Desde el 1° de junio hasta fines de 2026, los argentinos podrán ingresar a China sin visa

“China ha extendido la entrada sin visa a Brasil, Argentina, Chile, Perú y Uruguay a modo de prueba desde el 1 de junio de 2025 hasta el 31 de mayo de 2026. Esperamos dar la bienvenida a más amigos de #LatinAmerica a China,” informó este jueves a la mañana la Cancillería de la República Popular.
El anuncio tuvo lugar luego del protagonismo que tuvo el presidente Xi Jinping en el foro entre China y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribe (Celac), en Beijing, donde el mandatario anunció que destinará otros US$ 10.000 millones para inversiones en esta región.
Para no desairar a Xi, y teniendo en cuenta que pese a sus promesas de ir para este encuentro ni Javier Milei ni el canciller Gerardo Werthein se hicieron presentes, el Gobierno decidió enviar a las reuniones al jefe de Gabinete de la Cancillería, Ricardo Lachterman y al viceministro Eduardo Bustamante, y al embajador en China, Marcelo Suárez Salvia.
Sin embargo, ninguno participó de los encuentros de Celac, y el Gobierno no firmó el documento en disidencia con la región. Para el caso, viajaron a acompañar a Xi, presidentes enemistados con Milei: Lula da Silva, Gabriel Boric, Gustavo Petro, pero también los cancilleres de toda la región sin distinción ideológica. Firmaron el documento 32 países de los 33 de Celac, es decir sin Argentina. Aún así, China hizo saber por los mensajes que entendía al Gobierno, según las fuentes en Buenos Aires.
El gesto sobre visado libre de ahora es muy resonante y muestra la decisión china de mantener su influyente presencia en Latinoamérica pese a los recelos de los Estados Unidos. Y si bien el gobierno de Xi Jinping mantiene conversaciones centrales con la administración de Donald Trump para descomprimir el inicio de una guerra económica y arancelaria entre las dos potencias, sus funcionarios le vienen manifestando abiertamente a los países de América Latina que se alejen de la influencia china.
Milei comenzó su gobierno prometiendo que no tendría relaciones con el “comunismo” chino. Pero con el tiempo y la necesidad formó una buena relación con Xi, y los capitales chinos siguen estando muy presentes en la Argentina, salvo en sectores que verdaderamente irritarían a EE.UU., como los militares, los de telecomunicaciones y portuarios. Sin embargo es el segundo socio comercial y sigue dependiendo del intercambio de monedas, conocido como swap.
Argentina en cambio mantiene un estricto control de visado para ciudadanos chinos pese a los intentos en el pasado de flexibilizarlo y pese a la letra de algunos acuerdos firmados pero no concretados entre Buenos Aires y Beijing. A diferencia de todos los países de la región, Argentina mantiene un esquema más burocrático para dar visados, y el problema mayor es con los empresarios chinos. Y es claro que se reactivaron las visitas de ejecutivos chinos al país los últimos vinieron a comprar soja. Pero anteriormente, hubo una delegación de Fujian, la provincia de donde es la mayoría de la inmigración a este país, que se manifestaron interesados en el sector financiero y tecnológico.