Hernandarias-Paraná: el Sprint dio ganas de celebrar
Obviamente que no haber podido desarrollar la 18ª edición de la Hernandarias-Paraná generó profunda tristeza y hasta alguna dosis de fastidio. Pero fue muy clara la coyuntura: NADA tuvo que ver la gente de la Asociación Barrancas del Paraná, ni influencia nociva alguna en lo decidido tuvo el veedor FINA. La suspensión se debió pura y exclusivamente a las adversas condiciones climáticas y a la lógica imposibilidad de Prefectura en dar garantía o aval a quien se tire al río con un inconmensurable riesgo. Por eso, el consuelo de haberse disputado un emocionante Sprint fue la excusa ideal para plasmar una fiesta de premiación de alto brillo en la cual se agasajó además a Esther Núñez quien cumplía años.
El Salón Coliseo fue el escenario elegido para clausurar las actividades protocolares del Maratón Más Largo del Mundo 2012. Solo hubo premiación enmarcada en el Circuito Mundial para el Sprint del viernes. Las demás distinciones se realizaron respetando la ceremonia prevista para el broche de oro a los 88 Km. y de algún modo reconociendo los esfuerzos en el Sprint Exhibición no avalado por FINA y CADDA, pero sí organizado por FEN para tributar un marco de seriedad y/o respaldo al esfuerzo encomiable de la Asociación Barrancas del Paraná.
En la velada se tributaron reconocimientos con trofeos al Sprint tradicional previo a la competencia del domingo, también hubo Copas instituidas por Quini 6 y BICA, en tanto que la Sociedad Italiana de Socorros Mutuos, Cultural y Recreativa entregó presentes a los tres nadadores italianos, Andrea Volpini, Edoardo Stochino y Rodolfo Valenti.
Cabe acotar que los premios dinerarios (aproximadamente 7 mil dólares) fueron distribuidos en partes iguales a los mejores nadadores del Sprint del viernes, tributo cumplimentado minutos antes en el Gran Hotel Paraná.
A la fiesta concurrieron el vice-intendente de Paraná, Gastón Grand, y el subsecretario de Turismo Municipal, Carlos Chino Monti.
Una formidable elección del servicio gastronómico, con bocadillos fríos sabrosísimos, y platos calientes servidos a modo de copetín, se acompañó con una generosa y muy bien atendida barra de bebidas dispuesta por la gente de Bruzzoni.
Inicialmente estuvieron unos pocos medios locales, mientras que, después de la entrega de premios quedó solo la cámara de Cuestión Entrerriana para mostrarles las postales más destacadas de una noche muy divertida en la que el holandés Daan Glorie se ganó el premio al más simpático, más allá que imperó una excelente onda por parte de todos los nadadores, menos la Legión rusa que había partido hacia Europa horas antes del último Sprint.
Ya habrá tiempo para el análisis pues hay mucho aún por corregir. Por ahora nos queda por publicar en cuestión de horas el balance del Veedor FINA, el ecuatoriano Jorge Delgado, en una nota muy jugosa que realizáramos éste martes por la mañana en el bar del Gran Hotel Paraná, exquisitos cortaditos de por medio.
Y entre mañana y jueves pondremos punto final a las publicaciones sobre un acontecimiento que, seguimos insistiendo, debería “venderse” mucho mejor en materia de marketing, publicidad, prensa y difusión como en lo inherente a protocolo y relaciones públicas para que arroje un verdadero éxito organizativo.
