Macri objetó en Gualeguaychú las medidas demagógicas que anunciaría dos semanas después

Desde este lunes se pone a disposición de los consumidores una canasta básica de alimentos de 64 productos con precios congelados -igual o por debajo del valor promedio del mercado- por 180 días, fruto de un acuerdo voluntario, pero de cumplimiento obligatorio, entre el Gobierno y empresas alimentarias, firmas que deberán además garantizar el abastecimiento. El propio Mauricio Macri había rechazado este tipo de intervención hace apenas unos días.

 

Con las PASO consumadas, lejos queda la conferencia de prensa que el presidente de la Nación, Mauricio Macri, encabezó en la Sociedad Rural Gualeguaychú para respaldar las precandidaturas de Atilio Benedetti y de Javier Melchiori, apenas diez días antes de las elecciones.

 

Lógicamente, después de la inapelable victoria del PJ –entre Piaggio y Roko sumaron más del 62 % de los votos– y de la muy mala elección de Cambiemos –que arañó el 20%–, la llegada del presidente apenas si se coló en las especulaciones posteriores sobre el posible impacto electoral que pudo haber producido en el electorado local.

 

Ahora, tras las medidas “anti inflacionarias” anunciadas por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, una de las definiciones de la conferencia de prensa toma significativa relevancia. A la pregunta de ElDía, sobre la postura oficial en cuanto a la emergencia tarifaria discutida en la Cámara de Diputados y las posibles medidas para aliviar el alto costo de los servicios, el Presidente respondió tajantemente: ratificó el rumbo y cuestionó el “congelamiento de tarifas” y los “controles de precios” implementados por gobiernos anteriores. “No sigamos proponiendo las mismas cosas”, reclamó.

 

Lo llamativo es que apenas 13 días después, fue el propio Macri el que anunció, por medio de un video en el que se finge una charla casual con “vecinos comunes” de Colegiales, el congelamiento de tarifas y los controles de precios en lo que resta del año electoral. Fue un día después de conocerse el índice de inflación de marzo, que llegó al 4,7 %.

 

¿Se analiza algún tipo de medida con respecto a las tarifas?, preguntaron los colegas de El Día de Gualeguaychú. “Antes que nada, con la verdad sobre la mesa”, aclaró Macri, y ratificó: “este es el camino”.

 

“Con seriedad, con reglas de juego claras, trabajando en equipo, dialogando, vamos a ir derrotando los problemas que arrastramos hace décadas”, expresó el presidente. Y pidió no repetir “los errores de los últimos 80 años”; “¡basta de hacer lo mismo!”, exclamó.

 

“En el pasado varios gobiernos propusieron controles de precios, controlar tarifas, antes eran también los teléfonos. Y ¿con qué nos quedamos?, sin teléfonos, sin energía y los controles de precios no funcionaron”, enfatizó, recuerda el prestigioso medio de la sureña ciudad entrerriana en un jugoso Editorial.

 

Ahora, urgidos por el alza inflacionaria, la presión política interna y las necesidades electorales, se dio a conocer la batería de medidas que, básicamente, dan por tierra la palabra presidencial. El acuerdo de precios será por “al menos seis meses” y concluirá el 22 de octubre, cinco días antes de la elección presidencial. Además, los aumentos de tarifas de servicios públicos, incluso los previstos para este año, quedarán archivados al menos hasta pasada la primera vuelta de las elecciones presidenciales, previstas para el 27 de octubre. Las tarifas de electricidad, gas y transporte no tendrán aumentos.

 

“Antes eran también los teléfonos”, había expresado el presidente, tomando distancia de las medidas intervencionistas en materia económica que desarrollaron, en mayor o menor medida, –con excepciones muy puntuales como la Dictadura y el menemismo–, los gobiernos argentinos de los últimos 80 años.

 

Pero también esta definición presidencial se transformó en un discurso vacío de realidad -reflexionan los colegas de El Día de Gualeguaychú- al anunciarse la inclusión de la telefonía celular en el congelamiento, que será de cinco meses y regirá hasta el 15 de septiembre.

 

“La energía vale. Entonces, todas estas propuestas populistas, mentirosas, demagógicas, nos llevarían a volver a la situación de ir hacia ser lo mismo que Venezuela”, consideró el presidente al referirse a los proyectos de Emergencia Tarifaria impulsados por la oposición.

 

Más allá de las contradicciones con las medidas anunciadas, que son evidentes y no necesitan explicación, y por sobre la guerra discursiva entre macristas y kirchneristas, que recobró fuerza al ritmo de la crisis, a millones de argentinos les preocupa mucho más que el nombre propio de quien ocupará el sillón de Rivadavia a partir del 10 de diciembre, la derrota del Gobierno sobre la incontrolable inflación. Y la consecuente pérdida del valor adquisitivo y el aumento generalizado de la pobreza, claro. El resto, son sólo discursos.