Evalúan que tardaría una semana la extradición del presunto tirador de Congreso
|Juan José Navarro Cádiz, alias “El Cebolla” (25), sigue preso en Uruguay a la espera de ser extraditado. La Justicia firmó el exhorto y la Cancillería lo envió, pero las autoridades estiman que podría pasar una semana hasta que regrese al país para ser indagado.
Navarro Cádiz, una pieza central en el caso, es el único de los seis detenidos que no declaró en sede judicial argentina tras la agresión a tiros donde fueron asesinados el funcionario nacional Miguel Yadón (58) y el diputado riojano Héctor Olivares (61).
En los allanamientos realizados en domicilios vinculados a “Cebolla” encontraron el arma calibre 40 que se usó para el ataque. Es él a quien señala Juan Jesús “Gitano” Fernández (42) como el tirador. Y logró salir del país durante las primeras horas del viernes por el cruce de Colón-Paysandú, en la provincia de Entre Ríos.
“Ingresó con su DNI, no hubo ningún ingreso irregular que eventualmente pudiera dar lugar a una expulsión. No se cumplieron ninguna de las circunstancias previstas en ley uruguaya para terminar en una expulsión”, explicó el fiscal de Homicidios Juan Gómez.
Además, aclaró que “Cebolla” fue capturado frente a un hotel de Montevideo cuando se disponía a registrarse. “Estaba junto a su madre, un hermano y una tía, que quedaron demorados hasta que se constató que no había ningún impedimento legal contra ellos y se dispuso su liberación”, explicó Gómez, quien dijo estar a la espera de la documentación correspondiente para concretar la extradición.
Desde el juzgado de Mariano Iturralde indicaron que se firmó el pedido y desde el Gobierno nacional confirmaron a Clarín que el exhorto ya fue enviado.
El trámite demorará una semana, según los cálculos. Ante el fiscal uruguayo, Navarro Cádiz negó haber sido el autor de los disparos y “aceptó” la extradición. Además, “manifestó su deseos de ponerse a disposición” de la Justicia argentina.
Ramiro Rúa, abogado de la familia Fernández Cano, sostuvo en las últimas horas que Estefanía Fernández Cano no mantenía ninguna relación con Yadón, como trascendió días antes de su arresto.
“Ni Juan Jesús Fernández ni su hija tienen conocimiento de Yadón ni de Olivares. Navarro Cádiz estaba en el auto de Fernández, sentado en el asiento del acompañante, sacó el arma, cruzó el brazo por el pecho y dispara. La versión que sostenemos es que fue al voleo”, sentenció Rúa.
Además, repitió la versión de padre e hija, que responsabilizan directamente a Navarro Cádiz y niegan cualquier tipo de planificación del ataque, en contraposición a lo informado en conferencia de prensa por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien habló de “un crimen por códigos de sangre, mal llamados códigos de honor”.
“Las declaraciones fueron muy explícitas respecto de la conducta de Navarro Cádiz. Lo definen como agresivo, irascible. Se peleaba con todo el mundo. Se le subió al auto a Fernández, le contó que se estaba llevando mal con su mujer y sus suegros. Le pidió que lo llevara a comprar medicamentos para su pareja. Se va, al rato vuelve a aparecer, Fernández no detecta que estaba armado, intenta calmarlo respecto de las peleas con la mujer hasta que de repente se enoja, se violenta, saca la pistola por delante del cuerpo de Fernández y dispara”, dijo el abogado.
Para identificar el móvil del crimen serán clave las pericias en los teléfonos celulares, principalmente en el iPhone de Yadón, para probar si realmente existía algún vínculo entre las víctimas y los detenidos.
Olivares murió este domingo en el Hospital Ramos Mejía. En las últimas horas se había agravado su estado de salud.