¿Derechos Humanos Para Todos?: postergan indemnización a familiares de soldados
|Más novedades sobre las pensiones de por vida para los ex “presos políticos”: el kirchnerismo logró el apoyo de casi toda la oposición, pero no cumplió, finalmente, con el acuerdo para aprobar también la indemnización a los parientes de los soldados formoseños muertos en un ataque de Montoneros al cuartel en el que cumplían con el servicio militar obligatorio, el 5 de octubre de 1975, en pleno gobierno constitucional de la presidenta Isabel Perón.
La titular del bloque del Frente Para la Victoria, Juliana Di Tullio, pidió el tratamiento sobre tablas del proyecto de ley que otorga una pensión graciable de 6 mil pesos por mes a 10 mil ex detenidos desde el 6 de noviembre de 1974, cuando la viuda de Perón dispuso el estado de sitio.
Carlos Kunkel, Carlos Zannini, Gerardo Ferreyra, Jorge Taiana y Juan Carlos Dante Gullo encabezan el listado de beneficiarios, entre los nombres más rutilantes del oficialismo.
Esa instancia no estaba prevista en el orden del día, pero el proyecto igual fue aprobado por oficialistas y opositores, con sólo dos votos en contra: Carlos Brown y Alberto Asseff, y una abstención, Pablo Tonelli.
De todos modos, el diputado Ricardo Buryaile, del radicalismo formoseño, confía en que en marzo será aprobada la indemnización a los parientes de los soldados muertos en el combate en el ataque montonero. Allí murieron también doce guerrilleros, cuyos herederos ya cobraron esa indemnización, como si hubieran sido víctimas del terrorismo de Estado.
“Tengo la promesa de Kunkel y de las autoridades del Frente Para la Victoria”, dijo Buryaile a Perfil.com. “Eso y la presión que seguramente harán los formoseños sobre los diputados peronistas, que no me ayudaron a conseguir la aprobación de esta ley”, afirmó Buryaile, autor del proyecto.
Los diez soldados formoseños cumplían con el servicio militar obligatorio; tenían 21 años y eran muy pobres; tanto que aquel domingo varios no se habían podido ir a visitar a sus familias porque no tenían dinero para viajar al interior de la provincia. Habían cambiado sus francos por unos pesos o unos vasos de vino o Coca Cola.
Ese ataque fue bautizado por Montoneros como “Operación Primicia” porque fue el debut del “Ejército Montonero”. Los guerrilleros creían que los soldados que estaban de guardia se rendirían sin combatir pero sucedió lo que no habían previsto: los “colimbas” lucharon y en un cruento combate que duró media hora rechazaron el copamiento.
El desquite ultra K
El compañero de militancia peronista de los Kirchner en los ’70 y hoy diputado Carlos Kunkel, estuvo detenido en Chaco y aislado sin un proceso judicial entre 1975 y 1983 por haberse sumado a la guerrilla Montoneros. En la era K se ganó una banca en el Congreso -la renovó hasta 2017-, pasó por el Consejo de la Magistratura, y acomodó a una veintena de familiares directos en cargos del Estado.
A su vez, multiplicó su patrimonio. Según su última declaración jurada a la AFIP, Kunkel posee una fortuna de $2.560.389 -un departamento en Capital, siete terrenos en Villa Gesell de 4.000 m2- y en 2012 tuvo ingresos totales por $773.779. Como diputado cobrará cerca de $50.000 por mes en 2014. ¿Necesitará además una pensión extra?
El ex diputado de la Nación y actual legislador porteño del Frente para la Victoria, Dante “Canca” Gullo, fue líder de la JP en los 70 y estuvo preso en el penal de Sierra Chica. Su madre y su hermano están desaparecidos. Con el kirchnerismo incursionó en la primera línea de la política y también consiguió buenos negocios con su empresa familiar de carteles en la vía pública.
Entre mayo de 2009 y las elecciones presidenciales de octubre de 2012, la cartelera Pinta Baires S.R.L -cedida por Gullo a sus hijos en 2008- cobró $13.402.721 pesos de pauta oficial, según informes contables de la Jefatura de Gabinete a los que accedió en exclusiva Perfil.com.
El exmilitante del ERP Gerardo Ferreyra es uno de los empresarios que más negocios edificó durante el kirchnerismo al punto de cimentar desde la obra pública el emporio constructor Electroingeniería con Osvaldo Acosta.. En 2000, la firma socia de Siemens y dueña del 50% de Transener (la mayor transportista eléctrica del país) facturó en 2000 US$ 60 millones, en 2009 US$ 100 millones y en 2013 esa cifra se estaría duplicado.
Su entramado empresarial llegó de la mano de Claudio Villarroel hasta los medios: lanzó 360 TV y compró Radio Del Plata. De modo que el exguerrillero del Ejército Revolucionario del Pueblo, detenido a fines de los ’70 por la dictadura militar, hoy no precisaría de un pensión extra de 6.000 pesos mensuales.
Zannini al poder. El poderoso secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, estuvo detenido por la dictadura 1976 y 1980 por su militancia maoísta. En 1984 conoció a los Kirchner y nunca más abandonó la función pública en Santa Cruz y la Casa Rosada. Desde 2010 es el principal confidente de la Presidenta y sin embargo, de los altos funcionarios es uno de los más “pobres”.
Según reveló Perfil.com la semana pasada, el funcionario con más poder después de Cristina Kirchner declaró a la AFIP bienes y depósitos (menos deudas) por un total de $541.002, según la declaración jurada a diciembre de 2012 que esta divulgó con meses de retraso la Oficina Anticorrupción (OA).
No obstante, la presidenta le dio un aumento salarial del 65% entre 2011 y 2012: el año pasado cobraba $41.000 pesos al mes. En 2014, cuando comience a cobrar la pensión por haber sido preso político su salario rondará los $65.000.
Como canciller de la Nación (2007 a 2010), Jorge Taiana aseguró en sus últimas declaraciones juradas ser dueño de tres propiedades y poseer 80.000 dólares en ahorros, entre otros bienes. En 2008 tenía un patrimonio de $3.057.349, según la presentación que realizó a Oficina Anticorrupción.
En diciembre, el exministro de Relaciones Exteriores y Culto asumirá como legislador por la Ciudad de Buenos Aires por el Frente para la Victoria y se asegurará así un ingreso mínimo de $25.000 al mes hasta diciembre de 2017. Tampoco le haría falta la pensión por haber permanecido detenido entre 1975 y 1982 en la Unidad 9 de La Plata, donde fue testigo directo de toda clase de crímenes de lesa humanidad.