Liga de las Américas: Sionista vive!!!
Luego de casi dos meses sin satisfacciones Sionista plasmó en Puerto Rico una victoria estimulante, derrotando nada menos que a Capitanes de Arecibo por 73 a 72. Pedro Franco y Cleotis Brown fueron determinantes en ofensiva pero lo de Alejandro Zilli conmovió en lucha desigual ante gigantes, claro que tuvo valiosa ayuda de Diego Osella y Daniel Hure. Crece Juan Manuel Locatelli.
Sionista terminó su calvario. Al menos pudo sonreír tras tantos días, 59, sin lograr esbozar una risa de satisfacción verdadera en materia competitiva.
Sí, cada uno tomó la campaña de distinta manera, y por ello se vieron rostros diferentes, algunos comprometidos, con gestos de incomodidad, otros relajados, como creyendo que ganando en cualquier momento se torcía el rumbo.
Pero los triunfos no llegaron y algunos siguieron con una actitud pasiva, distendida, hasta que en el seno del grupo se dio el click tardío con el castigo sufrido frente a Obras en feudo propio.
Ahí empezó a cambiar la fisonomía de plantel y hasta de cuerpo técnico. 48 horas después ya no se apreciaron esas sonrisas despreocupadas, bromistas y algunas hasta socarronas. Como también se incrementó tanto el desvelo que surgieron actitudes desde fuera de la cancha que transmitieron impotencia, desasosiego, generándose algunas conductas azarosas para nada apropiadas con la habitual forma de ver y sentir el básquet en ésta entidad ejemplar de la Liga.
Y eso se sintió en el campamento “Celeste”. Más aún…Hubo una arenga, sin ofuscación, pero fuerte, rígida, haciendo ver que de continuar en tan irrefrenable caída se ponía en riesgo la Permanencia.
Y vino el corte de Moldú, quien no era el culpable ABSOLUTO pero sí era uno de los puntos más flacos “criollos”.
En ésta ocasión, no hubo nadie que lo defienda al guardia como si hubo tantas voces contrarias a la ida de Chuckie Robinson.
Pero sí quedó la sensación generalizada de necesitarse como mínimo un ajuste más viendo el nivel no acorde de un Cleotis Brown muy lejos de su real nivel, las debilidades internas y las dificultades desde la base.
El plantel acusó el cimbronazo y si bien hubo dos reveses más, ya se denotaron sensaciones diferentes las que mejoraron aún más con el viaje a Puerto Rico para cambiar el oxígeno y un debut panamericano que pudo concluir con victoria, reflejándose una evidente mutación, pese a jugar sin una ficha Mayor pues lo de Leroy Hickerson fue tan fugaz como malo (menos de dos minutos).
Sionista se sentía cómodo jugando sin su gente evidentemente, más allá de seguir adoleciendo de ineficacia en los 
Libres pese a no tener flashes “molestos” ante los ojos de sus jugadores. Halcones lo venció en tiempo extra, pero hubo repuntes notorios en individualidades y en lo actitudinal.
Ahora sí faltaba ganar. Y ese objetivo se consumó en la Isla del Encanto, frustrando nada menos que al local, Capitanes de Arecibo, con un ex NBA y valor preponderante de la selección borícua (Daniel Santiago), más otros compañeros del combinado caribeño (Larry Ayuso/Danilo Pinnock/Antonio Lattimer), un base de enorme oficio como Bobby Joe Hatton y un buen par extranjero como Larry Turner y Jeff Aubry.
Un triunfo motivante, que estimula pero el cual no debe nublar la visión. Debe ser tomado -con la mayor humildad- como el punto de partida definitivo, tras explorar como salir del infierno, para alcanzar ya objetivos no tan ambiciosos aunque escapando de un abismo tan insondable como inesperado.
