La CGT elige autoridades y podría incorporar mujeres en la conducción
|A fines de setiembre o principios de octubre se elegirán las nuevas autoridades de la Confederación General del Trabajo (CGT) que busca rearmarse para recuperar el poder perdido. Al parecer, analizan incorporar a gremialistas mujeres para respectar el cupo sindical femenino. Los abogados del sindicato ya piensan en los aspectos legales de la convocatoria al congreso.
El poco poder de presión actual de la central obrera, excluida de las decisiones del Gobierno y con más del 40% de trabajadores informales parece completamente alejada de la CGT de los años setenta.
Por esto, los dirigentes creen que la elección de nuevas autoridades sería la fórmula para cambiar la relación de fuerzas. Primero, piensan muchos, deberían regresar sindicatos clave que dejaron la central obrera, como Camioneros, SMATA o los bancarios. Y también debería tener un proyecto claro, a la manera de aquellos 26 puntos de la CGT liderada por Saúl Ubaldini que constituyeron un programa que les permitió a los dirigentes tener una identidad e ideas definidas para confrontar con otros sectores.
Lo más novedoso que se analiza entre los dirigentes es la incorporación de gremialistas mujeres a la grilla de conducción de la central obrera para respetar el cupo sindical femenino y, por fin, ponerse a tono con la igualdad de género.
Hoy, dos grandes sectores pugnan por liderar la nueva CGT, publica Infobae. De un lado, “los Gordos” (como Héctor Daer, de Sanidad, y Armando Cavalieri) y los independientes (Andrés Rodríguez, de UPCN; Gerardo Martínez, de la UOCRA, y José Luis Lingeri, de Obras Sanitarias), más un puñado de aliados autonómos (como Antonio Caló, de la UOM), que son los que mantienen actualmente el control de la central obrera. Del otro, el moyanismo (con Pablo Moyano que tomó la posta de su papá Hugo y colegas de peso como Mario Manrique, de SMATA, más gremios como aeronavegantes, canillitas, marítimos, taxistas, viales y empleados textiles).
Todas las negociaciones actuales servirán para consensuar una sola lista de candidatos a integrar la CGT, pero en estos movimientos previos lo que resulta decisivo es saber qué sector reúne el mayor número de representantes al congreso cegetista (que cada gremio envía en forma proporcional a su número de afiliados) y así determinar quién tendrá el poder para condicionar la elección.
De la cantidad de aliados dependerá el reparto del poder en una futura CGT a la que todos imaginan más activa y demandante de mayor protagonismo.