Insólito y EJEMPLAR revés de Atenas

ESPECIAL (por Francisco Pancho Calderón).- En un final insólito, Atenas dejó escapar un partido que tenía en sus manos y celebró La Unión de Formosa. Casi nada quedaba del partido, cuando Bruno Lábaque no tuvo mejor idea que pegarle un voleo a la pelota pensando que el juego estaba cerrado. OBVIAMENTE, Rougier y Castillo penaron la actitud y desde la línea, con dos libres, de Lauría el team norteño dejó mudo el “Carlos Cerutti” acreditándose la primera alegría de la temporada.

 

El encuentro, por la 4ª fecha de la Liga, estaba DE-FI-NI-DO y más allá que pintaba para La Unión cuando a 1:16 para terminar Wolkowyski convirtió un triple (84-87) luego el equipo de Gonzalo García hizo todo al revés y le puso el triunfo servido a Atenas.

 

Una falta de Lamonte contra Bulfoni finalizó en doble de Hornsby (86-87). Después el moreno visitante lanzó de tres y libres, los falló todos, entonces el cierre le quedó a Atenas. Y una indecisión defensiva hizo que Hornsby dejara solo a Fierro para convertir bajo del cesto con 5 segundos por jugar. Atenas recuperó la primacía (88-87).

 

La última jugada fue a Lamonte. Decidió jugar la individual y emprendió corrida hacia el canasto (¿recibió falta?) pero falló y el rebote tampoco pudo ser capturado por Lewis, perdiéndose el balón por la línea de fondo.

Quedaban 5 décimas y era triunfo de Atenas. En ese momento, Lábaque entendió que el partido estaba concluido y pateó violentamente la pelota haciéndola atravesar de lado a lado.

 

El coach Gonzalo García ingresó raudamente al campo y con gestos ampulosos demandó se le aplique al base una falta técnica, teniendo la anuencia de Diego Rougier y Rodrigo Castillo quienes, pese a las súplicas de Bruno, mandaron a la línea a los de Formosa que a través de Nico Lauría modificaron el epílogo y consiguieron el primer triunfo de la temporada, nada menos que FUERA DE CASA por 88 a 89.

 

Reflexión

 

Bruno estuvo mal… MUY MAL… De eso no cabe duda. Pero no solo por mandar la pelota hasta el “Orfeo” de un voleo a 5 décimas del epílogo, sino por el MERO HECHO de PATEAR una bola. Él, quien mejor que él… SABE perfectamente que la “anaranjada” es una amiga, es “LA” amiga y hasta GRAN AMOR de todo basquetbolista, más aun de un “mago” como Brunito Lábaque uno de los talentos sobresalientes en la historia de la Liga.

 

Él debería ser EJEMPLO, PARADIGMA, de una Liga que necesita ser ESPEJO donde el “Semillero” pueda reflejarse. Anoche y hoy, muchos pibitos a lo largo y ancho del país, asimilaron esa infausta comparación consistente en: “si lo hace Lábaque, ¿por qué no yo?…”

 

Y hete aquí la falla MAS GRAVE de Bruno. El mal ejemplo que dio una de las GRANDES figuras de nuestra Liga. Sus compañeros, el cuerpo técnico, la dirigencia que tanto LABURA buscando que Atenas vuelva a hacer el MÚLTIPLE campeón, el hincha, sufrieron profundamente esa metida DE PATA de Lábaque. No obstante, lo PEOR, de lo que NADIE habla es del MAL EJEMPLO que se dio a los gurises, y ahí es donde TODOS LOS JUGADORES de la Liga deberían apuntar. A dejar de asumir actitudes, conductas, en las que se REFLEJEN los chicos de las Formativas, y hasta los Menores/Juveniles.

 

Párrafo aparte para los jueces

 

NO VIMOS el juego entero. Pero sabemos por colegas que Rougier y Castillo tuvieron un desempeño INCUESTIONABLE. Por ello, se perdieron AMBOS la chance de sentar un VALIOSÍSIMO PRECEDENTE: sancionaron con Técnica a Bruno, pero OMITIERON una conducta antideportiva y tan REPUDIABLE como el gesto del base: un miembro del Cuerpo Técnico, no se logra en el video identificar si es o no Gonzalo García, INVADIÓ el campo hasta la mitad, a escasos centímetros de Rougier, para DEMANDARLES A LOS JUECES la sanción correspondiente al acto antirreglamentario cometido por el jugador.

 

También deberían haber penado al BANCO de La Unión y ahí sí el FALLO HUBIESE SIDO 100 % JUSTO, como seguro que desde este miércoles NUNCA MAS un jugador agrediría a la “sagrada” pelota que solo se lanza, pasa, bota o cachetea pero JAMAS se patea y NUNCA MAS un técnico, asistente, colaborador o jugador del banco invadirían el campo para “vender” a un rival procurando sacar ventaja.

 

Se perdieron esa chance de pasar a la historia Diego y Rodrigo. Una pena. Perdió Atenas. Y en parte, PERDIÓ EL BÁSQUET.