Damnificados del Poliedro venezolano demandan viviendas
|A trece meses de vivir en habitaciones divididas con sábanas viejas las 85 familias damnificadas que ocupan las instalaciones de la sede central del Repechaje Preolímpico (el Poliedro de Caracas), serán desalojadas antes de 15 de febrero a viviendas dignas en la ciudad a un sector que aún desconocen, como afirma María Maita, afectada y vocera del Comité de Vivienda del albergue.
Maita relata que al menos ese fue el último acuerdo al que llegaron con el padrino del albergue, el Ministerio de Educación Superior, luego de protestar la mañana del viernes porque el Gobierno quería llevarlos a los refugios Torre El Chorro (Av. Universidad) y oficinas de la Opsu en la esquina La Marrón, porque necesita el Poliedro para realizar los juegos del Preolímpico de Baloncesto.
“Antes del 15 de febrero próximo nos ofrecieron llevar a 57 familias a casas en Caracas. Llevamos trece meses aguantando peleas, problemas y enfermedades. Tenemos niños con discapacidad, embarazadas y adultos mayores viviendo en camerinos o en camas literas divididas con sábanas. Aquí no hay privacidad”, resalta Maita en las afueras de un Poliedro de Caracas con poca seguridad del Estado.
Otras 17 familias damnificadas de La Vega, El Junquito y Coche esperan traslado al urbanismo Ciudad Belén de Guarenas, estado Miranda.
Al resto de los afectados que aún ocupan áreas diseñadas para eventos deportivos, espectáculos musicales o galas de la belleza les ofrecieron trasladarlos a casas ubicadas en los estados Táchira, Barinas y Maturín.
“El padrino pelea por los cupos de vivienda en Caracas. A más de un año de las lluvias nos ofrecieron casa en una chivera expropiada en la avenida Fuerzas Armadas. Pero allí no han construido nada. Luego la promesa fue viviendas en Montalbán, muy cerca del Centro Comercial Uslar, allí solo hay movimiento del terreno. En tres oportunidades a las familias que les prometieron viviendas en otros estados los dejaron con sus maletas listas y aún no son trasladadas”, relata Maita.
Mientras que Claudia Rosales, damnificada de La Vega, denuncia que el Poliedro es un refugio tipo E, con baños que no funcionan, duchas tapadas, bateas improvisadas para lavar la ropa y con fallas graves en el suministro de agua potable y comida para 235 personas.
“En Navidad las hallacas y ensaladas llegaron descompuestas. El 31 de diciembre cortaron el servicio de electricidad a las 9 pm. Nos cansamos de tanta represión. Sabemos que en el lugar hay una familia problemática que el martes pasado generó una pelea con machetes, cuchillos y palos que casi matan a un niño. Nuestras camas literas sirven de escudo porque la vigilancia interna del Poliedro no se mete en esos problemas vecinales. Hoy (ayer) al menos tenemos tranquilidad en el refugio”, resalta.
A pocos metros las 250 familias que vivían en el Poliedrito fueron trasladadas a viviendas temporales en Fuerte Tiuna. Allí convivían familias damnificadas de Coche, El Valle y otras parroquias en los llamados refugios Che Guevara y Pedro Emilio Coll. “Esta será la sede alterna de Preolímpico de Baloncesto, por eso este mes salieron las últimas familias. A urbanismos de Charallave, estado Miranda, fueron llevadas solo 20 familias que aceptaron casas expropiadas”, afirman los encargados del lugar.
Fuente: El Universal.-