Con apoyo de EEUU y Argentina, el brasileño Ilan Goldfajn fue elegido presidente del BID
|Los gobiernos de América Latina y el Caribe eligieron al brasileño Ilan Goldfajn para convertirse en el próximo jefe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), una institución financiera clave para la región y uno de sus puestos más codiciados.
Goldfajn se convertirá así en el primer presidente del brasileño del BID. Contó con el apoyo de su país, de los EEUU, Canadá y de Argentina, que horas antes de que comenzara la Asamblea retiró sorpresivamente a su postulante, Cecilia Todesca Bocco.
El brasileño, ex presidente del Branco Central de su país, reunió el apoyo del 80,08% de los votos en la Asamblea.
El respaldo de la administración Biden fue fundamental, ya que EEUU controla el 30% de las acciones con derecho a voto del banco, casi el triple que Argentina (11%) , que Brasil (7%), que ocupan el segundo y tercer lugar.
Como parte del acuerdo para retirar la candidatura de Todesca, Argentina tendrá una Vicepresidencia, la de Sectores; la Gerencia de Infraestructura y liderará el nuevo Instituto de Género e Igualdad.
“Siempre buscamos un consenso. La región tiene que trabajar junta, los desafíos y las oportunidades son compartidas y hemos acordado también una agenda de trabajo con una perspectiva y temas que nos parecen estratégicos para el desarrollo económico y social”, afirmaron desde la embajada argentina en los EEUU una vez que se conocieron los resultados.
Goldfajn sustituirá en el cargo a Mauricio Claver-Carone, elegido en 2020 y destituido en septiembre por haber dispensado un trato de favor a una empleada con la que mantenía una relación íntima. Su mandato estuvo marcado por tensiones con algunos de los gobernadores, que suelen ser ministros de Hacienda u otras autoridades económicas de los 48 países miembros del banco, y puertas adentro con parte de la plantilla.
Fundado en 1959 para contribuir a la mejora de las condiciones de vida en la región, el BID se ha convertido con el tiempo en una fuente de financiamiento para el desarrollo económico social e institucional de América Latina y el Caribe.
Godlfajn, que fue postulado por el presidente saliente, Jair Bolsonaro, logró la elección profesando su carácter “no ideológico ni partidario”. “Se necesita un líder que no sea ideológico, que no sea partidario, que sea alguien que no esté discutiendo cuestiones que no sean de fondo”, repitió varias veces durante los días previos.
El brasileño hasta ahora se desempeñaba como jefe del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Tiene un doctorado en Economía del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), una maestría en Economía de la Pontifíca Universidade Católica y una licenciatura en Economía de la Universidade Federal, ambas en Río de Janeiro.
Ocupó el cargo de Gobernador del Banco Central do Brasil (BCB) entre mayo de 2016 y febrero de 2019. En 2017, fue elegido Banquero Central del Año por la revista The Banker, y el año siguiente fue nombrado Mejor Banquero Central por la revista Global Finance.
La experiencia laboral de Goldfajn en el sector privado incluye su trabajo desde diversos cargos, como el de Economista Jefe y Socio de Itaú Unibanco, Socio fundador de Ciano Investimentos, y Socio y Economista en Gávea Investimentos, tres instituciones financieras de primera línea en Brasil.
También se desempeñó como Presidente del Consejo Asesor de Credit Suisse Brasil. y ha trabajado como consultor para diversos organismos internacionales, como el Banco Mundial, las Naciones Unidas y el FMI.
Goldfajn, que presume de ser “un buen mánager y administrador”, estima que el BID debe estudiar cómo incrementar la eficacia y proceder por etapas. “Hay que examinar cómo optimizar el capital que hay, cómo optimizar el balance del banco y hay formas de hacerlo, con garantías cruzadas, con compra y venta de los títulos, midiendo los riesgos que hay en la cartera”, enumeró durante su campaña.
Sus prioridades, había adelantado, serán la lucha contra la pobreza y el cambio climático, junto con la inversión en infraestructura. Además, insitió en la necesidad de más diálogo con la asamblea de gobernadores. “El próximo presidente va a tener que enfrentar un BID que tiene la moral baja, con muchos conflictos, mucho más ideológico, que necesita reenergizarse” pero “esto es tanto un desafío como una oportunidad”, declaró a la AFP.
Goldfajn asumirá el cargo por un período de cinco años y, como presidente, “manejará las operaciones y la administración del Banco, que trabaja con el sector público de América Latina y el Caribe”, apuntó el BID.
Además, añade el comunicado, presidirá el directorio ejecutivo del BID, el directorio ejecutivo de BID Invest (que trabaja con el sector privado de la región) y el Comité de Donantes de BID Lab, el laboratorio para proyectos de desarrollo e innovación.