Elecciones en Francia: la ultraderecha de Marine Le Pen obtuvo un triunfo histórico
|La ultraderecha de Marine Le Pen consiguió su primera victoria desdiabolizada y elegida por el electorado francés, en la primera vuelta de las elecciones legislativas. Reagrupamiento Nacional, el ex Frente Nacional de su padre, Jean Marie, obtuvo el 34 por ciento de los votos, la Izquierda reunida en el Nuevo Frente Popular consiguió el 28,1 por ciento y el partido presidencial quedó postergado al tercer lugar, con el 20, 2 por ciento.
La segunda vuelta el próximo domingo será quien decidirá si Reagrupación Nacional consigue una mayoría absoluta, que fuerza al presidente Emmanuel Macron a convocar a ellos y a Jordan Bardella como primer ministro a un gobierno de cohabitación.
El presidente Emmanuel Macron llamó a un “largo unión claramente democrática y republicana” para enfrentar al lepenismo el próximo domingo, en un comunicado.
“La participación elevada muestra una voluntad de clarificar la situación política”, estimó el presidente, sin hablar al país.
Ni bien se conocieron las proyecciones, Marine Le Pen, la líder partidaria y ideóloga del reciclamiento del ex Frente Nacional, llamó al electorado unirse a sus filas desde su feudo en el norte de Francia.
Le Pen cree que “el bloque macronista” está “prácticamente borrado”. “La democracia ha hablado”, declaró Marine Le Pen, pocos minutos después del anuncio de los resultados. “Los franceses han demostrado su voluntad de pasar página tras siete años de poder despectivo y corrosivo”, añadió, elogiando “una señal de confianza que nos honra y nos obliga”.
“Necesitamos una mayoría absoluta”, rogó Marine Le Pen y llamó a “unirse a la coalición” de la RN. “Los invito a renovar su voto si eligieron a nuestros candidatos en la primera vuelta”, afirmó Marine Le Pen. “Si han tomado otra decisión, los invito a unirse a la coalición de seguridad, libertad y unidad” dijo, tras ser reelecta nuevamente como diputada.
Para ella es fundamental esta convocatoria. Si consigue la mayoría absoluta de 289 diputados habrá cohabitación y Jordan Bardella será el primer ministro de Francia. El gobierno con Macron se volverá imposible. El objetivo de Marine es forzar a Macron a la renuncia y conseguir elecciones presidenciales anticipadas, que ella aspira a ganar antes de las pronosticadas en el 2027. El presidente no podrá volver a disolver las elecciones legislativas hasta septiembre del año próximo.
“La unión nacional” para Bardella
Fue después el turno de Jordan Bardella, todo vestido de negro y camisa blanca. El aspirante al primer ministro de origen migrante después del domingo próximo. Fue el quien mencionó dos caminos que se ofrecen a Francia : “La unión nacional” o Jean Luc Mélenchon, un “peligro existencial”. El será “un primer ministro de cohabitación”, “respetuoso del presidente pero “intransigente en el servicio a Francia y a sus electores”.
“Hago un llamado a todos los franceses comprometidos con sus libertades, con la recuperación de Francia, a que se unan a nosotros”, declaró el presidente de la Reagrupación Nacional, Bardella, tras el anuncio de los resultados.
La segunda vuelta de las elecciones legislativas, el 7 de julio, será “una de las más decisivas de toda la historia de la Quinta República”, añadió.
Bardella saludó la movilización de los franceses, que “dieron un veredicto claro y confirmaron su clara aspiración de cambio”. “Al liderar a los candidatos RN, los franceses han suscitado una esperanza sin precedentes en todo el país”, continuó, pidiendo a los votantes que “permanezcan movilizados en un último esfuerzo el próximo domingo”.
La barrera republicana
Para sorpresa de todos, el líder de Francia Insumisa Jean Luc Mélenchon fue el primero en expresarse como miembro del Nuevo Frente Popular, cuando todos sus miembros le habían pedido que diera un paso al costado para encontrar mas fácilmente un consenso de izquierda.
Por el Nuevo Frente de Izquierda Unida, Melénchon habló al país y castigó al presidente Emmanuel Macron por esta convocatoria a elecciones legislativas anticipadas y la disolución inconsulta de la Asamblea Nacional.
