Espert cerró la campaña a pura fiesta
José Luis Espert y Luis Rosales, la formula presidencial del Frente Despertar, cerró su campaña con el formato de “Espert Fest” en una disco de Palermo, que desde temprano se colmó de banderas del Partido Libertario y la UCEDE.
Con “música disco y bolichera” los militantes espertianos, en su mayoría sub-25 esperaban mientras bebían unas cervezas, comían pizzas y subían imágenes a las redes sociales, uno de los espacios en donde la fórmula liberal se mostró más fuerte en estos meses.
El evento comenzó con un video con imágenes del “economista candidato” en actividades de todo el país y en intervenciones televisivas recientes. El público presente ovacionó el fragmento del Debate presidencial en el que Espert le preguntó a Alberto Fernández si siendo jefe de gabinete no había visto nada de la corrupción kirchnerista o si era cómplice.
Las palabras iniciales las dio Luis Rosales: “Esta será una gran noche” dijo.
“Espert ocupa un espacio politico fundamental que nadie ocupaba y lo hace con la fuerza de todos los jóvenes que quieren cambiar este sistema que devora a la gente de a pie”, agregó en la antesala de la llegada del candidato presidencial al escenario.
Fiel a su estilo, Espert subió al escenario a los saltos de la mano de su esposa María Mercedes González, quien estuvo presente en varias actividades durante la campaña.
“¡Lo logramos! ¡El futuro es liberal y ya llegó! Logramos llevar las ideas liberales a lo mas alto después de 35 años y vamos a competir en esta primera vuelta. Este proyecto político no es una calentura. Vinimos para quedarnos y para llegar a la presidencia de la República. Vamos a pelear por legisladores en 2021 y vamos a ganar la presidencia en 2023”, aseguró.
“Les dijimos ‘chorros’ a los sindicalistas como Baradel y Moyano; denunciamos a los empresarios prebendarios; somos los únicos que defendemos al ciudadano de a pie, al estudiante, el profesional o empresario que quiere progresar en base a su esfuerzo”, agregó.
“Esto recién empieza. Estamos felices,” cerró Espert con el puño cerrado, en un gesto que desde su partido califican como la síntesis de una campaña en la que tuvieron que luchar contra infinidad de obstáculos para llegar a estar en el cuarto oscuro el próximo domingo.
La fiesta se extendió hasta entrada la noche y más de 3.000 jóvenes bailaron e hicieron cola para sacarse selfies con el candidato.