Cuba inicia las excarcelaciones de 553 presos tras la decisión de EE. UU. de retirar su designación como patrocinador del terrorismo
El Gobierno cubano comenzó este miércoles con las excarcelaciones de 553 presos, anunciadas el día anterior, luego de que Washington decidiera sacar a La Habana de su lista de países que patrocinan el terrorismo. Esta medida es parte de un acuerdo impulsado por la Iglesia Católica, que también facilitó la liberación de prisioneros políticos.
Entre los primeros excarcelados figuran Dariel Cruz García, Lisdiany Rodríguez Isaac y Donaida Pérez Paseiro, quienes son considerados presos políticos por diversas ONG de derechos humanos que operan en Cuba. Sin embargo, la excarcelación no debe confundirse con la liberación, ya que estos individuos no han sido liberados, sino que se encuentran bajo un proceso gradual.
A primera hora de la mañana, familiares de varios reclusos por motivos políticos fueron convocados a centros penitenciarios sin previo aviso, como parte de la decisión del gobierno cubano de llevar a cabo las excarcelaciones de manera progresiva.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba emitió un comunicado, el cual expresó que las liberaciones se basan en “un análisis cuidadoso conforme a las distintas modalidades que contempla la legislación cubana, como parte de la naturaleza justa y humanitaria de los sistemas penal y penitenciario de Cuba”. Además, se aclaró que los excarcelados recibirían sus respectivos beneficios de forma gradual.
Este proceso se lleva a cabo tras la intervención del Papa Francisco, quien jugó un papel importante en las negociaciones para hacer posible la liberación de los prisioneros. No es la primera vez que la Iglesia Católica interviene en estos procesos, ya que en la década pasada facilitó la salida de varios opositores encarcelados durante la “Primavera Negra” de 2003, en la que más de 70 disidentes fueron arrestados y sentenciados.
En un contexto paralelo, el presidente Joe Biden anunció el martes que retiraría la designación de Cuba como patrocinador estatal del terrorismo, un cambio importante en la política exterior de Estados Unidos hacia la isla. Este gesto es parte de un acuerdo más amplio que busca la liberación de prisioneros políticos y otras personas consideradas por Washington como detenidas injustamente.
Según funcionarios estadounidenses, se espera que muchos de los prisioneros políticos sean liberados antes de que finalice el mandato de Biden, el 20 de enero. Además, se prevé que EE. UU. reduzca algunas de las presiones económicas sobre Cuba y revise el endurecimiento de las sanciones implementadas por el expresidente Donald Trump en 2017.
En Cuba, las autoridades recibieron de manera positiva el anuncio de Estados Unidos, pero aclararon que las restricciones del embargo económico siguen siendo un problema importante, ya que continúan afectando gravemente la economía del país.