El precio de la verdura agarró para el lado de los tomates

Quienes por estos días hayan pasado por la verdulería habrán notado el alza en los precios del tomate, que ya se vende a casi 450 pesos el kilo. El bolsillo también sintió las subas en lechuga y zanahoria, y faltan hojas verdes como espinaca y acelga. La marcada sequía de este año es la causante de los aumentos y faltantes en las verdulerías locales, que resisten a las quejas de los clientes, ofrecen artículos más económicos y alternativas ante el estupor en los precios.

“El único artículo que en verdad subió mucho de precio fue el tomate, con incrementos en las últimas dos semanas, aunque ahora empezó a bajar. En toda la producción tenés dos variables típicas como el caso de la sequía, o mucha agua en el mes de febrero”, coinciden verduleros de Paraná.

“Desde el mercado somos los más transparentes respecto de los precios, habrá avivadas, pero en términos generales es así: si hay mucho de algo vale poco, si hay poco de algo vale mucho”, destacan.

“La gente no quiere llevar algo que no pueda comer fresco, viene a buscar tomate para hacerse una ensalada con lechuga y se termina llevando otra cosa, como papa y zanahoria para hacer una ensalada tipo rusa. La zanahoria subió un 80 por ciento, lo barato sigue siendo la papa y la cebolla, que están a buen precio”, sugieren.

“Siempre enero, febrero y marzo lo que más sube es la verdura, pero este verano la sequía ha influido demasiado en este desfase que ningún bolsillo aguanta”, reconocen.

“Hay fruta y verdura que en determinada época del año es un poco más costosa o está en falta, cuando uno sabe esto, gasta menos. El consumidor tiene que ser más inteligente. Deberíamos tener en cuenta las estaciones y la producción, porque detrás hay un montón de personas trabajando, maquinaria e insumos para trabajar la tierra. No hay que quedarse con el artículo que está costando caro, que el verdulero recomiende las verduras de estación y, si está caro, no consuman “, aconsejan.