El Mundial entró en el invierno
El Mundial de fútbol entró por primera vez en el invierno desde hace 32 años, ya que ayer, a las 13.34 hora local en Sudáfrica, tuvo lugar el solsticio, lo que provocó en el hemisferio sur el fin del otoño.
Aquel último encuentro de invierno se disputó en la nublada tarde del 25 junio de 1978 en el estadio de River Plate de la ciudad de Buenos Aires, donde la selección anfitriona, Argentina, se proclamó campeona del Mundo tras derrotar por 3-1 a Holanda en la prórroga, ya que el encuentro finalizó con empate a un tanto.
Desde entonces, se han celebrado un total de siete mundiales, todos ellos en la misma época del año, siempre entre los meses de mayo, junio y julio pero, al haber tenido lugar siempre en el hemisferio norte, los partidos se han jugado al final de la primavera o en verano, en algunos casos a muy altas temperaturas.
Así fue, por ejemplo, en 1986 en México o en 1994 en Estados Unidos, cuando hubo encuentros al mediodía para que acoplarlos a mejor hora para la televisión en los principales países de Europa, siempre en horarios de última hora de la tarde o primera de la noche.
Esos siete torneos fueron los de España (1982), México (1986), Italia (1990), Estados Unidos (1994), Francia (1998), Corea del Sur y Japón (2002) y Alemania (2006).
Con la que se juega ahora en Sudáfrica son cuatro las ediciones de la Copa del Mundo de la FIFA que han tenido lugar en el hemisferio sur y todas ellas se han celebrado en esta época del año.
En 1930 se jugó en Uruguay, en 1950 en Brasil, con la mayoría de las sedes de la competición en la zona sur del país, en 1978 en Argentina y ahora en Sudáfrica. ¿Se repetirá la historia de un campeón sudamericano en invierno? Ojalá.