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Microsoft le dice adiós a Internet Explorer 

Luego de tantas idas y vueltas, Microsoft tomó la decisión de quitar de sus sistemas operativos a Internet Explorer. Tras una serie de advertencias acerca de su funcionamiento, adaptabilidad y seguridad, la empresa tecnológica apartará de manera definitiva al buscador web de todos sus aparatos mediante la actualización de Windows 10 y 11.

Esta información se confirmó tras meses de tener en la mira al navegador. Desde 1995 que Microsoft utiliza Internet Explorer como la herramienta predeterminada para conectar a sus usuarios con la web, pero eso se terminó a partir de ahora. En un mensaje que difundió la empresa de software en junio de 2022, determinó que el 11 de febrero del corriente año, los dispositivos con Windows 10 y 11 ya no serían compatibles con este buscador.

Entonces: ¿Cuál es la solución que ofreció Microsoft a sus usuarios? Debido a que el sistema operativo ya tiene predeterminado un buscador web desde fábrica, actualmente la empresa aseguró que es posible descargar Edge. Este navegador ofrece las mismas oportunidades que su antecesor pero con más seguridad, dinamismo y calidad de imagen.

Con la llegada de Windows 10, la compañía fomentó el uso masivo de Edge, para así poder adaptar las aplicaciones y diferentes programas de los usuarios por una tecnología mucho más avanzada y óptima. Además, aseveró que los datos inscriptos en Internet Explorer, se trasladarían sin problemas al nuevo formato.

En un mundo en donde Google domina los sitios de búsqueda gracias a su algoritmo simplificado y ágil, Microsoft no se dejó vencer tan fácilmente y por ello trabajó en un navegador que cumpliera con las demandas de los internautas y el resto de las empresas que eligen a Edge, debido a la compatibilidad directa con los distintos dispositivos.

Microsoft Edge se basa en el motor de renderizado de código abierto Chromium. Es decir: está actualizado con los estándares modernos y con una amplia variedad de sitios web, por lo que no generaría mayores inconvenientes.

Después de décadas de quejas y advertencias acerca de la vulnerabilidad de Internet Explorer debido a los ciberataques y robo de datos, Microsoft sentenció el final del navegador con el que muchas personas dieron sus primeros pasos en la web. Además, la empresa anunció que incorporará a Edge una actualización con una versión modificada de ChatGPT.

En cuanto a los trabajos arduos por ofrecer un buen servicio, hace semanas Bitdefender publicó una investigación sobre una nueva ola de ataques que utiliza vulnerabilidades y cadenas de exploits proxy para atacar implementaciones locales de Microsoft Exchange, desde donde poder acceder a información y realizar acciones maliciosas.

Los expertos de Bitdefender Labs comenzaron a notar un aumento de estos ataques a finales de noviembre de 2022. Según detallan, el impacto potencial equivaldría a la adquisición total de un servidor Microsoft Exchange, como indicaron en una nota de prensa.

Dentro de los ataques a los servidores Microsoft Exchange, destacan los ataques de falsificación de solicitud del lado del servidor (SSRF), un tipo de ataque que permite a un ciberdelincuente enviar una solicitud creada desde un servidor vulnerable a un servidor diferente para acceder a recursos o información y realizar acciones en nombre del servidor vulnerable.

En cuanto al impacto geográfico, los objetivos del ataque se encuentran principalmente en Estados Unidos, aunque también se registraron incidentes en Polonia, Austria, Kuwait y Turquía.

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