El Inadi y la DAIA reflexionaron sobre el antisemitismo en el ámbito del espectáculo
|El Inadi y la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) organizaron este martes un encuentro con periodistas, personal de la justicia y académicos en el que se reflexionó “sobre la construcción de una cultura de prevención de la hostilidad y la violencia” como un modo de acompañar el reclamo de algunos sectores de la comunidad judía sobre lo que catalogaron como “discursos de odio antisemitas” del cantante Roger Waters, quien ofrecerá recitales a fines de noviembre en Argentina.
La interventora del Inadi, Greta Pena, explicó que su organismo “como institución del Estado, no tiene mandato ni puede manifestarse sobre personas genéricamente sino sobre actos concretos dentro de su competencia”.
Y agregó que “es importante difundir la ley antidiscriminatoria y la definición de antisemitismo adoptada por la Argentina con la finalidad de contribuir a la lucha contra éste en todas sus formas, colaborar en la construcción de una cultura de prevención de la hostilidad y la violencia a que llevan los prejuicios y la intolerancia, promover la educación para la pluralidad y reforzar la tarea de garantizar el cumplimiento del objetivo de la educación, la memoria y la investigación del Holocausto y de sus lecciones para nosotros y las generaciones venideras”.
En mayo de este año, Roger Waters realizó un recital en Berlín, Alemania, donde utilizó un uniforme negro similar al de las Waffen-SS, un grupo armado nazi con participación en la Segunda Guerra Mundial; apuntó con un falso fusil y durante el espectáculo se mostró un cerdo inflable gigante con distintos símbolos, entre ellos la estrella de David, y se proyectaron nombres como el de Ana Frank.
El acto recibió el repudio del Estado de Israel; el Centro Simon Wiesenthal para América Latina; la Casa Ana Frank Argentina para América Latina; de Danny Danon, representante permanente de Israel ante las Naciones Unidas; y la organización Stop Antisemitism, entre otras entidades.
A raíz del hecho, Waters -entonces- realizó un descargo en redes sociales donde explicó que “mi actuación reciente en Berlín ha atraído ataques de mala fe de aquellos que quieren difamarme y silenciarme porque no están de acuerdo con mis puntos de vista políticos y principios morales”, y recordó que “he pasado toda mi vida hablando en contra del autoritarismo y la opresión dondequiera que los veo”.
Y agregó que “los elementos de mi actuación que han sido cuestionados son claramente una declaración en oposición al fascismo, la injusticia y la intolerancia en todas sus formas. Los intentos de retratar esos elementos como algo más son falsos y políticamente motivados. La representación de un demagogo fascista desquiciado ha sido una característica de mis espectáculos desde “The Wall” de Pink Floyd en 1980”, concluyó.
Pena, en el encuentro agregó que “el INADI acompaña a la DAIA para concientizar y prevenir todas las formas de antisemitismo. Estamos atentos. Vamos a seguir de acá hasta el recital acompañando”. Y advirtió que el Inadi no aboga por la censura previa, sino por el diálogo, la concientización y la información.
El presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits, a su turno, advirtió que espera que “Roger Waters sepa que esto no lo tiene que hacer en Argentina. También espero que si lo hace sea sancionado. No solamente por la fiscalía que actuará de oficio, sino por el público, la prensa y toda la República Argentina”.
Nuestro país es el único miembro pleno de América Latina que integra la Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto (IHRA, por sus siglas en inglés) desde 2002 y en 2020 firmó la Declaración Ministerial #IHRA2020, que busca garantizar el recuerdo del Holocausto y aborda nuevas responsabilidades frente al antisemitismo y la discriminación.
Entre enero y julio de 2023, el Inadi registró 16 denuncias por discriminación antisemita, que representan el 1,31% del total de las denuncias recibidas.
Entre enero y julio de 2023, el Inadi registró 16 denuncias por discriminación antisemita, que representan el 1,31% del total de las denuncias recibidas
Sin embargo, si las mismas se caracterizan por etnias, la comunidad judía ocupa el primer lugar junto a las denuncias por discriminación recibidas, también, por integrantes de pueblos originarios.
Pena consideró que existen dos contextos en los que se enmarcan los discursos de odio antisemitas en la Argentina.
“Uno que tiene que ver con el negacionismo en general, como vimos en los últimos días sobre la dictadura militar. Hay un avance en el mundo sobre este tipo de discursos que afectan el honor y la dignidad humana”, advirtió.
También sostuvo que “se verifican hechos de antisemitismo” que “pueden ir desde la profanación de tumbas o grupos neonazis que atacan a la comunidad judía y, por ejemplo, a la comunidad LGBT también”.
“El año pasado y el anteaño pasado la Argentina tuvo la misma cantidad de actos antisemitas reflejados en nuestro informe anual. No han disminuido, pero tampoco han aumentado”, indicó, por su parte, el presidente de la DAIA.
Sin embargo, Knoblovits agregó que “Argentina no es un país antisemita”, y destacó que “la construcción democrática, la construcción de la convivencia ha permitido una matriz que es absolutamente distinta a todo el mundo”.