Echagüe en casa: si pierde puede irse a un monasterio
|A las 21.30 se producirá en el “Luis Butta” un choque de rehabilitados. Echagüe, que llega de ganar nada menos que en el Chaco, recibe a San Isidro de San Francisco. Los cordobeses consiguieron ante Unión de Sunchales revertir una adversa serie de tres juegos sin alegrías. Dirigirán Alejandro Zanabone y Maximiliano Piedrabuena.
La victoria del “Negro” ante Alvear debe servir para concretar una progresiva reparación de la mala temporada rubricada hasta hoy, y un punto de inflexión en lo que implica lograr exhibir una identidad de equipo, un sello inherente a sólida personalidad físico-técnica.
Echagüe NO DEBE PERDER MAS en el “Coloso” de calle 25 de Mayo. Otra caída en su feudo será una firma anticipada del certificado de defunción, al menos en lo concerniente a imagen, a credibilidad.
San Isidro es de esos rivales “Chivos” para éste tipo de circunstancia por la cual atraviesa el conjunto de Paraná. Defiende muy agresivo, corre por toda la cancha, y sustenta su juego en una rotación permanente, algo que a Uranga (Padre) le sigue costando con su filosofía de conceder muchos minutos a 7 o como máximo 8 jugadores.
Su colega, Daniel Beltramo, es lo más parecido a un coach del básquet universitario estadounidense y ejecuta un plan de juego bastante parecido al de los viejos teams del Maestro Don Antonio Manno, o sea, veloces, dinámicos y listos, para tomar provecho de los errores de su oponente.
Por eso, Echagüe no puede otorgar ni la más ínfima chance porque es boleta. Cursando por la 6ª fecha de la 2ª Fase, otro revés en su casa conllevaría a un descrédito rotundo y todo pasaría a ser cada vez más intrincado, borrascoso. De por sí hoy, el aficionado local, en épocas de colaciones, fiestas de fin de año, resta apoyo aun en épocas de vacas gordas. Por consecuencia, en medio de una campaña infecunda, otra frustración en el mítico estadio del centro paranaense puede provocar un estigma prácticamente insalvable.
Aunque amén de perder la ocasión de renovar la confianza con su público, Echagüe debe ganar, SÍ o SÍ, para auto-estimularse. Si bien a través de dichos y/o gestos en Redes Sociales, se percibe que éstos jóvenes jugadores fuera de la cancha gozan de un ánimo sin abatimientos, la carga de responsabilidad y compromiso parece agobiar a la hora de presentarse ante la gente.
Como si éste plantel padeciera de una bipolaridad asombrosa. Como si tuviera dos caras o una doble vida. Ya lo hemos dicho… “No solo hay que ser, sino parecer…”, y uno, por allí, tal vez anticuado en eso de SENTIR, aprecia que pese a la magra campaña “todo está bien…”. Y NO DEBERÍA SER ASÍ. Pero ASÍ ES…
De ésta forma es que, conociendo al hincha abnegado del “Negro” la paciencia se va acabando. Conociendo a los sponsors, a los auspiciantes, la decepción está cerca de embargarlos, y allí vienen las vicisitudes “de caja”.
Entonces, muchachos, el lema es claro, rotundo… “Hoy no podemos perder”… Drástico, concluyente. Por eso lo del título… Si Echagüe ésta noche no logra marcarle la cancha a los cordobeses, negarle la vehemencia y el vértigo, no consigue controlar a Facundo Piñero, Germán Sciutto, a Devon Lamont, a Martín Muller, al uruguayense Felipe Pais, a Marcos Jovanovich o a Agustín Lozano, será mejor que Uranga (Padre) vaya reservando lugar en un Monasterio para apelar con un Retiro Espiritual a quitar recreaciones, hobbys, divertimentos varios, y adosar más TRABAJO, más SERIEDAD, más RESPONSABILIDAD, más COMPROMISO.
Ojalá que Echagüe gane hoy y nos tape la boca, pero -reiteramos- “Pueblo Chico… Infierno Grande…”, y uno lee, aprecia, discierne, razona, y se da cuenta que éste grupo está BARBARO FUERA DE LA CANCHA, pero algo sucede DENTRO. Y no puede ser. Es poco SERIO siquiera pensar en ello.
Echagüe debe entender que el límite de la PACIENCIA está al borde y que llegó la hora de demostrar el INNEGABLE laburo al que se acomete a diario en plena COMPETENCIA. Pues de lo contrario, es ESTÉRIL, IMPRODUCTIVO, “matarse” entrenando si después en la cancha por “x” cortocircuito propio o inspiración ajena, el adversario de turno nos pinta la cara.
La dirigencia hasta hoy ha sido COMPLACIENTE. Habrá que ver cuál es su respuesta de sumar un nuevo revés en Paraná. O quizás haya que esperar que la recapacitación, y la DIGNIDAD venga desde adentro mismo.
Deseamos, ANHELAMOS, fervientemente, que Echagüe nos haga sonreír en su estadio. Para eso 100 % de concentración, actitud, intensidad, consistencia, solidaridad, humildad, no exenta de CARÁCTER férreo, inteligencia y eficacia.
En defensa, NO OTORGAR hándicap con malos ataques que deriven en desequilibrios para la conversión, NO ASPIRAR tanto al rebote ofensivo sino a aceitar los mecanismos de retorno al canasto, y cuidarse de los triples pues la visita cuenta con lanzadores perimetrales PARA NADA TÍMIDOS, como lo son Piñero, Lozano, Pais, Muller, Sciutto y hasta Jovanovich.
A San Isidro, si es posible, hay que jugarle al bajo scorer pues si arriesgás al gol por gol, puede ser un suicidio.
Cada técnico tiene su libreto, nosotros solo analizamos fríamente lo que hemos observado del rival que tendrá el AEC ésta noche. No es un cuco, pero a no equivocarse pues te vacuna justamente tomando usufructo del mal ajeno.
Cuestión de agenda
Viernes
A las 21:30 horas, Monte Hermoso Basket vs Banda Norte (Trias – Salguero), Estudiantes vs La Unión (Lorenzo – D´Anna), Sarmiento vs Instituto (Wasinger – Moral), y Echagüe vs San Isidro (Zanabone – Barotto).
A las 21:45 horas, Ciudad vs Ciclista (Hoyo – Aguilar)
Domingo
A las 21:30 horas, Alianza Viedma vs Sport Club (Sánchez – Morano)
A las 22:00 horas – TV, Quilmes vs Huracán (Piedrabuena – Ponzo).-