Gestión Milei: El presupuesto destinado a reducir la violencia de género cayó un 33%
|La frase “No hay plata” no deja rincón del Estado sin alcanzar. Y el dato resalta triste, a horas de celebrar un nuevo aniversario del “Ni Una Menos”, que se grita desde el 3 de junio de 2015.
Previsiblemente, las oficinas gubernamentales dedicadas a proteger derechos de las mujeres están especialmente afectadas por el recorte estatal: algunos de los programas como Acompañar, la Línea 144, Acercar Derechos y otros similares están prácticamente interrumpidos.
Estos datos surgen de un informe que acaban de publicar dos ONG: Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA) y la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ). En el trabajo de monitoreo, ambas instituciones demuestran que, tras seis meses de gobierno, “se destaca la interrupción de hecho de algunos programas, la disminución de recursos humanos y financieros y la falta de actualización de datos sobre su funcionamiento”.
El primer punto indicativo lo muestra el dato de que, a pesar de que han transcurrido casi seis meses desde la creación de la subsecretaría encargada de estos temas –y tal como sucede en otros organismos públicos– la actual gestión continúa sin tener una estructura interna aprobada. Esto, claramente, implica un obstáculo para el correcto desarrollo de sus tareas, entre las cuales se encuentra la de diseñar e implementar el Plan Nacional de Acción contra las Violencias para el período 2024-2026.
Pero el administrativo no es exactamente el único problema. Las partidas para el tema están en crisis: “Aunque las asignaciones presupuestarias fueron prorrogadas nominalmente, al igual que el resto del presupuesto, la baja en la ejecución del primer bimestre de 2024 es mucho más marcada que en el presupuesto total, observándose caídas superiores al 50% en todos los programas.
El gasto en las políticas públicas que, según el propio Estado, apuntan a reducir la desigualdad de género fue, en lo que va de 2024, un 33% más bajo que el año pasado. Este ajuste es incluso más fuerte que el que sufrió el presupuesto nacional total, que fue del 24%
Esto explica, en parte, la parálisis que padecen todos los programas de prevención y asistencia, con una caída del 80% en la ejecución interanual del presupuesto del programa Acompañar y del 25,52% del presupuesto dedicado a la atención de la Línea 144.
Por otra parte, se está reduciendo la capacidad de las instituciones para poder brindar atención y protección a través del apoyo económico o subsidios, por lo que muchas mujeres en situación de violencia simplemente dejan de buscar ayuda y regresan con su agresor. Y a esto se le agrega que aumenta la frecuencia de los discursos de odio y la violencia hacia mujeres y los colectivos Lgbti+.
Entre los ejemplos de abandono de estas políticas de protección de derechos, el estudio de ELA y ACIF comenta el de la Línea 144. Se trata de un dispositivo que brinda atención, contención y asesoramiento a personas en situación de violencia por motivos de género a través de un servicio telefónico gratuito, WhatsApp, correo electrónico y videollamadas.
De acuerdo a los estudios y presentaciones hechas por los funcionarios ante el Senado, este sistema tiene, para todo 2024, un presupuesto vigente de 898,7 millones de pesos y ya lleva ejecutados 542,7 millones. Si se compara interanualmente la ejecución cuatrimestral, se observa una reducción del 25,5%.