Echagüe y sus signos inequívocos de un rumbo inadecuado
ESPECIAL (por Francisco Pancho Calderón).- Echagüe perdió un partido increíble anoche en el “Luis Butta”. Le jugó de igual a igual al poderoso Salta Basquet (con varios ex AEC) que pugna por meterse en el Top Four de la Conferencia Norte y cuenta con un presupuesto muy superior al del team paranaense. Y ganó la visita 84-86 con un triple excelso del TERCER MÁXIMO TRIPLERO de la Liga Argentina: Gregorio “Goyo” Eseverri, el jugador con más minutos de Primera de toda la cancha. Insistimos, lo de Echagüe NO ES actitudinal. Es conceptual.
Llegó a sacar 9 de luz positiva el local en el primer chico (23-14). Estuvo arriba por 13 en el 2° (35-33). Salta lo dio vuelta en el 3° donde ya no hubo márgenes destacables en el anfitrión; mientras que todo fue muy nivelado en el 4° arribándose a un cierre electrizante.
La crónica la harán los colegas que siguen a Echagüe. Nuestra posición es analítica y no de un juego integral sino de pequeñas cuestiones que hacen a este presente del conjunto profesional de Paraná.
Primero, vamos a hacer hincapié en el estado físico de Echagüe. Pero antes hacemos una pausa en el rival… Los dos entrenadores eligieron recurrir poco al banco, sin embargo la última situación tras el simple de Larsen revela no solo cuestiones estratégicas poco entendibles sino primordialmente LENTITUD psicofísica, como una falta notable de REACCIÓN para estar listos a la resolución desde la Línea de Libres de Larsen y quitarles tiempo, complicarles la salida a los de Salta.
De hecho, basta revisar el vídeo del match para mirar el juego de piernas de brazos como las miradas entre sí de Iván Knecht y Pablo Osores “controlando” sin presión a Federico Mariani y al “Goyo” Eseverri. Los dos primeros pases que fabricaron la última instancia casi no tuvieron oposición, y la rapidez atlética de la ofensiva fue ostensiblemente superior a la obstrucción defensiva.
Escuchen la voz del relator intuyendo que Mariani definiría. Mariani… que había convertido solo 8 puntos en 35 minutos, justamente por una defensa titánica sobre él en esa más de media hora en cancha.
Esa última situación nació entre Mariani y Eseverri, y se definiría en ese orden simplemente porque Mariani, amén de sus pocos puntos lanzó antes 0/4 fuera de la línea de Tres, como por el cronómetro ya no convenía revertir hacia Víctor Cajal o Lisandro Rasio que estaban por el lateral opuesto.
Una cuestión de lectura simple en un Circuito Rentado donde deberían estar listas esas visiones. Obvio… los “Players” no son robots y/o no están programados para cumplir 100 % con una faena, menos si tras el Libre de Larsen ninguno de los técnicos tenía minuto para planificar.
Aunque más allá de la intuición de quien atacaba, estaba la lógica y en eso creemos que Echagüe falló FEÍSIMO, y por eso reafirmamos: miren el video, desde que saca Salta Basquet hasta el juego de pases de Eseverri-Mariani e inclusive la finta del “Goyo” para rubricar su bella noche con un tiro sensacional.
Por eso es que nos detenemos en lo atlético. ¿Fue un error (horror) estratégico o se nubló la mente con tantos minutos en cancha? ¿No tenía reservas defensivas en el banco Bonell para apretar más en la salida salteña tras el tiro de Larsen? Dirán lo de “con el diario del sábado todos hablan; hay que estar…”. Y nosotros devolvemos: está clarísimo que desde la misma asunción a “Cachi” le ha costado horrores creer que algo mejor puede venir desde el banco. ¿Por qué jugarse en un final tan complejo? Bueno… ahí vamos con nuestra postura. El ser EL PEOR EQUIPO DE UNA LIGA SIN DESCENSOS debería mermar presiones y dar paso al LABORATORIO.