Crónica de una noche boricua inolvidable
El triunvirato Franco-Brown-Osella posibilitó un 7-2 sorprendente a favor de Sionista. Ayuso y Pinnock, con extrema anarquía ofensiva, consiguieron evitar que los argentinos se escapen aún más en la misma apertura del juego, sin embargo era “la noche” de Clee Brown y Pedro Franco, una sociedad que supo alimentar a Osella.
La “Gran Torre de Oncativo” fue preponderante definiendo con altísima eficacia en la pintada donde Capitanes evidenciaba una actitud displicente que exasperaba a su técnico quien ni con Tiempos Muertos ni con modificaciones pudo al principio contener a “La Furia” entrerriana.
Ayuso y Santiago tiraron síntomas de revolución, pero lo de Brown era monumental y con un triple puso ventaja de 8 (18-10). Un triple de Pinnock sobre la bocina de clausura dejó los primeros 10 con un 20-14 que sinceramente no esperábamos a favor de los forasteros.
No lo citamos pues no tuvo cuota mayor en la veintena de puntos, pero sí en los espacios que creó bajo el cesto contrario y en toda la potencia expuesta bajo el tablero propio, concediendo enorme handicap de peso físico que se compensó con una garra majestuosa.
Sionista no brillaba por su contundencia pero tampoco marraba en exceso y asombraba por un 4/4 en Libres, más un elevado índice de asistencias.
Capitanes se mostró confundido por el astuto planteo montado por Svetliza aunque también sus jugadores, bien “a la caribeña” esgrimieron una actitud liviana, sin compromiso, amén de porcentuales de Cancha bajísimos.
El inteligente criterio expuesto por los “Celestes” en el ataque y su dinámica en defensa manifiesta, embarulló a los anfitriones.
Reapertura y se estira máxima
Ya a dos minutos y segundos, Sionista sacó brecha de 13 (27-14) con parcial de 7-0 a través de la terna Hure-Franco-Brown que circulaba la bola de manera impecable ante una defensa borícua complaciente en extremo.
Un Time Out de David Rosario y posterior triple de “Puruco” Lattimer frenó la escalada argentina.
Cruz en la base y Santiago abajo fueron influyentes para que los anfitriones mejoren su semblante ante un Centro Juventud que perdió poco a poco orden en ataque y así su traslado se tornó impreciso por unos minutos.
El centro 2m16 -ex Milwaukee y Phoenix- dañó hasta ponerse a 4 (29-25) con parcial isleño de 10 a 2.
El “despierte” argentino llegó mediante triples de Hure y Locatelli puntos que valieron para clausurar un primer tiempo inmortal en la historia de Sionista en el básquet profesional, potenciado obviamente por la crisis que estaba envuelto.
Hure concluía éstos 10 como bandera aunque Brown seguía siendo vital y el esfuerzo titánico de Zilli emocionaba auxiliado por Osella o el mismo “Cabrito” para contrarrestar la búsqueda de rebotes ofensivos de los dueños de casa.
Santiago anotó 8 en ésta parte, pero el sacrificio de los rivales con menor talla fue admirable para ganar el capítulo 17 a 15 y estirar el margen a 8.
Sionista mantuvo un buen promedio de Cancha pero sobresalió el hecho de no haber visitado la Línea y preocupó el aumento de pérdidas.
Capitanes probó menos fuera de los 6m75 y coincidentemente no ejecutó Tiros Libres.
Escape a la victoria
Santiago dijo “presente” en el scorer ni bien comenzó el tercer chico, pero bombas de Locatelli y Franco resultaron claves para sacar una brecha de 14 (45-31).
El head coach de Capitanes estaba furioso. Será por eso y por las 4 faltas de Osella que Capitanes dio un brusco giro de timón para ir al abordaje cual Piratas del Caribe.
Con un parcial de 20-2, liderado por Hutton, con Ayuso intratable de Tres, Pinnock brillante y un Santiago enorme, Capitanes pasó arriba restando poco menos de 2 minutos, 51 a 47.
Pero, como ya dijimos, Franco y Brown se habían propuesto vestirse de súper héroes y con un 4-0 desde la Línea, más un misil maravilloso de Patricio Rodríguez, Sionista se fue al último recreo corto 54 a 51, aunque perdiendo el cuarto por 22 a 17.