“Debemos dar una mayoría absoluta al Nuevo Frente Popular”, instó el rebelde de Francia Insumisa Jean-Luc Mélenchon.“Con el Nuevo Frente Popular puede surgir una nueva Francia”, afirmó.
Mélenchon cree que “esta votación ha supuesto una derrota dura e indiscutible” a Emmanuel Macron.
“El presidente Macron pensó que estaba encerrando una vez más el sufragio universal en una elección asfixiante que ya nadie quiere: él o el RN”, reaccionó, tras el anuncio de los resultados.
“Una votación masiva desbarató la trampa tendida al país. Esta votación infligió una dura e indiscutible derrota al presidente”, añadió. Pero sus pares del NFP no quieren a Melénchon ni candidato a primer ministro ni a ser un protagonista porque su perfil es rechazado por el 75 por ciento de los franceses.
Pero sus pares del Frente no han abierto aun la boca. Están reunidos. Creen que exista una emergencia y gravedad republicana. Podrían formar un Nuevo Frente de Izquierda moderado, republicano, que pueda acumular los electores que quieren frenar a Jean Luc Melénchon y la Francia Insumisa pero no elegir a Le Pen y Reagrupación Nacional.
François Hollande, el ex presidente socialista, Rafael Glucksman, el académico que consiguió en las europeas el 14 por ciento y resucitó al partido socialista, los ecologistas y comunistas podrían ser parte activa. Fabian Roussel, el candidato comunista fue eliminado en la primera vuelta, derrotado por el lepenismo.
Hollande reconoció su triunfo en Correze. “El Reagrupamiento Nacional está en las puertas del poder. Hay que ser consciente de una unión”, alertó Hollande desde Tulle. “La unión debe ser la más amplia posible, unidos por los valores republicanos. Llamo a todos los electores para impedir que la ultraderecha gane en esta circunscripción y en Francia. Yo llamó a a todos los republicanos a hacer un salto para que todos los republicanos puedan preservar nuestros valores”.
“Hay tantas heridas, tanta ira, tanto sufrimiento”, admitió Hollande. “Pudimos asegurar que nuestra candidatura ocupara el primer lugar”, se alegra el ex Presidente de la República, subrayando que “nada fue fácil” durante esta campaña.
“Si no nos movilizamos como nunca antes, estas amenazas de una mayoría RN pueden traducirse en acciones”, subrayó François Hollande. “El desafío es reunir a todos aquellos que se reconocen en los valores de la República”. El exjefe de Estado pide bloquear a la RN.
No a la polarización
Pero no todos están dispuestos a esta polarización. El probable candidato presidencial Edouard Philippe se negó a aceptar el maniqueísmo. Cree “que no se debe votar ni a los candidatos de RN ni a los de Francia Insumisa”.
Cuando los candidatos del campo presidencial “se oponen a los extremos”, Philippe “llama a votar a quienes van desde la izquierda socialdemócrata, ecologista y comunista hasta la derecha liberal y conservadora”.
“No se debe dar voz a los candidatos del RN o del LFI, con quienes discrepamos no sólo en los programas sino también en los valores fundamentales”, añade el ex primer ministro.
Roland Lescure, Ministro de Industria, pidió “bloquear sin dudar a la extrema derecha votando al candidato alternativo mejor situado en la primera vuelta”, en un post en X.
En un tuit, Laurent Berger , el ex líder de la moderada central obrera CFDT, y candidato a primer ministro, llama al “desistimiento republicano”. “Esta noche, nuestra democracia y nuestros valores republicanos están en juego contra el RN a las puertas del poder”, escribe el ex líder de la CFDT.
El escenario más temido se ha producido en Francia. La ultraderecha lepenista frente a un Nuevo Frente de Izquierda y millones de independientes atrapados en esta opción para la definitoria segunda vuelta.
Los Republicanos conservadores no han dado consigna de voto. El domingo próximo volverá a votar Francia. Las urnas revelarán cuál es el camino elegido por una sociedad que ya no cree en la política tradicional, teme a los migrantes y al Islam. A unos y a otros los une un sentimiento: el miedo al futuro.