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Justicia autoriza a fiscales partidarios a sacar fotos a los telegramas en las PASO

Luego de los planteos de los partidos políticos, Cámara Nacional Electoral deslinda responsabilidad en el Gobierno. De todas maneras, le advierte que podrán obtenerse imágenes de los datos que sirvan para el conteo provisorio de votos, y remarcan que no tienen valor legal.

 

La Cámara Nacional Electoral (CNE) cumplimentó la habitual convocatoria preelectoral y trató de evacuar varias de las dudas que subyacen sobre la implementación del recuento provisorio con vista a las PASO. Reiteraron que, pese a no ser de su injerencia directa, el Poder Ejecutivo debiera otorgar una serie de garantías con el objetivo de bloquear el aluvión de cuestionamientos que habían surgido respecto al rol de la empresa Smartmatic en cuanto a su gestión en el conteo provisorio.

No solo las agrupaciones opositoras solicitaron estar presentes en el momento sustancial del proceso de transmisión de los telegramas con los resultados, sino que también exigieron que haya un control “en tiempo real” de la conversión de los archivos escaneados para que se respeten los resultados volcados por las autoridades de mesa, dado los cambios de formato desde .tif a .pdf que se han venido detallando sobre las pruebas piloto.

 

Los fiscales partidarios van a poder obtener una foto con sus celulares del Acta de Escrutinio y del Telegrama (que debiera ser copia fiel) para poder controlar la información que se destine al escrutinio provisorio, con fines informativos. “Resulta evidente que existen diversas instancias o actos que integran el escrutinio provisional, sobre los cuales debe preverse expresamente la fiscalización y control por parte de las agrupaciones políticas contendientes en la elección”, concluyeron.

 

En la reunión los camaristas Santiago Corcuera y Alberto Dalla Vía recordaron que en 2017 habían establecido las condiciones para el recuento provisorio. “Las modificaciones procedimentales como las que aquí nos convocan hubiesen requerido que–más allá de las medidas paliativas de capacitación adoptadas mediante la Acordada 13/19- se efectuara un abordaje desde una perspectiva más integral”, indicaron. Más allá de recordar que el escrutinio provisorio está bajo la órbita del Poder Ejecutivo. En 2017 la Justica electoral había pedido quedar a cargo del conteo con fines informativos. Es una dulce venganza que toda la controversia política esté siendo absorbida por la Casa Rosada. “Corresponde dejar claramente establecido que, pese a reiterados requerimientos de este Tribunal, el escrutinio provisorio continúa bajo la órbita exclusiva del Poder Ejecutivo Nacional sin participación alguna de la justicia nacional electoral en las operaciones atinentes a su diseño, planificación, organización, procesamiento, cómputo y difusión de los resultados”, apuntaron los camaristas. Por lo demás, fueron categóricos contra el Gobierno al mostrarlos como parte “interesada” en el resultado: “Corresponde resaltar que esa circunstancia ha sido señalada por el Tribunal en atención a que constituye per se –y sin importar en ese punto el rigor técnico objetivo con que se realice- un factor de descrédito del escrutinio provisorio que genera dudas sobre la integridad de ese procedimiento, como consecuencia del propio diseño institucional de la autoridad a quien se encomienda la realización del recuento provisional, ya que se encuentra bajo la exclusiva responsabilidad de una de las partes interesadas en su resultado”.

 

“Es indispensable que la Dirección Nacional Electoral y el Correo Oficial prevean, documenten e informen dicho procedimiento, que deberá ser público y con posibilidad de participación de los representantes partidarios con aptitud técnica específica (fiscales informáticos o tecnológicos)”, respecto del conteo provisorio. Destacaron que es potestad de los partidos los métodos de vigilancia y control con el objetivo de asegurar la fiabilidad de los resultados. Y que el correo y la DINE deberán acreditar a los fiscales partidarios para “presenciar el escaneo y transmisión desde los establecimientos de votación”.

 

“No existe impedimento alguno para que los fiscales partidarios acreditados en cada mesa de votación obtengan fotografías de la documentación de escrutinio de mesa; siempre que ello no altere, dificulte o demore el normal funcionamiento de la mesa de votación, y dejando a salvo que tal potestad no implica modificación alguna del procedimiento de confección, resguardo y entrega de la referida documentación”, indicaron los jueces. Fue en respuesta a planteos interpuestos por los apoderados del Partido Justicialista, de la alianza Consenso Federal, el Partido Tercera Posición (P3P), y la Asociación Permanente por los Derechos Humanos (APDH) .

 

La decisión judicial conjura varios de los prejuicios con los que las fuerzas políticas avanzaban respecto a la elección. Los simulacros de transmisión en los establecimientos habían dejado dudas: primero respecto a la conectividad (había un Plan B para trasladarlos de manera física) y luego respecto de su conversión a de formato informático en la recepción en los centros de carga. Ahora, se agregará un nuevo control: el acta de escrutinio (única con valor legal que va dentro de la urna) suma los certificados para los fiscales (copia fiel) y la “foto” de los telegramas que sean escaneados. De esta forma, habrá un nuevo contralor para verificar si los datos volcados allí se corresponden con los que son transmitidos al centro de carga para el escrutinio definitivo. Nada quita, de todas formas, que el 11 de agosto haya planteos legales por el método que se implementará para el conteo provisorio.