El espía Barreiro reveló que D’Alessio tenía vínculos con Stornelli y Bonadio
El espía Rolando Barreiro declaró ante el juez de Dolores, Alejo Ramos Padilla, contó que Marcelo D’Alessio tenía relación con Carlos Stornelli y Claudio Bonadio. Así se desprende de la declaración indagatoria del agente de inteligencia que consta de más de 50 páginas, y en la que no está obligado a responder la verdad. Es decir, de acuerdo a las garantías constitucionales, no está obligado a declarar contra sí mismo.
Esto fue una declaración indagatoria, que publicó el periodista Néstor Espósito en Tiempo Argentino, y el juez tendrá que corroborar estos dichos. Barreiro dice que se fue de la AFI y hay material que tiene que está bajo secreto por ser un ex espía. Y pidió que lo releven del secreto para poder ampliar. Esa decisión la tendrá que tomar Mauricio Macri, de quien depende la Agencia Federal de Inteligencia.
“Quiero decir que el señor Marcelo D’Alessio era el que tenía relación con Carlos Stornelli y aparentemente con Claudio Bonadio también. Digo esto porque a fines de 2018 me contacta una persona y me dice que necesitaba hablar con D’Alessio. Cuando le pregunto por qué lo quería contactar me dijo que había dos o tres empresas ligadas a la causa de los cuadernos -en realidad eran personas de empresas grandes – y me dice ‘porque mandamos a averiguar al juzgado cómo teníamos que hacer el nexo o el puente para hablar o hacer un tipo de arreglo’ y que le habían dicho que hable con una tal Alejandra, que sería una de las secretarias, no sé si de Bonadio o de Stornelli, que ella lo iba a orientar”, arranca Rolo Barreiro.
Según Tiempo Argentino, Barreiro parece demostrar que había una suerte de gestores de aproximación a Stornelli y a Bonadio para acercar a empresarios con voluntad de arrepentirse en la causa de las fotocopias de los cuadernos.
La “Alejandra” a la que aludió Barreiro podría ser la abogada Alejandra Zizzías, una mujer cercana a Alfredo “Fredy” Lijo (hermano del juez Ariel Lijo) y allegada al juez Bonadio.
“Cuando esta persona llegó a hablar con Alejandra, le comentó: ‘si vos querés tener una línea de contacto con Stornelli o Bonadio (creo que era indistinto, pero en referencia a la Causa Cuadernos y para llegar a uno de los dos, y esta Alejandra sería la secretaria de uno de o dos) tenés que hablar con Marcelo D’Alessio”.
Rosenkrantz y Rosatti
Barreiro además contó que hubo espionaje sobre dos jueces de la Corte Suprema: Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti. El espía dijo que está desocupado y lo mantiene su mujer, dueña de un jardín de infantes. Trabajó como seguridad en country Saint Thomas, en el que vive y era vecino de D’Alessio.
“Un día voy a la casa de D’Alessio para plantearle un tema vinculado a la seguridad del country a lo cual él estaba con una computadora trabajando y empezó a hacer alarde diciendo algo así como ‘va a haber un quilombo bárbaro, no entiendo este tipo cuándo viaja tanto a Panamá’ y esas cosas. Y me dice ‘¿vos podés creer este Rosenkrantz y el tal Rosatti?’ -que son los nuevos jefes de la Corte Suprema o algo así- y siguió diciendo ‘va a ver un quilombo bárbaro porque no van a poder explicar tantas entradas y salidas a Panamá y Miami’. Como que sabía los viajes de los tipos y nombró: ‘ya con el quilombo de los Panamá Papers era un desastre’ y cosas así, como que lo que él estaba viendo era eso”, afirmó.
Carrió y Oliveto
Otras de las protagonistas de la declaración de Barreiro son Elisa Carrió y Paula Oliveto, ambas diputadas de Cambiemos.
Sobre Oliveto dijo: “Sé que hablaba por teléfono, por mensaje, que se reunía, me ha contado y he escuchado que fue al Congreso, que tuvo reuniones, y con Elisa Carrió me dijo que estuvo en un par de oportunidades”, declaró.
El espía manifestó: “Lo que he escuchado de él, decir de él, era una relación de dar información, de que le pedía información sobre la política, sobre cuestiones vinculadas a esos temas, del perfil opositor y temas así. Me decía que le pedían data sobre los opositores, o sea no lo llamaba Paula Oliveto sobre un modelo de auto, eran cosas políticas, hablaban de eso, según él. Nunca me refirió un dato puntual de tal tema, él sólo se expresaba así, sobre ‘data opositor’ (sic), no me decía qué hablaba pormenorizadamente con Paula Oliveto, qué hablaba con uno y otro (…) pero sí era cierto que hablaba con ella”.
Y reveló que presenció alguna charla entre D’Alessio y Olivetto. “Sí, telefónicamente sí. Nunca los vi personalmente. El hacía referencia a cosas como ‘la semana que viene tengo que ir al Congreso a ver a Paula Oliveto’ y sí telefónicamente sí, era Paula Oliveto; él siempre estaba mostrando que hablaba con tal o cual, sobre las personas que él conocía”.
SERGIO BERENSZTEIN
Barreiro intentó contar para quién trabajaba D’Alessio. Allí lo relacionó con la Embajada de Estados Unidos. “La relación de él con la Embajada de los EEUU, lo que a mí me parece de lo que él dijo es que estaba muy ligada a la consultora del padre. Esa consultora es D’Alessio y algo más, él decía que en esa consultora, el socio del padre -que no recuerdo el nombre pero que tiene un nombre judío- lo relacionaba con los servicios que prestaba la embajada de EEUU”. Se refiere al sociólogo y columnista de diarios y programas de TV oficialistas Sergio Berensztein.
“Él decía que como ‘la consultora tenía muy buena relación con los EEUU porque le hace trabajos para ellos, que esa embajada era un muy buen cliente. Además, decía que hacía reportes de narcotráfico a la Embajada de EEUU, al ministerio de Seguridad y a la AFI. Pero específicamente con el tema de EEUU él decía que hacía cuatro o cinco reportes anuales, que cobraba muy buen dinero, creo que serían unos diez mil dólares por mes y que eso era parte de su entrada y nivel de vida. Era una cifra en dólares que para mí era una suma importante”, concluyó.
PATRICIA BULLRICH
Barreiro habló también de los contactos de D’Alessio con la ministra de Seguridad. “A finales de 2015 o comienzos de 2016 me dijo que estaba armando un plan integral de seguridad que le iba a presentar a la ministra Bullrich, me pidió ayuda y consejos, por lo que me junté para hacer un intercambio de ideas. Efectivamente él le presentó el plan a Bullrich”.
Y siguió: “A los tres o cuatro días le pregunté cómo le había ido, él me dijo ‘más o menos’, como que no le había dado mucha bola, porque Martín Berrier (un colaborador cercano a la ministra) se metía mucho a contrarrestar lo que él decía. El contacto con Patricia Bullrich existió, él me mostró los mensajes con ella, también hablaba mucho con una secretaria de Bullrich, a la que usaba de contacto para hablar con ella”.
Y vinculó a D’Alessio con Bullrich en la detención del ex titular de Hinchadas Unidas Argentinas (HUA), Marcelo Mallo. “D’Alessio participó en la entrega de Marcelo Mallo, que salió por Crónica TV, donde se los ve hablando”, recordó.