Llaryora redobló la apuesta contra la oposición por porteña: “No se ofendan por el pituquitos, si ustedes ofenden al interior hace décadas”
|El exaltado discurso triunfal del intendente de Córdoba y gobernador electo Martín Llaryora tras la victoria de Daniel Passerini como jefe comunal de la capital, donde remarcó: “Basta de que nos vengan a explicar qué hacer y qué no hacer los pituquitos de Recoleta”, generó una fuerte repercusión en Buenos Aires y el mandatario amplió su definición.
“Lo que les pido a los dirigentes porteños es que no se queden con el ‘pituquitos’, no se ofendan por eso y escuchen todo lo que dije. Son ustedes los que piensan el país desde Recoleta y no pueden seguir ofendiendo a todo el interior, porque hace décadas que se quedan con nuestros recursos y después nos vienen a explicar cómo se gobierna”, señaló Llaryora en diálogo con La Voz del Interior.
En su habitual tono calmo, lejos de la euforia del triunfo contra el radical Rodrigo De Loredo, que tuvo en su búnker a Horacio Rodríguez Larreta y a Patricia Bullrich, Llaryora intentó matizar sus declaraciones.
“Pituco es un término que uso siempre, se usa en mi familia. No quise ofender, me salió así. Fue un triunfo que nos desbordó, y habían sido meses soportando que vengan a explicarnos de transporte unos tipos a los que la Nación les administra el transporte y los tapa de subsidios”, señaló.
Y argumenta sobre su enojo: “Intentaron confundir a los cordobeses con el traspaso de la policía, los mismos a los que les pagamos miles de policías federales, a los que la Prefectura les cuida Puerto Madero y la Gendarmería les cuida los parques”.
“No tolero esa discriminación al interior y no me banco más que esos mismos dirigentes vengan a Córdoba a decirnos que no sabemos administrar, que no sabemos gobernar, que ellos son los Maradona de la vida y los del interior somos todos tontos”.
Y sobre el barrio porteño que eligió para criticar a los dirigentes de Buenos Aires, aclaró: “Hablé de Recoleta como símbolo de un porteño al que los propios porteños cuestionan. Cristina Kirchner también vive en Recoleta, yo cuestiono el centralismo porteño extremo de los últimos gobiernos”.
“Defiendo una idea de país mucho más amplia y mucho más federal, que es la idea que expresa Juan Schiaretti como candidato presidencial: no le den más vueltas ni le busquen otros significados políticos a lo que dije”, destacó Llaryora.
“Se quedan con la palabra ‘pituquitos’, pero yo hablé de cosas muy concretas: devuelvan al interior los recursos de las retenciones, liberen a todo el país los subsidios al transporte que se quedan en el Amba, repartan las fuerzas federales que están solo en Buenos Aires y piensen en la infraestructura que necesita todo el país. Pongamos equidad y después veamos quién administra mejor”, enfatizó el gobernador electo.
Y concluyó con una crítica a la mirada sobre el interior: “Así ven todo, todo lo que está en el interior es un feudo o es atraso. Las provincias son feudales si la gente decide con su voto que continúe el mismo partido, pero en Caba eso está muy bien. Eso es lo que cuestiono cuando hablo del modo sesgado en que miran el interior”.
Citó al General San Martín como defensa
“A algunos no les gustó el modo en que pronuncié mi discurso. Me quedo con una frase del General San Martín: “Hace más ruido un solo hombre gritando que cien mil callando”, remarcó Llaryora en las redes sociales este miércoles.
“Forjemos un país federal, salgamos del centralismo de los últimos gobiernos y comencemos a mirar al interior del país. Construyamos una Argentina con equidad en la distribución de sus recursos”, agregó el gobernador electo.
Y concluyó: “Traigo también al recuerdo una frase de Don Arturo Illia: ‘No les tengo miedo a los de afuera que nos quieren comprar, sino a los de adentro que nos quieren vender’. Como siempre se puede aprender y mejorar, dejen sus comentarios, los leo”.