentes de Atlético Paraná, para que pueda ser velado en el lugar que se acuerde.
Su carrera
“Patulo”, como le decían íntimamente, surgió en Peñarol de Rafaela, pero se afirmó en la liga del interior santafesino cuando pasó a 9 de Julio.
Tras diferencias con la dirigencia, del “9” se fue con el pase en su poder para vestir los colores del Deportivo Armenio, en el ascenso bonaerense.
En junio de 2014, Gómez terminó su vínculo con el conjunto “verde”, para recalar en Sportivo Patria de Formosa, donde estuvo a un paso de lograr el ascenso a la B Nacional B.
A pesar de la decepción, Gómez tuvo su revancha al poco tiempo en Atlético Paraná, aunque su carrera se truncó definitivamente en Corrientes y volvió a enlutar al fútbol de ascenso.
Primeras palabras de José Cáceres
El vicegobernador entrerriano y presidente de Atlético Paraná, dijo tras conocerse la noticia del fallecimiento de Gómez que en la institución están “tremendamente consternados” y “doloridos”.
“No nos entra en la cabeza que una persona tan joven pueda tener un desenlace de estas características. Uno ve que estas cosas pasan en el deporte y cree que nunca van a golpear la puerta de la propia casa, pero hoy nos pasa a nosotros”, lamentó el dirigente.
Cáceres confirmó en diálogo con TyC Sports que el jugador tuvo “una leve reacción” ante las acciones de los médicos pero que luego volvió a descompensarse y ya no se recuperó. “Los profesionales hicieron todos los esfuerzos para reanimar a una persona que padece una muerte súbita, pero lamentablemente no hubo más reacción y Cristian se nos fue”, señaló consternado.
Finalmente, aseguró que a Gómez se le habían realizado todos los chequeos correspondientes: “Tenía un cuerpo médico a disposición. Se reforzaron, cumplimentando las exigencias de AFA, todos los exámenes de rigor, incluso los del corazón para detectar inconvenientes cardíacos. He estado chequeando que eso haya sido así recién y lo confirmé”.