El Gobierno de Javier Milei anunció este miércoles la privatización de la empresa de trenes Belgrano Cargas
“Producto de la Ley Bases se procederá a privatizar la empresa estatal Belgrano Cargas y Logística S.A. en lo que será la primera privatización de una empresa ferroviaria desde que asumió la administración de Javier Milei”, comunicó el vocero presidencial Manuel Adorni frente a periodistas en Casa Rosada.
Si bien en un principio estaba prevista una conferencia de prensa para las 12, la transmisión oficial tuvo tres reprogramaciones hasta que finalmente el portavoz apareció pasadas las 13 para oficializar la decisión.
Según comunicó el Gobierno, la empresa opera 7.600 kilómetros de vías que ahora serán concesionadas a privados, manteniendo rieles y tierras como propiedad del Estado Nacional.
Dicho proceso de privatización será liderado por Diego Chaher, titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, dependiente del Ministro de Economía de la Nación.
El Gobierno planteó que el Belgrano Cargas “en manos estatales es obscenamente deficitaria y posee una planta sobredimensionada de 4.429 personas, además de una estructura jerárquica elevada no acorde a sus funciones”.
El año pasado, detallaron, el Estado debió aportar 112 millones de dólares para su subsistencia.
Al remarcar que “se terminó el Estado empresario”, el Ejecutivo señaló que pese a que durante los últimos 50 años se sextuplicó la producción agropecuaria nacional, el Belgrano Cargas transporta hace 15 la misma cantidad de toneladas.
“Su privatización tiene como objetivo eficientizar la competitividad del transporte ferroviario de cargas, promover la inversión en el sector e introducir la lógica de mercado al sector ferroviario”, concluyó el comunicado.
Al dar precisiones sobre el proceso de privatización, Chaher detalló que para las tres líneas (Belgrano, San Martín y Urquiza) van a “instrumentar siete procesos de concesión diferenciados: una concesión por la vía con derecho a cobro de peaje que incluirá el traspaso de los empleados afectados a la misma; dos concesiones de locomotoras que permitirá incentivar la competencia que incluya a sus respectivos conductores; dos concesiones de vagones y dos concesiones de talleres que incluyan a los empleados asociados”.
Además, destacó el funcionario que el esquema propuesto por el Gobierno “es de concesión de infraestructura de acceso abierto, es decir que el concesionario tendrá la obligación de permitir el paso a todos los operadores que quieran transportar carga por esas vías, evitando conductas monopólicas”. También precisó que “las tierras y las vías continúan siendo de propiedad del Estado nacional”.
“Todo lo que se pueda privatizar, se va a privatizar”
Tanto el portavoz de la Presidencia como el titular de la unidad designada para avanzar en el pasaje de la empresa a manos privadas dejaron en claro que la privatización del Belgrano Cargas es el primer paso en un camino que seguirán el resto de las empresas que son propiedad del Estado.
“Todo lo que se pueda privatizar se va a privatizar y todo lo que pueda pasar al sector privado va a pasar al sector privado”, dijo Adorni antes de cederle el micrófono a Chaher. A su turno, el funcionario apeló a la misma idea: “El Estado no es empresario, por eso todas las empresas del Estado se van a abrir a capitales privados y se someterán a procedimientos para restringir y finalizar la participación estatal”, apuntó.
La Agencia de Transformación de Empresas Públicas que encabeza Chaher responde al Ministro de Economía que conduce Luis Caputo. Según detalló, esa unidad tiene “la responsabilidad de impulsar los proyectos integrales de concesión, privatización, cierre, fusión, restructuración, venta total de los paquetes accionarios de las empresas públicas”.