Con el sistema SIRA aumentaron 11% las importaciones
|A partir de la puesta en marcha del SIRA, ingresaron un 33% más de solicitudes respecto a igual período del año anterior y, si bien se aprobaron sólo un 2% más de solicitudes, en términos de montos se registra un incremento de 11%.
A partir de la entrada del Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), desde noviembre pasado y hasta fines de febrero último, el monto de compras externas aprobado fue un 11% superior al registrado en igual período del año precedente, por más de USD 27.000 millones según un estudio del Ministerio de Economía.
El trabajo precisa que, a partir de la puesta en marcha del SIRA, ingresaron un 33% más de solicitudes respecto a igual período del año anterior y, si bien se aprobaron sólo un 2% más de solicitudes, en términos de montos se registra un incremento de 11%.
La evolución mensual de las autorizaciones registra un incremento sostenido mes a mes, resultando febrero último un 70% superior a octubre pasado.
Los datos del Palacio de Hacienda muestran que en total fueron casi 22.000 las empresas las que presentaron solicitudes de importación en el nuevo sistema SIRA, de las cuales el 98% fueron pymes. Se le aprobaron solicitudes al 87% de las empresas.
En cuanto al pago de las importaciones, el trabajo afirma que en el 96% se realizaron a través del mercado único de cambio (oficial) en tanto que el 4% restante no implicó giro de divisas o las empresas hicieron las operaciones con recursos propios.
Al analizar la composición de las autorizaciones, resulta que 51% corresponde a insumos y materiales para la producción con un porcentaje de 81% de aprobación de lo solicitado. Combustibles y energía participó con un 20%, los bienes de capital representaron un 16% y los bienes de consumo (más autos) 13%.
Desde el punto de vista sectorial, el rubro que mayor incidencia tuvo fue combustibles y energía – se le autorizaron importaciones por USD 5.298 millones, 96% de lo solicitado – seguido por automotriz -USD 3.668 millones, el 87% de lo pedido – y productos químicos – USD 2.683 millones, 73%-.
Desde que comenzó el régimen SIRA, las importaciones aumentaron 3%, principalmente por el incremento del rubro combustibles y energía – 59%-, mientras que el resto de las importaciones disminuyeron 4%.
En el último trimestre de 2022, 16.029 empresas lograron concretar importaciones por USD 16.332 millones. El 19% de estas empresas generaron exportaciones por USD 17.937 millones. Como las importaciones que realizaron sumaron USD 10.104 millones, aportaron un superávit comercial de USD 7.831 millones en el período octubre diciembre del año pasado.
Quejas
Las quejas de algunas cámaras y empresas vinculadas a demoras en las autorizaciones de las SIRA, son desestimadas por las autoridades del Palacio de Hacienda.
Al respecto, comentan que, a fin de año, cuando se les solicitó a las cámaras empresarias que hagan llegar las necesidades de importaciones anuales les llamó la atención el aumento en los pedidos, más aún teniendo en cuenta que las proyecciones de crecimiento económico para este año son inferiores a la registrada el 2022.
“En el caso de la presentación de la Unión Industrial Argentina (UIA), por ejemplo, en los rubros: Alimentos y Bebidas el aumento fue de 118%; en tanto en el sector automotriz 33% y maquinaria agrícola 31%”, explican fuentes del equipo económico. Estos incrementos de las importaciones también se registraron en los pedidos de la COPAL y la Cámara de la Construcción, por citar algunos ejemplos.
“Quizás los reclamos respondan a que esperan importar por los montos solicitados”. Insisten que el trabajo articulado entre la Aduana, Secretaria de Comercio y AFiP les permite contar con un tablero de control de cada empresa que solicita importar. Este tablero muestra en tiempo real la cantidad de solicitudes aprobadas, rechazadas y la historia de importaciones de la empresa.
Respecto al criterio que se tiene en cuenta para autorizar las SIRA se prioriza los bienes de insumos y bienes intermedios antes que bienes de capital. “La intención es defender las divisas y no frenar la producción”. Respecto al régimen anterior, admiten que aún quedan pendientes a liquidar unos 8.800 millones de dólares culminándose en julio las ultimas SIM autorizadas.
Denuncias
Asimismo, rechazan las denuncias de “falsos gestores” que facilitarían la aprobación de las SIRA. Insisten que cuando han detectado irregularidades “hemos ido a la Justicia”. También explican que las quejas pueden obedecer a que “ahora no se pueden tener excedentes de stock como ocurría antes”.
