¡Felicidades!: pasó el “Día D” tranqui… A no relajarse…
Pese a todos los pronósticos inquietantes que circularon en diferentes ámbitos de la sociedad paranaense, no hubo saqueos ni episodios delictuosos en masa. La Policía de Entre Ríos dispuso un operativo de prevención especial que tuvo sus frutos.
Los murmullos perturbadores circulantes en todos los estratos de la comunidad local quedaron, como debía ser, en la nada. Los últimos hechos que conmocionaron a los entrerrianos, sobre todo a los hermanos concordienses, ésta vez no tuvieron instigadores activos y primó la paz.
La gran movilización de efectivos policiales, y sobre todo el trabajo logístico de Inteligencia y/o de Investigaciones tuvo sus frutos. La prevención fue eficaz en barrios, periferia macro y microcentro, aunque también fue preponderante la desactivación de potenciales insurrectos o insurgentes que días atrás sí pudieran promover los lamentables sucesos de público conocimiento.
Sin darse oficialidad, la Policía de Entre Ríos habría penetrado en los barrios en las jornadas previas a este viernes, advirtiendo que de concretarse nuevos episodios de robos/saqueos la represión no solo se daría ante el delito en sí sino que en ese mismo momento se profundizarían al máximo los allanamientos (o “razzias”…), caiga quien caiga y de ser necesarias se apelaría a aprehensiones precautorias según antecedentes o causas en desarrollo que ameriten sospechas.
En tanto que, otro rumor habría pesado fuerte y se centró en la hipótesis inherente a que pudo haber “fogoneros” desde la propia sede policíaca y para ello se habría puesto especial énfasis en fiscalizar uso de celulares y/u otro equipamiento de la fuerza en contra de la misma o en beneficio de los delincuentes.
Lo concreto es que pasó el viernes 20 y es de esperar que no se haya puesto ésta fecha como “Día D”, pergeñándose un plan para lo que resta de estas jornadas festivas, registrándose circunstancias delictivas cuando menos se espere, “jugando” con las “garantías” de haber montado una operación de Seguridad excepcional con resultados satisfactorios lo cual puede conllevar al relax o al exceso de confianza conjugado en un “ya no va a pasar nada… Está todo controlado”.