Maran Suites & Towers

Grassi rompió el silencio

Tras la condena a 15 años de prisión para Julio César Grassi, y en medio de la polémica sobre su excarcelación, el sacerdote rompió hoy el silencio, reiteró su inocencia y aseguró que “apareció un testigo nuevo que creo yo puede llegar a dar vuelta la causa”.

Asimismo, ante la posibilidad de que un Tribunal Criminal de Morón decida el martes si lo envía a prisión afirmó que no quiere ir preso porque eso sería “perder el tiempo” dado que “una persona inocente no tiene que estar en la cárcel”.

Mientras, fiscales y abogados querellantes del juicio que decidió la pena solicitan la inmediata detención del sacerdote en las causas que lo acusan por abuso sexual y corrupción de menores .

Grassi también consideró que era un “plantea absurdo” sostener que pudo recorrer un trayecto de más de una hora entre los dos sitios donde se le adjudicaron los abusos en una basílica, una vivienda en Hurlingham y una radio.

El sacerdote advirtió que “en un delito que es palabra contra palabra hay que buscar la credibilidad a través de las cosas que están alrededor, porque acá pruebas no hay ninguna”.

“De 130 testigos todos fueron a hablar de oídas, de terceras personas que dijeron o me dijeron”, añadió.

Grassi reveló a radio Belgrano que “apareció un testigo nuevo que hizo una denuncia en Capital que yo creo que puede llegar a dar vuelta la causa”.

Y, resaltó que “todo este escarnio que estoy viviendo, este pesar de limitaciones en mis actividades, no poder desarrollar mis vocaciones como sacerdote, educador todo esto son barrotes en la cara y en el corazón. Es terrible”.

“Quien imagina estar sentado en mi silla tiene que pensar que es una silla eléctrica”, acotó el sacerdote para graficar su situación judicial que se complicó esta semana luego de que fiscales y uno de los jóvenes que lo acusó de abuso reclamaron al Tribunal Oral en lo Criminal 1 que ordene su detención.

Pedido de prisión

Sergio Piris, el abogado de “Gabriel”, presentó ante el Tribunal Oral Criminal 1 de Morón el pedido de detención de Grassi. La fiscalía también hizo lo propio ayer ante el mismo tribunal, coinciden en los fundamentos.

Según Piris, representante del joven conocido como `Gabriel`, de cuyas denuncias se llegó a una condena de 15 años de prisión en segunda instancia, “antes, Grassi asistía con puntualidad a todas las audiencias y cumplía con lo que la justicia le requería porque tenía expectativa de salir absuelto”.

“Esa posibilidad se fue alejando tras el fallo de primera instancia (del TOC 1 de Morón) y su confirmación en segunda instancia (Cámara de Casación)”, explicó Piris, quien enfatizó: “ambos pronunciamientos salieron por unanimidad de los jueces”.

Para el letrado, “hoy el peligro de fuga del sacerdote es una realidad”.