Empresas del agro y la biotecnología en alerta: Bioceres S.A. en default y un sector bajo presión

En medio de un escenario financiero complejo, la empresa biotecnológica rosarina Bioceres S.A. entró en default con pagarés por US$ 5,31 millones vencidos en junio, a los que se suman otros US$ 2 millones de compromisos demorados este mes. Según la Central de Deudores del Banco Central, la firma acumula una deuda bancaria de $5.881 millones, en su mayoría con el banco Santander.
Este nuevo incumplimiento se suma a los ya registrados por otras empresas del sector agroindustrial como Los Grobo, Agrofina y Surcos, lo que comienza a configurar un patrón de dificultades financieras en uno de los pilares de la economía argentina: el agro y sus industrias asociadas.
Separación societaria y estructura compleja
Bioceres S.A. fue hasta el año pasado el principal accionista de Bioceres Crop Solutions Corp, la firma conocida por sus desarrollos en semillas genéticamente modificadas resistentes a la sequía, con presencia global y cotización en el Nasdaq bajo el símbolo BIOX. Sin embargo, tras una reestructuración societaria realizada este año, ambas compañías operan ahora como entidades separadas, con accionistas y operatorias independientes.
La estructura del grupo es compleja: Bioceres Group PLC y Bioceres S.A. pertenecen a más de 400 accionistas, entre ellos operadores, procesadores y comerciantes agrícolas de la región. En junio, la estructura se reconfiguró aún más con la fusión de Bioceres Group PLC (junto a Nutrecon LLC y Gentle Tec) con Moolec Science, una empresa argentina dedicada al desarrollo de proteínas animales y aceites nutricionales. Así nació MLEC, la nueva identidad bursátil en Nasdaq, con Alejandro Antalich como CEO, en reemplazo de Federico Trucco, histórico referente del grupo.
Qué pasa con Bioceres Crop Solutions
Pese al default de Bioceres S.A., fuentes cercanas a la compañía aseguraron que no se anticipan consecuencias inmediatas en Bioceres Crop Solutions (BIOX), que mantiene una estructura operativa y accionaria independiente. De agravarse la situación, los acreedores de Bioceres S.A. podrían ejecutar parte de su participación en BIOX, lo que alteraría el mapa accionario, aunque por el momento eso no se ha producido.
Bioceres Crop Solutions y sus subsidiarias (como Rizobacter, Bioceres Semillas y ProFarm) no presentan inconvenientes financieros hasta ahora. Sin embargo, su acción cayó un 55% en los últimos 12 meses y acumula una pérdida del 19% en lo que va de 2025, en línea con resultados trimestrales por debajo de las expectativas y rumores de un posible interés del gigante cripto Tether en adquirir el control de la empresa, tras su desembarco en Adecoagro.
Además, la calificadora FIX bajó esta semana la nota crediticia de Rizobacter de A+(arg) a A(arg), con perspectiva negativa, pese a que la empresa informó el pago en tiempo de sus obligaciones negociables.
Un síntoma de la economía real
Aunque estos casos puedan parecer aislados o meramente financieros, reflejan un problema más profundo: la dificultad de varias compañías para adaptar su planificación financiera a un escenario de menor liquidez y apreciación cambiaria, factores que han deteriorado su calidad crediticia. Las reestructuraciones recientes de Surcos, Los Grobo, Agrofina, Celulosa y Aconcagua, entre otras, evidencian las tensiones estructurales que atraviesa la economía real argentina.
Más allá de que los defaults sean técnicamente privados, que esté pasando reiteradamente en sectores productivos clave y su impacto en bancos, proveedores y el mercado de capitales argentino, los convierte en indicadores de la fragilidad de la economía argentina actual.