La suba de tasas aplicada por el Banco Central golpeó al dólar
El dólar mayorista retrocedió de $17,65 a $17,52, mientras que el de venta al público cotizó a $17,83, diez centavos menos que en la rueda anterior. Así queda a la vista la incidencia que el alza del 27,75 a 28,75% dispuesta ayer por el BCRA en la tasa de referencia local, y el traslado que comenzó a tener en los rendimientos que ofrecen las Letras del Banco Central (Lebacs) que se operan en el mercado, que ahora van del 28,30% para el título a vencer en unos días y se elevan hasta el 29% para las que expiran en 200 o más días, comenzó a tener sobre un tipo de cambio ya presionado a la baja por las propias características de un programa económico que se apoya -en buena medida- en el endeudamiento externo.
“Como era de suponer, el dólar operó ofrecido ante la nueva suba de tasas. Era lógico que los bancos, empresas e inversores se tentaran a vender sus dólares para tomar posiciones en pesos, a efectos de colocar en las distintas variables que se presentan en la moneda local a tasas que no se veían desde 30 de agosto del 2016”, explicó Fernando Izzo, de ABC Mercado de Cambios.
“El impacto de la suba de tasa sobre el tipo de cambio fue pleno y le hizo perder al tipo de cambio en un rato toda la ganancia que venía acumulando en la semana”, coincidió el operador Gustavo Quintana, de PR Cambios.
“El mercado abrió muy ofrecido con ventas agresivas de los bancos y aunque a nivel de $17,52 apareció la demanda, apenas alcanzó para detener la baja del billete. Lo llamativo es que el mercado de futuros también se acomodó a la baja pero en menor medida que el valor de contado”, apuntó por su parte AgroGlobal en su reporte del día.
El fortalecimiento del peso frente al dólar estuvo en línea con la tendencia global ahora que bajó la incertidumbre respecto del recambio de autoridades en la Reserva Federal de Estados Unidos dado que el presidente Donald Trump nominó como sucesor de Janet Yellen a Jerome Powell, un ex abogado y ejecutivo (primer no economista en casi cuatro décadas), una figura que representa una continuidad conciliadora de las políticas gradualistas que viene aplicando el organismo en los últimos años.
De hecho el real se revalorizó 0,6%, el peso mexicano 0,4% y el peso chileno casi 0,3% frente al dólar. Pero el peso, con ayuda de una tasa reforzada, ganó esa carrera al subir casi 0,8%, lo que significa que el país resignó algo de competitividad cambiaria.
La baja del dólar muestra la expectativa de un mercado que ahora prevé el ingreso de una nueva oleada de capitales especulativos para aprovechar el premio de tasa. Vale recordar que durante septiembre, último dato oficial disponible, US$ 96,5 de cada US$ 100 que ingresaron al país los inversores extranjeros fueron a inversiones financieras.