Milei lo hace (por decreto…): desde este jueves el Centro Cultural Kirchner se llamará Palacio Libertad Domingo F. Sarmiento
Desde este jueves a la cero hora, por decreto del presidente Javier Milei, el actual Centro Cultural “Presidente Dr. Néstor Carlos Kirchner”, denominado así por ley 26.794 de 2012, que superpuso el nombre del ex mandatario fallecido al de “Centro Cultural del Bicentenario”, pasará a llamarse Centro Cultural Palacio Libertad Domingo F. Sarmiento.
Este jueves, cuando el secretario de Cultura de la Nación, Leonardo Cifelli, se presente ante la Comisión de Cultura a las 9 para responder una serie de pedidos de informes de la Cámara de Diputados, el Centro Cultural ya tendrá nuevo nombre.
Infructuoso fue contactar al secretario Cifelli como al subsecretario de Prensa de la Secretaría General, Javier Lanari, para conocer los fundamentos que justifican el cambio de nombre de la institución y los detalles de la norma que, en un acto austero, el presidente Milei presentará públicamente en el hall del ex Correo Central, todavía CCK, el sábado a las 19.
La prensa estará en un corralito en la explanada. Solo se permitirá acceso a las redes de Presidencia, así como a la TV Pública, que retransmitirá el evento.
Luego el primer mandatario asistirá a la función del Coro, uno de los cuerpos estables de la Secretaría de Cultura de la Nación.
Hace varios meses, cuando el vocero presidencial Manuel Adorni anunció el cambio de nombre de CCK a Palacio Libertad, se justificaba la medida en que, tratándose el ex Correo Central de un edificio histórico, “el nombre de edificios y espacios públicos, monumentos históricos y afines, no pueden responder en ningún caso a intereses políticos y partidarios”. Esta era la necesidad y urgencia, según el gobierno, de modificar por decreto y no por ley el nombre del actual CCK.
El centro cultural fue declarado monumento histórico nacional por decreto 262/97, dada la relevancia del edificio que forma parte del más rico patrimonio arquitectónico de nuestro país, con un enorme valor histórico.
La otra justificación del decreto de Milei sería, siempre según las fuentes inobjetables que no tuvieron acceso a la confección de la norma, que el tiempo que demanda “el trámite legislativo llevaría un importante retraso que dificultaría actuar en tiempo oportuno”, por lo cual se optó por el “remedio constitucional” previsto en el inciso 3 del artículo 99 de la Constitución Nacional, en el marco del uso de las facultades regladas en la Ley Nº 26.122.
Esta norma regula el trámite y los alcances de la intervención del Congreso respecto de los DNU presidenciales. La misma ley determina que la Comisión Bicameral Permanente tiene competencia para pronunciarse respecto de la validez o invalidez de los DNU, así como elevar el dictamen al plenario de cada Cámara para su expreso tratamiento, en el plazo de diez días hábiles.
De modo que este jueves, confirman los colegas de Clarín, podremos llamar al Centro Cultural “Palacio Libertad Domingo F. Sarmiento”, uno de los próceres intachables del siglo XIX que nadie se atrevería a cuestionar en el siglo XXI.
Bueno, lo de “nadie” es relativo. Durante la proyección sobre la fachada del Cabildo de Buenos Aires, en la celebración del Bicentenario cuando Cristina Fernández de Kirchner era presidente, el Gobierno nacional se “comió” a Sarmiento en el mapping.
El Congreso tendrá la última palabra.