La crisis del gremio cárnico se agrava
El frigorífico Alberdi de Oro Verde continúa cerrado y sus 200 empleados aguardan por las respuestas que tienen que llegar desde el Ministerio de Trabajo de la Nación. Jorge Rodríguez, el vicepresidente de la empresa de capitales entrerrianos, aseguró que “todavía no tuvieron noticias” refiriéndose al problema que vienen sufriendo desde hace dos meses.
El frigorífico dejó de faenar hace una semana y la solución no se vislumbra. Previamente habían otorgado licencias a los obreros ante la reducción de la jornada laboral.
La misma situación acontece en Santa Elena, lo que plantea un agravamiento de las crisis del sector, que incluye a plantas frigoríficas de menor superficie como el Frigorífico Angus, de Paraná. Como contrapartida, sólo la planta Swift de San José prevé una reactivación desde hoy, luego de operar con jornadas reducidas.
El empresario entrerriano Jorge Rodríguez, del Frigorífico Alberdi, fue muy cauteloso a la hora de hablar de los sueldos de los empleados. En su momento se habló de que los trabajadores recibirían una compensación por parte de la Nación.
“Son todas promesas y hasta que no vea los resultados no quiero decir nada”, comentó. Es que los trabajadores de la carne ya percibían en estos meses menos ingresos, por trabajar en jornada reducida.
Los que están atravesando la misma situación son los operarios de los frigoríficos de Santa Elena y de San José.
“No estamos faenando, pero sí estamos trabajando con el sector de conserva”, respondió una empleada desde Santa Elena.
En cuanto al frigorífico de la multinacional Swift ubicado en San José, se pudo saber que estaban trabajando en jornadas reducidas.
Cabe acotar que el gobierno nacional se comprometió la semana pasada a ayudar al sector mediante un subsidio que financiará el 30% de los salarios básicos de la actividad.
En Entre Ríos hay 4.000 trabajadores del rubro y muchos de ellos habían sido licenciados a causa de la baja actividad.
El Gobierno se comprometió a garantizar la estabilidad laboral de alrededor de 20.000 trabajadores de la carne, cuyos empleos quedaron en peligro a partir del cierre de exportaciones dispuesto por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, esquema que ahora sería revisado a partir de la presión de los gremios de la actividad cuyos trabajadores quieren volver a sus puestos.