El “Pato” quebró un registro de 7 minutos sin goles de Cancha.
Franco fue lo mejor de un Centro Juventud que decayó notablemente en su rotación de la pelota producto de la mayor 
agresividad defensiva boricua. Esencialmente ya la bola casi no pudo entrar abajo ni a los internos ni vía penetraciones vía perimetrales. Menos aún…La mejoría en porcentuales de Capitanes impedían contragolpes. Así, Sionista anotó solo un doble en ésta parte contra los 5 del primero y los 4 del segundo.
Eso sí, registró un 3/3 de Tres y un milagroso 6/6 desde la Línea.
Por contrapartida, los locales sustentaron la evolución en lanzamientos de Dos y transiciones a partir de varios robos por ingenuos errores, especialmente en mitad de campo ante la presión impuesta por los atrapes caribeños.
Final electrizante
Entre Ayuso (afuera) y Santiago y Aubry (adentro) Capitanes pasó de nuevo arriba con parcial 6-0.
Una reaparición de Franco y otra subsiguiente de Hure atenuaron el castigo empardando en 59. A partir de allí fue un intercambio de hegemonías constante con luz no mayor a 3 puntos.
Hasta los 2 finales hubo un alternar en el figurar como piezas desequilibrantes. Franco-Locatelli-Osella-Brown repartieron responsabilidades en el sudamericano.
Aubry-Santiago-Ayuso cerraban más la resistencia arecibeña.
Restando 1’30” Ayuso es blanco de glorificación por una bomba que mete distancia de tres (69-72) pero 23” después el mismo Larry metió la pata y perdió un balón ante Clee quien después sería tapado por Aubry en una incursión por tierra de gigantes a falta de 49” 9dec..
Casi 5 segundos luego Osella desde el poste alto achicó a uno (71-72) y en la posesión sucesiva de Capitanes Cleotis Brown metió un tapón imponente a Pinnock.
A resto de 12 Franco le dio una asistencia de NBA a Zilli y el sanjustino anota pese a un foul enorme de Aubry cambiando la historia con un 73-72 que emocionaba hasta las lágrimas. Pudo ser mejor si los jueces vencían el miedo y le ponían foul al interno local dando ocasión de bonificación a Ale.
Tiempo Muerto y en la reposición Capitanes se jugó a que resuelva abajo Santiago pero el pivote de la selección centroamericana primero recibió tapa de Zilli y luego Hure le robó la pelota por el mismo recuperada en un cierre rudo pero legal de los paranaenses que festejaron el triunfo como un campeonato del mundo. Lógico. Entendible. Fue una victoria espectacular y 100 % merecida por el dispositivo montado, por la conducta psicofísica esgrimida, por el talento recuperado de algunas singularidades, por el 59 % de Tres con 10 lanzamientos convertidos de 17 ejecutados y un prodigioso 15 de 16 en Libres (94 %)!!!.
Halcones al borde de la clasificación
En el otro juego, Halcones Rojos de Veracruz se colocó a un paso de clasificar a la 2ª ronda de la Liga de las Américas de Clubes de Basquetbol, al derrotar a Cocodrilos de Caracas por 83 a 76. De esta manera, el equipo mexicano es el líder del Grupo D.
Por Halcones Rojos de Veracruz (2-0) sus mejores anotadores fueron Carlos Rivera y el panameño Jaime Lloreda, quienes encestaron 17 unidades cada uno, Paul Stoll colaboró con 14, en tanto Miguel Ayala finalizó con 11 unidades.
Por Cocodrilos de Caracas (0-2) destacaron a la ofensiva el dominicano Jack Michael Martínez, quien consiguió 22 puntos y atrapó 16 rebotes, Juan Manuel Herrera colaboró con 15, Tayron Thomas aportó 14 y Carl Edward terminó con 12 unidades.
Fotos: FIBA Américas.-