Durante agosto hubo cheques rechazados por $4.500 millones
En el octavo mes del año la cantidad de cheques rechazados por falta de fondos ascendió a algo más de $4.500 millones, lo que representa el 1,2% del total de dinero que pasó por la cámara compensadora durante el período, según datos del Banco Central.
Son unos $100 millones menos que en julio, pero el doble del registrado en agosto de 2017, cuando la cifra fue de $2.250 millones. En el octavo mes del año pasado el monto de rechazos representó el 0,7% del total en cámara compensadora.
Lo que hay que tener en cuenta es que desde ese período hasta ahora, el monto total de los documentos enviados a la cámara compensadora creció algo más del 18%, al pasar de $321,5 mil millones a $378,7 mil millones. Si se tiene en cuenta que la inflación en ese lapso fue del 34,4%, queda claro que hubo menos actividad, y aun así se duplicaron los rechazos.
No obstante, dentro del panorama negativo, las cifras que se manejan son poco relevantes respecto del sistema en general.
Frente a esa realidad, el Ministerio de la Producción procura ahora asistir a las pequeñas y medianas empresas con créditos subsidiados para descuento de cheques. Lanzó en junio un paquete de unos $26.000 millones, a través de una docena de bancos provinciales. Ese cupo ya se va agotando. Llevan colocados $18.000 millones, y estiman en la cartera que dirige Dante Sica que se necesitará más.
Por eso ya están negociando una ampliación del paquete con los mismos bancos y tratarán de sumar a banca privada. La tasa para descuento en este programa es del 29%. Las empresas en el mercado no pueden acceder a una tasa inferior al 40% para este tipo de operatoria muy común entre las empresas.
Al respecto, la Unión Industrial de Córdoba presentó una encuesta entre firmas de esa provincia, donde se destaca que en agosto la cantidad de empresas que decían tener su cadena de pagos cortada representaba al 14,5%, en julio fue el 15,5% y el junio el 6,5%.
El último dato a septiembre indica que el corte de cadena afecta al 13%, lo que marca el nivel más bajo de los últimos tres meses. En cambio, lo que se ha extendido es la proporción de industrias que dicen que demoran más en cobrar sus facturas. En septiembre llegan al 45,5%, mientras que en agosto eran el 38,7%, en julio, 38,6 y en junio 44,9%.
El 75% de las firmas dice que el plazo se estiró a entre 60 y 90 días, en tanto que el 65% dice usar el descuento de cheques como operatoria común.