Grave denuncia involucra a Débora Giorgi
|Denuncian que Débora Giorgi distribuyó $ 360 millones sin control. Son fondos del programa “Capital Semilla” del ministerio de Industria, repartidos entre 2010 y 2015. Sólo se rindió el 5% del total. Giorgi forma parte del “aguantadero K” del municipio de La Matanza, integrado por varios exfuncionarios que se quedaron sin cargos tras la salida de Cristina Kirchner y Daniel Scioli del poder. La exministra de Industria tiene como compañeros al extitular bonaerense de Salud Alejandro Collia y al exjefe de Asuntos Agrarios de la provincia Alejandro “Topo” Rodríguez, entre otros.
“Traté de traer a los mejores que consideré para que nos acompañaran”, dijo el sábado pasado la intendenta Verónica Magario en “La Noche de Mirtha”. Lejos de los elogios de la jefa comunal, Giorgi quedó bajo la lupa de la justicia por la falta de control de fondos millonarios en su paso por el ministerio de Industria de la Nación.
El programa “Capital Semilla” anunciado durante el kirchnerismo otorgaba créditos a tasa cero y sin garantías de entre $ 15.000 y $ 60.000 para financiar proyectos de jóvenes emprendedores. El plan funcionaba bajo el sistema de “préstamo de honor”: el crédito se devolvía de acuerdo a la evolución de cada proyecto, que sería evaluado por universidades nacionales, que además brindarían tutorías.
Más allá de las buenas intenciones del plan, el programa estuvo teñido de irregularidades, que se descubrieron mucho después de cometidas. La unidad de auditoría interna del ministerio de la Producción -ex ministerio de Industria- detectó que entre 2010 y 2015 el programa entregó más de $ 360 millones sin control. Sólo fueron rendidos $ 18,4 millones, el 5% del total.
No sólo esto, sino que también se descubrieron “avivadas” como el otorgamiento de fondos a varias personas que presentaron el mismo proyecto, préstamos “duplicados”, transferencias de montos mayores a los que correspondientes, pagos a personas que no se habían inscripto y hasta ganadores que nunca recibieron los fondos correspondientes.
A partir de este informe la Oficina Anticorrupción presentará una denuncia penal bajo la acusación demdefraudación en perjuicio de la administración pública e incumplimiento de los deberes del funcionario a los encargados del programa, indica Clarín.
Así funcionaba el programa
En el plan había dos instancias de evaluación para decidir cuáles eran los proyectos ganadores, tarea a cargo de las universidades nacionales. Los elegidos luego recibían los fondos y tenían seis meses para invertirlo. El sistema del plan era el de “préstamo de honor”, por lo que los beneficiarios lo devolvían sin intereses ni gastos, pero sólo si el proyecto era exitoso.
Las nebulosas del programa aparecen en el control de los fondos otorgados. Dos resoluciones de 2013 y 2015 determinaron que quienes recibían el préstamo -tras los seis meses para gastarlo- tenían 30 días para presentar facturas y comprobantes de los gastos.
Este es el punto más oscuro de la trama, ya que de los $ 360.418.608 que el porgrama “Capital Semilla” entregó entre 2010 y 2015 sólo se rindieron $ 18.425.849, es decir un 5,1% del total. “Puede afirmarse que el Estado Nacional, a través del Programa Capital Semilla, sencillamente ‘regalaba’ dinero sin control alguno”, indicaron desde la auditoría.
Algunos de los casos más escandalosos: préstamos a dos sanjuaninos que luego se asociaron en un mismo proyecto; entrega del doble beneficio a dos personas que se presentaron en dos ventanillas distintas de la región Patagonia y Cuyo; ganadores que recibieron más fondos que los estipulados y hasta beneficiarios que no recibieron un peso.
Sólo en 2013 se aprobaron préstamos por $ 10.000.000 pero se transfirieron $ 7.400.000. Del resto no se sabe nada.