Cautelares
Otro de los temas que el ministro de Economía suele poner como un ejemplo de las malas prácticas empresarias son la presentación ante la Justicia de las cautelares.
De acuerdo a datos oficiales, al 12 de octubre del año pasado existían 3.146 medidas cautelares vinculadas al SIMI (en procesos judiciales iniciados en 2021 y 2022 que involucraban a valores FOB por USD 2.521 millones.
En cuanto a las cautelares desistidas durante el año en curso, en febrero quedaron sin vigencia SIMIs obtenidas por medidas cautelares por USD 154 millones.
Los datos del Palacio de Hacienda arrojan que asciende a USD 23 millones – solo un 1% del monto original vigente a octubre de 2022- el stock de cautelares vigentes respecto de SIMIs.
Críticas
Desde su puesta en marcha, el régimen el SIRA fue motivo de críticas de las entidades empresarias, como la Unión Industrial Argentina y otras cámaras ligadas a la importación que señalaron que el sistema dificulta el acceso a insumos y por lo tanto la planificación de las operaciones.
El 76% de las empresas recibieron menos del 25% de las importaciones que solicitaron según una encuesta a más de 200 empresas llevada a cabo a fines de enero por la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC).
Además, se las empresas se quejan de que “pueden llegar a tener demoras de hasta 90 días para su aprobación”. Por esta situación, el 93% de los encuestados afirman que se han reducido los niveles de insumos, stock y ventas de las empresas y, por lo tanto, ya se ven afectadas en su normal funcionamiento.
Desde el Ministerio de Economía se señala que el SIRA es un sistema “mucho más eficiente” que su antecesor (el SIMI), en momentos en que las autoridades hacen malabares para administrar las escasas reservas en divisas con que cuenta el Banco Central.
Reservas
Estimaciones privadas calculan que las reservas netas rondan los USD 3.000 millones a 3.300 millones equivalentes a medio mes de importaciones (se considera que deberían cubrir al menos seis meses).
En este contexto es que el Palacio de Hacienda realiza esfuerzos para lograr ingresos de divisas en un contexto en el que la exportación del agro – la principal fuente de dólares – se encuentra severamente afectada por la sequía -las previsiones privadas calculan que se perderán por lo menos USD 10.000 millones, en tanto que las previsiones más pesimistas llegan a duplicar este faltante.
Justamente, el ministro de Economía, Sergio Massa, acordó este martes un desembolso de USD 840 millones del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF). La mayor parte de esta línea tendrá como destino el financiamiento de obras del gasoducto para Vaca Muerta.
Cambios
Cuatro meses atrás, y mediante la Resolución General, se estableció el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), en reemplazo del Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI).
La medida, cuyo propósito es “asegurar un adecuado desarrollo de las operaciones de comercio exterior”, según el texto oficial, implementa una metodología de seguimiento, control y registro que establece criterios diferenciados de acceso, modalidad y trazabilidad de los flujos comerciales.
El sistema establece la coordinación entre la Dirección Nacional de Aduana, el Banco Central de la República Argentina, la Administración Federal de Ingresos Públicos y la Secretaría de Comercio, a fin de ordenar y generar una trazabilidad completa en las operaciones del comercio exterior.
En este sentido se incorporó una “Cuenta Única de Comercio Exterior” que permite registrar y consultar las operaciones cambiarias del importador, vinculadas a los trámites de importación. El sistema efectúa evaluaciones sistemáticas en tiempo real sobre los datos ingresados, emitiendo los plazos de acceso al Mercado Libre de Cambios (MLC).
La operatoria permite identificar anticipadamente aquellas operaciones que no guardan relación con la capacidad económica y financiera del importador como así también revisar el historial del importador para “garantizar el cumplimiento de las regulaciones de seguridad básicas de los productos importados”.
La declaración efectuada por los importadores a través de la nueva plataforma tiene un plazo de validez de 90 días corridos, contados a partir de la fecha en que tenga el estado de salida. Se establece en 60 días el plazo máximo de espera para la acreditación de dólares para el pago de importaciones en el caso de pymes y entidades civiles, lapso que se extiende a 180 días para las grandes empresas.
Fuente: Liliana Franco para Ámbito.com.-