Ensayan Libertad y Echagüe en Sunchales
A 18 días de su retorno oficial a la Liga Nacional de Basquetbol, Echagüe afronta esta noche su primer ensayo competitivo. En Fernando Dentesano 923, “El Hogar de los Tigres”, los de Paraná visitan a Libertad de Sunchales. Coincidentemente, el primer rival de la temporada 2016/2017. Arranca a las 20.30 horas.
Facundo Muller apostó a la renovación de los bases Juan Brussino y José Vildoza (U23), del escolta Marcos Saglietti y los internos Alejandro Alloatti y Pablo Barrios.
Entre las contrataciones sobresalen el gualeguaychuense Sebastián Vega, el ala fuerte venezolano Miguel Ruiz, el ala-pivote estadounidense Gary Flowers y el paranaense Lucas Goldenberg (U23), retornando a la entidad “Cañonera” Franco Vieta.
En Echagüe siguen Lisandro Ruiz Moreno y Eugenio Zustovich, regresando Sebastián Uranga Junior y sumando al cuerpo técnico la presencia experimentada de Daniel Maffei.
Ignacio Barsanti, el coach original pero que no pudo estar al frente por falta de matrícula de Primera, había optado por Joaquín Baeza, Carlos Buemo y Emilio Stucky, amén de las precitadas renovaciones.
El entrenador nicoleño eligió para reforzar la estructura a Matías Nocedal, a Franco Barroso, y a los extranjeros Dallin Bachynski, Kodi Augustus (quienes ya están trabajando con el “Negro”) y Brandon Davis, quién aún no ha desembarcado en la Capital entrerriana.
El “nuevo” Echagüe es una incógnita absoluta. Inicialmente armado para jugar el TNA, se fue reestructurando pero con un jugador que en la anterior temporada estuvo precisamente en el Ascenso (Barroso) y con un guardia del cual hace años se esperaba su proyección como sucesor de Manu Ginóbili aunque ello no ocurrió (Nocedal).
Aparte, fiel a su posición de preferir foráneos que no conspiren contra el austero (y sincerado) presupuesto, la dirigencia de Echagüe confió en tres debutantes en Liga, de valores (económicos) muy por debajo del resto de la mayoría de los extranjeros en equipos que apuntan a discutir el título.
De los tres, el que mejor pinta en cuanto al rinde es Bachynski. Sus antecedentes de guerrero solidario, de luchador incansable, de entrega incondicional por el equipo y, obviamente, su talla lo sindican como una ficha de relieve.
Augustus pinta más para “3” que para “4”. No está mal. Habrá que ver cómo actúa ante defensas mucho más duras que las soportadas hasta hoy.
Algo similar sucede con Davis. Los highlights apreciados revelan que es una especie de Reynaldo García (“1” o “2”) con mucha necesidad de tener la pelota en sus manos y de decidir. No hay otra que esperar a su tardía llegada para empezar a constatar que puede jugar con tanta soltura ante marcas más agresivas.
Y vale la pena repreguntarse… Si Davis la rompe (ojalá…), ¿para qué estarán Nocedal y/o Ruiz Moreno? ¿Y Baeza? ¿Jugando para el norteamericano? Mmmmm… Dudoso… Ni hablar de los pibes Buemo y Zustovich… Ya anunciamos: Davis, alero, no es. Es un 1-2-3 con enorme apetito por la bola. Que hace y deshace a su antojo.
Los archivos no mienten. Vayan a Youtube y mírenlo. Nosotros sí lo vimos. Interesantísimo. Gran talento. Buena actitud aunque para atacar el cesto rival. No tenemos idea cómo responde a la hora de cuidar el propio.
Si Davis termina siendo la “bandera”, el “estandarte” de este equipo (bienvenido sea…) habrá que ir pensando quizás, tal vez, en una reformulación de la integración del plantel.
Lógico… Estas son apreciaciones preliminares. Iremos profundizando con el correr de los días y en especial cuando llegue Davis, que estaría arribando dos semanas antes del estreno, una decisión que no compartimos por todo el tiempo que se pierde desde amplísimo punto de vista.