El Día del Trabajo debe ser algo más que una simple fecha en el calendario
|ESPECIAL, por Leandro Fernández (*). – Hoy, 1° de Mayo, más que nunca debemos detenernos a reflexionar, buscando entender de dónde venimos, para aprender de lo que pasó y pensar juntos cómo podemos edificar ese puente entre la Argentina que somos y la que deseamos ser.
El primer paso en el camino es aceptarnos como gente valiosa, capaces de crear y de innovar. Este día conmemorativo debe ser algo más que una simple fecha en el calendario, es un buen momento para hacer una pausa y razonar su verdadero significado.
A la hora de plantearlo, entiendo que el trabajo es algo que va más allá que ser “la manera en que nos ganamos la vida”, con esto me refiero a que cuando uno disfruta lo que hace, no es una carga si no una bendición, levantarse todos los días deja de ser un sacrificio para pasar a ser un modo de vivir. Observemos nuestra ocupación como una expresión de dignidad y contribución al bien común, donde cumplimos un rol esencial.
Por eso, si queremos que en este país haya trabajo de calidad tenemos que comprometernos, considerar que no hay salvación individual, si no que nuestra tarea en sociedad es apuntar a la Argentina que soñamos. Considero que la clave está en creer en nosotros mismos. Si tomamos la responsabilidad con el hacer cada uno desde su lugar, construiremos una mejor república a futuro.
Impulsemos una revalorización, afrontando los desequilibrios económicos y sociales existentes, subrayando la totalidad de roles que hacen al sector laboral, como el de la mujer que trabaja en su hogar, en lo privado y lo público. Insistiendo en la libertad y participación de todos.
Sabiendo que hay millones de argentinos que la están pasando mal y que les cuesta llegar a fin de mes, es momento de remarcar la necesidad de seguir pensando en ellos. Ejemplo son quienes no logran encontrar trabajo, eje importante del cual debemos hacernos cargo, ya que la existencia de personas que no pueden hacerlo cuando están queriendo sacar su nación adelante, es una deficiencia de la ciudadanía en su conjunto. Hay que reconocerlos, acompañarlos y siempre estar dispuesto a dar una mano, esa es la solidaridad que requerimos expandir.
En relación con esto, muchos jóvenes quieren acceder a tener su primera experiencia en el mercado laboral y no lo consiguen. En esos casos (y en los demás también) no solo nos corresponde ayudar como ciudadanos, si no trabajar desde el Estado -sus 3 niveles- en crear las condiciones para poder abrir esas puertas, a la par de brindar las herramientas para que puedan defenderse y mantenerse en su espacio, capacitar constantemente, y poner en agenda lo que la gente demanda para lograr el desarrollo y el progreso de esta manera.
En este día especial, mi reconocimiento a la totalidad de los trabajadores: los pasivos y los activos, a los de la actividad privada, a los del Estado provincial, municipal, y nacional. Y a los que se comprometen día a día en involucrarse en este mundo para mejorar su entorno y el de otros, y aún no pueden hacerlo.
No olvidemos que lo que identifica a la clase trabajadora en general es su vocación por transformar la realidad. Estoy seguro de que podremos avanzar con ello a través del diálogo, intercambiando ideas. No hay propuestas mejores o peores, si no aquellas que pueden ser o no realmente aplicadas con posibilidad de cambios en la vida del vecino.
La única manera de llegar lejos y cumplir estos objetivos es generando consensos. Encarguémonos de poner sobre la mesa nuestra disposición de tirar hacia el mismo lado, nuestro patriotismo y nuestro deseo de construir la Argentina que todos nos merecemos.
¡¡Feliz día!!
(*) Presidente del Bloque de Concejales “Juntos x Entre Ríos”.-