Con su discurso en Davos, Javier Milei movilizó al mundo antifascista y antirracista
La Marcha Federal LGBT que se desplegó este sábado en Buenos Aires y otros puntos importantes del país también se replicó en otras ciudades del mundo: desde Río de Janeiro hasta Nueva York, Madrid, París, Londres, Roma y Berlín entre las metrópolis que se movilizaron bajo la consigna “antifascista y antirracista” en contra de los dichos del presidente de la Nación, Javier Milei en Davos.
En su participación en el Foro Económico de Davos, el mandatario se refirió al colectivo LGBT en duros términos en un discurso que generó un repudió de diferentes sectores. Acusó a la “ideología de género”, en sus versiones más extremas, de cometer abusos. “Son pedófilos”, calificó.
En las principales ciudades de Europa hubo movilizaciones. Barcelona, Amsterdam, Ginebra, Lisboa, Piacenza y Modena también tuvieron marchas.
“Milei está destruyendo la democracia”, decía uno de los carteles levantados en la Berlín, capital de Alemania, durante una de las decenas de marchas que se realizaron este sábado en el mundo. Los manifestantes se congregaron en Puerta de Brandemburgo, un lugar mítico.
“Detener a la extrema derecha”, fue una de las consignas de los carteles que se enarbolaron en la capital inglesa de Londres. También había una bandera argentina con la palabra “liberalismo” dentro del símbolo de “prohibido”.
En París, ciudad con una importancia tradición de izquierda y por los derechos LGBT, también se movilizó en pleno invierno, con bufandas y abrigos. Se pintaron los colores vivos de la bandera de la diversidad y hubo carteles y cantos contra el presidente argentino. “Zurda siempre. Facha nunca”, se podía leer en uno de los carteles que tenía la cara del mandatario dibujada con gesto duro.
La convocatoria “antifascista y antirracista” también tuvo replicas en Latinoamérica. Desde México hasta Río de Janeiro; en las principales capitales del continente hubo concentraciones.
Además de las capitales de México y Brasil, hubo marchas en Montevideo, Sao Paulo, Santiago de Chile, Florianópolis, y Colonia. Cada ciudad con su particularidad, pero repitiendo los colores arcoíris que caracteriza a la diversidad.
“Só existen dos generos: fascistas e antifascistas” decía un cartel en Sao Paulo, una de las principales ciudades de Brasil. No era la única consigna. En contra del odio y el racismo se gritó allí y en otras ciudades de Brasil.