Vamos a ser muy insistentes en un cuestionamiento: Echagüe no se armó MAL. Digamos que el GRAN Talón de Aquiles fueron los foráneos, la falta de mayor estatura, más la yeta que hace años azota el AEC con lesiones.
Pero ACENTUAMOS… con plantel completo tampoco se aprovechó esta Liga SIN DESCENSOS y ya muy lejos de meterse en Playoffs de Reclasificación. Sostenemos con firmeza: hay que ponerse a pensar en la próxima temporada, sin menospreciar la actual.
Por consiguiente, profundizamos nuestra crítica hacia cómo se está administrando la cantidad de minutos en cancha de los Mayores, la falta de confianza que se tributa a los más jóvenes, y la casi nula fe que evidencia Bonell por los chicos.
La meta estricta y/o exclusiva pareciera ser el milagro de la historia excepcional de los Playoffs. Que sin dudas conlleva un capítulo ostensible distinto donde todo puede pasar.
Sin embargo, es cuestión de elecciones. Si estuviéramos en el lugar de “Cachi” Bonell pondríamos todos los sentidos en el torneo que viene.
No nos cansamos de repetir: ¡NO HAY DESCENSOS!!! Todo lo que venga de aquí en más, hay que tomarlo como un consuelo, como un desahogo y ponerse a pensar en esta misma formación, estos mismos hombres y nombres, con quizás un MÍNIMO retoque en la plantilla nacional (buscando mayor talla) y poniendo especial atención en el reclutamiento de un par de lungos que deseen proyectarse.
Esa tensión por ganar es inconducente. Con 29 puntos, 2 victorias y 16 derrotas, 8 en esta 2ª Fase como Local, y mirando para arriba, es como un empecinamiento absurdo.
Sobre el AEC están Sportivo América 31.5 (un partido más que los de Paraná), Lactear Tiro Federal 34 puntos (dos juegos más), Independiente 35 (idéntica cantidad que los entrerrianos), y Oberá TC 35.5 (también habiendo jugado 18 cotejos). ¿El resto?, imposible de alcanzar, el más cercano sería Villa San Martín con 37.5 y dos encuentros menos.
O sea… seguimos dando argumentos sólidos. No engañamos a nadie. NUNCA vendimos humo como otros que por el hecho de “amiguismos” de toda índole, optaron por crear falsas expectativas.
Somos los rezongones, los críticos ácidos, pero SIEMPRE dimos pruebas y hoy seguimos dándolas.
Si Bonell quiere la heroica de meterse en Playoffs, está olvidando la PREMISA indispensable de sentar las bases para un trabajo de mediano/largo plazo. En cambio, si abre su cabeza y se percata que con la misma formación puede al menos intentar trabajar diferente a lo que hizo Beltramo y restar presión, seguro que llegarán los resultados tan esperados.
Puede sonar duro, pero a un equipo y a una campaña LA LIDERA el head coach, no un dirigente o menos todavía los jugadores. Hace rato, pero mucho, mucho tiempo, a Echagüe le falta alguien que tenga las agallas de rectificar el rumbo TÉCNICAMENTE y lo que es más, LA VALENTÍA de decir me falta esto o aquello y necesitamos esto para potenciar las cualidades que hay.
No está tan mal Echagüe. Solo le falta un LÍDER, dentro y fuera del campo. Y ese CABECILLA debe ser indefectiblemente el entrenador jefe, con un mano derecha de lugarteniente que, obviamente, saldrá del plantel. Los demás que se dediquen a administrar que el profesionalismo sea IMPECABLE.
Ya son demasiados años de fracasos estrepitosos. Llegó la hora de apostar a las transformaciones de fondo. ¿Se animará “Cachi”? Hasta hoy, ignorando FEÍSIMO a los gurises, nos ha expresado lo contrario.
Foto: Prensa AEC.-