Economía frenó un aumento salarial de los directores del BICE y renunció su titular
El virtual congelamiento en los salarios de los altos funcionarios le sigue trayendo dolores de cabeza al Gobierno. En la previa a una asamblea del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) en la que Economía le negó un aumento salarial para el directorio, el titular del organismo, Juan Manuel Troncoso, presentó la renuncia.
También habría dado un paso el costado el vicepresidente de la entidad crediticia, Patricio Milic, que integra un directorio en el que a comienzos de esta administración había sido confirmado Nicolás Scioli, hermano del secretario de Turismo y Deportes de la Nación.
El BICE se encuentra bajo el paraguas del ministerio conducido por Luis “Toto” Caputo quien, según se pudo averiguar, bajó la manda de “respetar la política del gobierno con respecto a los sueldos” del alto funcionariado.
Desde la vocería del Banco negaron que este haya sido el motivo de la dimisión de Troncoso pero confirmaron que este jueves oficializará su salida de la institución.
En la misma jornada en la que la CGT convoca a un paro general, el BICE llamará a la asamblea en la que históricamente se definen los honorarios del año de sus directores pero en un debate previo las autoridades decidieron evitar este controvertido tema para, así, alinearse al congelamiento salarial dispuesto por el Ejecutivo.
Sí el directorio se abocará a aprobar la memoria, los estados financieros, ejercicio social, gestión y los honorarios abonados del 2023
Pese a que en el organismo desmintieron que el factor salarial haya incidido en la dimisión de Troncoso, dos calificadas fuentes consultadas por este diario indicaron que si hubo un desacuerdo en el seno del directorio por este tema que llegó a los oídos de la cúpula del Palacio de Hacienda. “Se querían llevar el sueldo a $12 millones”, confió una calificada fuente de Economía consultada.
Cerca de uno de los directores del banco de inversión, en tanto, explicaron que el “ruido” entre las autoridades del organismo se originó en ese debate previo respecto al temario de la asamblea del jueves 9 de mayo. Al parecer, no hubo acuerdo en incluir una fórmula para actualizar los ingresos de los directores. “Hubo una idea de fijarlo por debajo de la inflación pero la mayoría planteaba patearlo para más adelante porque hoy cualquier monto iba a caer antipático”, indicó.
Es que en Economía, al parecer, intentaron evitar el efecto YPF, esto es, el malestar social que generó el exorbitante aumento que el 26 de abril se autorizó el directorio de la petrolera estatal con un alza en el ítem “honorarios, remuneraciones y retribuciones por todo concepto” cercano al 40% por encima de la inflación para sus miembros. Según el diputado Itahí Hagman, los directores llevaron sus ingresos a unos $70 millones en promedio.
Con todo, la política de austeridad que baja Javier Milei, que a comienzos de marzo provocó el desplazamiento del secretario de Trabajo, Omar Yasin, y de su par de Modernización del Estado, Armando Guibert por el salariazo autorizado a los sueldos de febrero del alto funcionariado, provoca un malestar general en distintos ámbitos del Estado.
En el Senado, sin ir más lejos, forzó una escandalosa sesión en la que se autorizó un alza de más del 200%. Pero también hay secretarios de Estado quejosos por ingresos que, además del impuesto inflacionario, volverán a ser alcanzados por Ganancias.
El problema de fondo, en una economía en la que la inflación viene horadando ingresos desde hace meses, es cómo garantizar un recurso humano de calidad en el Estado con salarios a la baja. Es por eso que en un sector del oficialismo observan con suspicacia una práctica que, aseguran, resulta cada vez más recurrente: funcionarios que son designados ad honorem pero que cobran salarios altos como directores o síndicos de empresas estatales.