Domingo de Ramos: Puiggari pidió menos turismo y más compromiso cristiano
|En la homilía de Domingo de Ramos, y como reflexión de uno de los relatos bíblicos sobre la Pasión de Jesús, el arzobispo Juan Alberto Puiggari reclamó ayer que “el cristiano tiene que darse cuenta que esta es la semana principal del año, y que en medio de las ocupaciones, el trabajo y las distintas actividades que tenemos, el Señor debe ocupar el primer lugar”.
La expresión, en el marco de la celebración central del Domingo de Ramos, ayer en la Catedral Metropolitana, fue como corolario del pedido a los fieles para participar de las distintas celebraciones litúrgicas de estos días, y que entiendan que Semana Santa es “la semana mayor” del año para la fe cristiana, que recuerda la Pasión y el Misterio de Jesucristo, y que “nuestra cultura secularista la ha ido reemplazando por el turismo”.
En ese sentido, exhortó a “ser discípulos para escuchar lo que Dios nos va a pedir, y que la gracia que nos da en estos días, es para hablar, no para callar, para ayudar”.
Durante la celebración –que conmemora la entrada triunfal de Jesús a Nazareth– se realizó la habitual bendición de las palmas y ramas de olivo, acompañadas por una breve procesión.
Luego, en su breve homilía, el obispo insistió en “ser cirineos”, es decir, ayudar a los otros.
“Todos nosotros estamos llamados a ser cirineos. San Pablo nos dice que a todos nosotros nos corresponde completar la pasión de Jesús. Ser cirineo en nuestro sufrimiento, pero también ser cirineo ayudando a nuestros hermanos. Existe mucha gente que necesita ayuda. ¿Quién no tiene en la familia, en los amigos, en las comunidades parroquiales, en el trabajo, alguien que está sufriendo? La mejor manera de que uno entiende el mensaje de Jesús y su pasión es ser cirineo. Uno tiene que superar esa cultura global de la indiferencia, que Jesús nos pide ser cirineo, no ser indiferentes, sino comprometerme con el otro” destacó.
En el tramo final de su homilía, el arzobispo de Paraná insistió en que “esta Semana Santa sean días para salir fortalecidos en la profesión de fe” y cuestionó “esa cultura naturista, de creer en Jesús pero también, por las dudas, creer en otras cosas, mágicas”.
Y cerró en línea con palabras del papa Francisco en su homilía de Domingo de Ramos celebrada en Roma en las primeras horas del día, e instó a dar testimonio de humildad, como dio Jesús en la cruz, frente a un estilo de vida actual que exalta “la soberbia, la vanidad y el querer parecer”.