Nacional B: Aldosivi también busca gol
|ESPECIAL (por Francisco Giovanoni-Marca Deportiva).- Aldosivi está hundido en el fondo de la tabla actual del torneo y muy cerca de la promoción por el descenso. Sólido defensivamente, intermitente en el medio y con una exasperante falta de gol que termina siendo la principal causa de este presente.
Que a un equipo de fútbol le falte gol, es tan preocupante como si a un hombre le faltara agua. No se puede sobrevivir demasiado sin ese vital elemento. En este deporte, sólo se gana metiendo la pelota dentro del arco delimitado por tres postes de 7.32 metros de largo por 2.44 metros de alto. Aldosivi de Mar del Plata está padeciendo gravemente la falta de poderío ofensivo para llegar a tal fin.
¿Qué busca ahora Salvador Daniele, entrenador, luego de la derrota -ajustada- ante Atlético Tucumán en el norte argentino?: ¿meter goles o analizar cómo llegar al área contraria para convertir?.
Primero, lo primero. Aldosivi puede estar tranquilo en el plano defensivo, por el momento. En ocho fechas recibió un gol por partido, y en los últimos compromisos ajustó detalles tácticos para sufrir menos. Campodónico, de hecho, casi no tuvo trabajo en Tucumán. Pero nada pudo hacer ante el tremendo “bombazo” de Erroz, bien denominado “gol de otro partido”. Cajaravilla y Nasif han estado protegidos con Vega por derecha y Presentado (o Villalba, el domingo) por izquierda, sin tener que salir tan lejos a cortar al rival; y Pena “barre” con su experiencia y seguridad.
El trabajo del mediocampo actualmente aporta intermitencias. Defensivamente, los laterales-volantes se acoplan a los tres defensores y el “5” (Herrón o Briones) se acerca a Pena para proteger y cortar rápido. En Tucumán Aldosivi recuperó en el gran primer tiempo muchas pelotas. Cabrera intenta aplicar movilidad para la transición en ataque. Pero ese funcionamiento se desdibuja ante el primer revés, lo cual impide darle seguridad al equipo cuando está en desventaja.
A su vez, los volantes intentan generar juego. Gradualmente, durante la serie de empates y hasta la primera etapa del encuentro ante Atlético, Aldosivi mostró una mejora en la búsqueda de encontrar volúmen de juego. Pero esa mejora se notó siempre que el equipo buscó contragolpear. No, como se menciona en el básquetbol, con “ataques estacionados” y la obligación de buscar el gol. “La diferencia sólo la podemos marcar cuando tienen la pelota los que más saben”, le dijo un integrante del plantel a este cronista en Tucumán, off the récord. Y es totalmente cierto. Cuando se juntan Cabrera con Seccafien, más las interesantes y vertiginosas proyecciones de Marcelo Vega -hasta aquí gran acierto de Daniele en su contratación- se ve lo mejor de Aldosivi en ofensiva.
Lo que sucede es que Aldosivi comienza sus ataques como un equipo sólido, pero los finaliza -si los finaliza- como un team amateur. Mueve bien la pelota, pero el pase final por “H” o por “B” termina siendo impreciso. Ya sea el pase que habilita al delantero o el pase que el delantero debe hacer hacia la red. Vale otro dato: las situaciones de riesgo generadas generalmente terminan siendo para los volantes, no para los atacantes.
Aldosivi anotó en ocho fechas sólo 5 goles. De esas anotaciones, sólo una fue de un delantero (Gigli, de rebote). Este último, viene de convertir 17 para Atlético Rafaela. Le cuesta adaptarse a Seccafien y el resto. No tiene conexión con quien le toque jugar, ya sea Diego Martínez o Javier Molina. Le llega poco la pelota “mano a mano” y cuando se retrasa, juega la pelota con su buena inteligencia pero pierde “peso”. Molina recibió poco juego pero tampoco hizo méritos para que le llegue. Martínez, lesionado las últimas fechas, todavía está pagando caro la falta de ritmo luego del desgarro sufrido el torneo pasado.
Daniele deberá trabajar las formas de la llegada. Dejar a los delanteros mano a mano para luego sí criticar si definen o no. De continuar esta crisis ofensiva, si bien van pocas fechas para lo extenso del certamen, hay dos jugadores que aprovecharon siempre los minutos que les tocaron. Son dos productos de “la cantera”, jóvenes y con ganas de demostrar. Matías Sarrautte, exquisito “enganche” y Braian Uribe, elegante delantero “que aprende rápido todo lo que se le enseña”, según dijo Daniele.
Son opciones. Aunque la confianza para los que están jugando y no les está saliendo las cosas también puede ser clave. “Cuando entre una, entran todas”. Ojalá esto suceda para que Aldosivi aleje fantasmas del descenso y empiece a sumar los puntos que le permitan estar más arriba en la tabla. Este presente nada tiene que ver con el potencial que se tiene.