Liga Argentina de Basquetbol: Cátedra de Unión en el “Butta”

Una verdadera lección le dio Unión de Santa Fe a Echagüe en Paraná por la Liga Argentina de Basquetbol, Conferencia Noreste. Fue 71-84 pero hubo diferencia mayor de 28. El banco “Tatengue” cooperó con 26 pts. contra 6 del local. Gastón Marozzi 23 pts. 7/8 de 2 y 3/4 de 3, lo mejor del “Rojiblanco”. Agustín Carnovale (21) lo más digno del vencido. San Isidro sigue subiendo en la Noroeste. Hoy hay dos partidos.

 

Echagüe dejó anoche entrever que no estábamos equivocados cuando en pleno armado del equipo admitíamos el prestigio de sus valores Mayores como Alejandro Zilli, Mateo Gaynor, Agustín Carnovale y Bruno Oprandi, pero objetábamos el promedio de edad y la ecuación talla-peso para un certamen que es largo y durísimo, más allá de no estar (otra vez…) la presión de la Permanencia.

Peor aún… supimos poner acento en la ausencia de Gaynor en plena pretemporada para los ensayos, y luego fuimos enfáticos con su baja sin debutar por una nueva lesión de hombro.

 

Mientras que algunos se encandilaban con el dulce sabor de la victoria ante el limitado y diezmado Central Olímpico de Ceres, o celebraban el angustioso triunfo ante Oberá en Extra, una vez más fuimos los únicos en esgrimir un tono crítico, sin perder la fe de una reestructuración.

Por eso es que recurrimos al análisis y al exhibir nuestro punto de vista en cuanto a cómo lograr crecer, sin embargo, como ya tradicional por calle 25 de Mayo, la postura fue distinta.

 

Previmos lo del agotamiento gradual, más aún con el calor progresivo, como anticipamos que ni Laureano Zalio (con pretemporada accidentada…), ni Gonzalo Romero daban (en lo inmediato…) 100 % de garantías en el relevo de piezas desequilibrantes como Oprandi (escogido para ser “4” cuando en verdad puede hacer de todo estando al 100 % en lo atlético…) y Zilli.

Y eso que lo presagiamos en la previa y lo repetimos en pleno arranque de la temporada…

 

Este martes se vio un Echagüe “pinchado”. Como si la sumatoria de Emiliano Cancina le provocara un shock contrario al perímetro, pero a la vez en lo interno se acentuaron las ventajas ya concedidas, sobre todo a la hora de evitar el rebote ofensivo y/o las segundas chances del adversario.

Y claro está… en una noche infernal por la temperatura, Unión hizo las tareas perfecto. Juan Francisco Ponce y sus asistentes planificaron una obra casi ideal, y el repertorio de sus artistas fue por lapsos impecable.

 

Así, Oprandi anotó 5 puntos en 25 minutos con tan solo un rebote, y Alan Moreno encestó 7 en casi media hora de competencia con 3/7 de Campo.

Fernández, Carnovale y Zilli fueron lo más rescatable, pero todo a partir de singularidades. No hubo una línea, un patrón ofensivo y por eso nos quedamos pensando en que si tan sólida era la gestión defensiva santafesina, por qué no apostar más a la creatividad, al ingenio de la nueva pieza (Cancina).

 

No es grato expresarlo, pero nos quedó el amargo sabor que Ponce le ganó “su” match a Bonell. Por la estrategia, la táctica, el planteo, las variantes que introdujo y hasta supo disimular que se quedó sin Jordi Godoy en el segundo cuarto (lamentablemente no supimos cuál era el problema que lo aquejaba pero fue atendido atrás del banco por el cuerpo médico).

Teniendo en cuenta el calor insoportable, el head coach de Unión acertó en la administración de minutos, funciones, roles, y lógicamente tuvo jugadores compenetrados, consustanciados con la causa.

 

A Echagüe se lo vio sin confort en su propia casa. Y hasta vimos caras o gestos de impaciencia, de frustración, de desconcierto.

Las estadísticas no dejan al desnudo hondos contrastes. Los dos lanzaron bastante parecido, pero las 18 pérdidas, los puntos de cada banco, la influencia de cada juego interno, y el cómo se pasaron la pelota en cada costado inclina la balanza notoriamente a favor del ganador.

 

Y es absurdo desconocer que Unión jugó sin tres fichas de sumo valor: Tantos, Borsatti y Rippstein, los tres rehabilitándose de lesiones.

Está bien… Gaynor no pudo debutar, se le rescindió el contrato y fue suplido por Cancina antes de ayer. Pero ni siquiera Cancina pudo tirar destellos de lo que podría ofrecer para dar más frescura a la línea externa ya que Bonell le dio solo 6 minutos.

 

Podrán decir por allí que tenía dos prácticas encima, pero si se lo contrató era porque supuestamente estaba listo para sumarse como buen profesional que debe ser. O sea… solo necesitaba adaptarse a la filosofía del nuevo grupo.

Pero, como ya dijimos, si Echagüe no perdió por paliza fue porque el propio Unión bajó la intensidad pensando en lo que viene, y lo más rescatable del dueño de casa llegó de manos solitarias, no por manos solidarias. Así, Cancina pudo ser una variable que otorgue otro matiz o ni hablar que Carlitos Parker se quedó sin competir en el banco, vaya uno a saber por qué razón (hasta la tarde anterior al encuentro no había lesionados…).

