Docentes universitarios entrerrianos definen si inician el segundo cuatrimestre
Del 2 al 5 de julio, la Asociación Gremial de Docentes Universitarios (AGDU) instrumentará el Plebiscito Nacional Universitario en las distintas facultades de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER), para resolver el No Inicio del segundo cuatrimestre.
El referéndum se desarrollará en las universidades de todo el país del lunes 2 al viernes 5 de julio. En Entre Ríos, AGDU recibirá los votos de los docentes universitarios bajo dos modalidades: a través de las urnas que se dispondrán en las distintas Facultades de la UNER, y mediante correo electrónico.
La posibilidad de no retomar el dictado de clases se fundamenta en el contexto de recorte y ajuste presupuestario a las universidades nacionales, la falta de resolución de la paritaria salarial y la insistencia del Gobierno nacional con el techo salarial del 15%. Esto se agrava con los requerimientos del Fondo Monetario Internacional (FMI) respecto a la educación argentina.
Reclamos
AGDU exige la reactivación de la paritaria del sector, a la vez que cuestiona el retraso en el envío de fondos para salarios y gastos de funcionamiento de las universidades, y para el pago de capacitaciones. Además, rechaza el recorte del presupuesto universitario y la subejecución de la partida universitaria.
Sobre este último punto, el gremio que nuclea a los docentes universitarios entrerrianos dio a conocer un informe elaborado por el Instituto de Capacitación y Estudios (IEC) de Conadu elaborado en base a datos del Ministerio de Hacienda de la Nación, que da cuenta de que el recorte y la subejecución presupuestaria comienza a afectar seriamente el desarrollo de las actividades universitarias.
De acuerdo a este informe, el recorte que el Gobierno nacional aplicó al presupuesto universitario es de casi mil millones de pesos, ya que el presupuesto aprobado por el Congreso era de 107,6 mil millones de pesos y ya fue recortado en 975,5 millones, quedando de 106,7 mil millones al 30 de mayo.
El 94,8% de los recursos corresponden a la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU), cuyos fondos ya fueron recortados en 521,4 millones de pesos.
Además, muchos programas sufrieron ajustes y algunos de estos recortes superan el 90%. Por ejemplo, el programa de Acciones para el desarrollo de infraestructura universitaria tenía un presupuesto aprobado de 1276,50 millones de pesos. Pero sufrió un recorte del 36,8% y al 30 de mayo es de 806,60 millones.
El programa de Conducción, gestión y apoyo a las políticas de educación superior contaba con un presupuesto inicial de 241,74 millones de pesos, pero fue recortado a 174,34 millones, 27,9% menos.
El recorte más importante se dio en el programa de Desarrollo de proyectos especiales, contaba con 250 millones de pesos y ahora con sólo 22,70 millones, esto es, un 90,9% menos.
El informe demuestra que se registró una clara subejecución presupuestaria en los primeros cinco meses del 2018, ya que fue más bajo que el alcanzado en 2015 y en 2017, y sólo fue superior al nivel del mismo periodo de 2016, en el cual la ejecución presupuestaria fue inusualmente baja.
Otro dato es que de las 17 jurisdicciones que cuentan con presupuesto para transferir a universidades nacionales, sólo 6 tuvieron ejecución superior al 30%. En 10 casos la ejecución fue inferior al 5%. Y en jurisdicciones como Desarrollo Social, Salud, Trabajo, entre otras, la ejecución es de 0%.
La ejecución del programa Desarrollo de la Educación Superior de la SPU alcanzó el 37,3% del crédito vigente. De las 14 actividades del programa, las únicas que tuvieron una ejecución normal son las vinculadas al pago de salarios y gastos de funcionamiento. Fueron muy bajas las ejecuciones del Fundar (4,5%), las tres actividades de Infraestructura (0%), Desarrollo de Proyectos Especiales (0%), Vinculación con el Sector Productivo (0%) y las Becas en el exterior en Ciencia y Tecnología Bec.Ar. (7%).