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Liga A: un tal Brítes lo mató a Sionista

Así como en Brasilia a Sionista le robaron el pase a la final de la InterLigas, este miércoles ese pésimo juez que es Oscar Brítes, con cierta complicidad de un árbitro que no ha tenido una buena temporada aunque no dudamos de su honestidad, como Daniel Rodrigo, le quitaron la chance justa, legítima a Sionista de convertirse en semifinalista. Quimsa tuvo sus méritos para imponerse por 81 a 78, aclaramos, pero lo de los árbitros fue bochornoso.

En un partido que cambió de dueño constantemente, Quimsa pudo ganarle anoche como local 81-78 en los segundos finales a Sionista, para ponerse 1-2 en la serie y forzar un cuarto juego, que se jugará el próximo viernes en el estadio Ciudad.

El primer cuarto comenzó parejo. En los primeros minutos Quimsa movía muy bien el balón y lastimaba con los triples de Treise y Brown, más la presencia efectiva de Román González en la pintura. Por su parte, la visita penetraba la pintura santiagueña, haciendo de Robinson y Zilli los goleadores del cuarto; para así darle el primer chico a Sionista por 17-14.

En el segundo tramo las acciones continuaron parejas. La Fusión, metía la bola abajo para el “chuso” González que comenzó a ganar en la pintura rival. Mientras que en la visita aparecía la mano encendida de Buchanan desde el perímetro. El parcial fue para Quimsa por 19-18, y llegaba al entretiempo dos puntos abajo, 33-35.

El tercer segmento inicio palo por palo, con los triples de Treise y Martínez. Pero promediando el mismo, el paraguayo clavó tres bombas consecutivas, para darle la máxima ventaja a Sionista de 9 puntos (55-46) a falta de 2,50.

Pero luego de un tiempo muerto pedido por Romano, Quimsa estampó un parcial de 7-0, gracias a una ráfaga de Treise. El periodo fue igualado en 25, y el visitante llegaba a los diez finales con dos puntos de ventaja, (60-58).

En el último parcial los equipos se prestaron el liderazgo en el marcador constantemente. Pero la fusión fue más inteligente para cerrar el juego, tomando dos rebotes fundamentales, y convirtiendo los tres libres finales, para lograr así un triunfo muy luchado ante un conjunto sólido como el entrerriano que por ciertos defectos propios en materia ofensiva, las virtudes ajenas ya expuestas sintéticamente y la patética actitud de Brítez como la complicidad (quizás inconciente) de Rodrigo, deberán quedarse 48 horas más en suelo santiagueño y rezar para que el viernes no sea una guerra. AMPLIAREMOS.-