 

Crónica de una noche para tener muy en cuenta…

 

Seguimos escuchando ciertas expresiones como “es una noche para el olvido…”. No… Todo lo contrario. Fue una noche para repasarla varias veces y replantearse el por qué de tan nula reacción ante un rival no tan complejo.

Unión empezó derecho con Marozzi, Martínez y Salaberry. Fernández y Carnovale aplacaron a los santafesinos, pero promediando el primer cuarto Bonell tuvo que recurrir a un Tiempo Muerto al ver la escapada de Unión mediante Martínez y Marozzi, aunque ni el “Stop” pudo contener el aluvión “Rojiblanco” ya que un triple de Godoy puso parcial de 0-9 y global de 5-16 para los de Ponce.

 

Fernández, Carnovale y Zilli le dieron otro “color” al ataque paranaense, en tanto García y Marozzi consolidaban el triunfo.

Ya en los 2 finales de este primer capítulo entre Osores (de nuevo cimentando la Ley del Ex), Jaime y Alloatti construyeron un 0-9 con el que bajaron la cortina a estos 10 minutos con un 14-31 notable.

 

Luego de casi un minuto y medio sin gol, Jaime y Marozzi pusieron el tablero 18-36 forzando en tan solo 3 minutos del 2° Cuarto a que Bonell apele a un “Minuto”.

En dos minutos, Echagüe anotaba de Dos con Zilli y Oprandi, pero Unión devolvía con bombas de Tres, vía Marozzi y Osores (un par). Se llegó a la mitad del 2° Chico 24-45 con un “Tatengue” inclemente.

 

Marozzi y Osores no lograban ser contenidos y restando 3 minutos Unión tomó diferencia de 28 (25-53) de la mano de un Jaime brillante, liderando pese a su juventud.

En los 3 minutos finales Fernández, Zilli y Carnovale hallaron vías de anotación y redujeron la supremacía con un 10-0 que promovía el renacer la esperanza, retirándose a vestuarios 35-55.

 

Del vestuario la única diferencia verificada fue un trámite más regular, sin rachas, con un Unión sereno, sin fisuras, simplemente contestando sólidamente a cada rebeldía entrerriana.

Lo más claro de Echagüe surgió de manos de Fernández, junto a chispazos de Carnovale, Moreno (sus primeros puntos recién en este capítulo) y Oprandi.

 

Marozzi, Martínez, García, Salaberry y N. Reynoso resultaron los más contundentes de un Unión que perdió por 17-13 en los 10 minutos que completaron la media hora de contienda.

 

La tónica se mantuvo en el inicio del 4° período. Salaberry y Marozzi lo más eficiente del “Rojiblanco”. Carnovale y Moreno (anotando su único triple de la noche) generaban ilusiones.

De pronto, N. Reynoso, Martínez y Osores establecieron parcial de 0-8, tomando 22 de diferencia el “Tate” a 5 de la conclusión.

 

El epílogo mostró a un Unión ultra conforme, relajado y un Echagüe que buscó disimular una histórica paliza ante su Clásico enemigo. Carnovale, Romero y Zalio consiguieron reducir la ventaja santafesina a 13 puntos, lo que sirvió para mitigar penas.

Más allá del 71-84, quedó flotando la impresión que algo se quebró en el seno íntimo del plantel. Perder, duele, obvio… el punto es cómo y ante quien.

 

Fernández jugó 38 minutos, Zilli 33, Carnovale 30 y se viene una gira tan intensa como durísima por los kilómetros a recorrer y el rigor que seguro plantearán los oponentes.

Dos caídas consecutivas perdiendo el invicto afuera y adentro. Sostenemos enfáticamente… Lo peor está por llegar. Ojalá la calidad, la jerarquía, el oficio de Zilli, Carnovale y Oprandi, influyan dentro del campo y Bonell le encuentre la vuelta a este bajón técnico y actitudinal.

 

Lo bueno, es que esto acaba de empezar y es preferible que se descubran rápidamente las limitaciones, las deficiencias, las carencias para subsanar todo a tiempo.

 

En “El Nido”

 

En otro partido correspondiente a la Conferencia Norte, por la División Noroeste, San Isidro se sacó de encima la visita de Independiente BBC de Santiago del Estero venciéndolo por 88 a 74 marcando la diferencia en los diez minutos de cierre con parcial de 30-16. Con este resultado San Isidro ascendió a la segunda posición y quedó a media unidad debajo de Barrio Parque.

 

Sergio Rupil con 22 puntos (8 en el último cuarto) y 4 robos, junto a Bruno Barovero (19, 9 en el último cuarto) y Pablo Fernández (15+6+5, 7 en el último cuarto), fueron las claves de San Isidro. Independiente (totalizó 21 pérdidas) tuvo a Bruno Ingratta (18) como principal aportante.

 

Agenda de miércoles

 

SPORTIVO AMÉRICA – CAO CERES

 

Hora: 21:00

Árbitros: Pedro Hoyo, Ariel Rosas y David Schkair

Estadio: Rodolfo Carrillo (Rosario, Santa Fe)

 

PETROLERO – ATENAS

 

Hora: 21:30

Árbitros: Julio Dinamarca, Alejandro Trias y Franco Ronconi

Estadio: Gimnasio Municipal General Enrique Mosconi (Cutral Có, Neuquén).-

Foto: Gentileza Face Oficial AEC.-