Complicado escenario para el café en Argentina
El precio del café aumentó fuertemente en Argentina: el paquete de 250 gramos pasó de $8.000 a un promedio de $13.500 en enero. Con un escenario complejo a nivel local y global, atravesado por el cambio climático, The Economist advirtió que no se podrá atender a la demanda en los próximos años. ¿Cómo impacta esto en el mercado nacional?
En Argentina no hay cultivo del grano de café, por lo que el 100% de lo que se consume a nivel local es importado de diversos países, como Colombia, Nicaragua y Brasil, el principal productor que concentra el 30% del mercado mundial. Se suma Indonesia, en cuarto lugar.
“Las olas de calor extremo en Brasil menguaron las cosechas”, señaló a BAE Negocios el periodista, escritor y sommelier de café, Nicolás Artusi. “El café es un commodity natural, y como tal tiene años buenos y tiene años malos”, puntualizó.
“Por otro lado, se espera que también para este año los efectos de la corriente de El Niño perjudiquen mucho las cosechas en Indonesia”, agregó el autor de “Manual del Café, guía definitiva para comprar, preparar y tomar”.
Respecto a cómo podrá repercutir este panorama internacional en el consumo local, Artusi observó que “en los últimos tiempos el café tenía un aumento muy importante”, relacionado con la situación internacional.
A nivel nacional se suma, explica el especialista, la devaluación y la quita del café de la lista de productos esenciales importados, medida que llevó a cabo el Gobierno anterior en sus últimas semanas.
Los distintos eslabones de la cadena cafetera, pero sobre todo los comerciantes, y dueños de tiendas de café, advirtieron por los aumentos que tuvieron que trasladar al precio final del producto. El cuarto de café para consumir en casa, por las nubes.
Un frasco de café instantáneo de 170 gramos salía $1.690 en mayoristas antes del 21 de noviembre. Tras el balotaje, llegó a $3.200, según detalló a este medio el vicepresidente de la Federación de Almaceneros de la Provincia de Buenos Aires, Fernando Savore.
A su vez, detectaron la escasez de café en las góndolas. “En los hipermercados se encuentra muy poco el producto café”, comentó Savore.
El vicepresidente de Almaceneros aseguró que el consumo no solo del café “va a caer al 50%, literalmente”, así como el de otros productos. Duplicado el valor de la mayoría de los rubros, “Para poder alcanzarlos, una familia tiene que cobrar exactamente el doble o más”.
El café sube de precio
Con el consumo de café en Argentina sucede “un fenómeno curioso”, consideró Artusi. “El café tiene un consumo que se mantiene clavado desde el principio de la década del 70 y que está alrededor de un kilo por habitante por año”, explicó.
“Así que parece, por un lado, obvio que va a haber una merma inmediata en el consumo, pero viendo la película completa, muy probablemente no mueva demasiado la aguja en lo que es el consumo general de café en la Argentina”, completó.
“Teniendo en cuenta que en la alimentación son cuatro o cinco grandes jugadores que se sientan a una mesa y definen los precios, me animaría a decir que ese modelo de capitalismo ha fallado en su aplicación argentina y que no puede ser nada bueno para el consumidor”, sostuvo Artusi, en referencia a la política económica.
Una temporada de verano baja con precios altos
Los precios de la temporada de verano explican la baja de movimiento turístico a nivel general. Tomarse un café sale en la costa, en promedio, $1.700.
María Elena Tito es la dueña de un café de especialidad en San Bernardo, partido de La Costa, y con sede en Colegiales, CABA: “La estoy luchando porque salgo a buscar precios por todos lados. Pero si a mí me venden caro, yo tengo que sacar mi ganancia y trasladarlo”, dijo a BAE Negocios.
Con una temporada en términos generales no muy buena para la Costa argentina, en San Bernardo hay menos gente veraneando. Restaurantes casi vacíos en pleno centro; los comerciantes esperan la segunda quincena de enero para que repunte.
Por la calidad de los granos, los cafés de especialidad son más caros en comparación con los “tradicionales” (un latte sale $2.200). En el café de Tito, un paquete de 250 gramos cuesta hoy $12.500. En junio estaba $3.500.
Comentó a este medio que intentan postergar lo más posible los aumentos al consumidor antes de trasladarlos inmediatamente cuando suben los costos. “Aguantás, hasta que no aguantás más y tenés que subir”, explica la dueña del café.
Por qué aumentó el precio del café
En octubre 2023, el café dejó de pertenecer a la lista de bienes esenciales importados. Su precio se duplicó por las diferentes trabas para importar, justifican desde el sector, ya que el cultivo no existe en el país.
En diciembre, se registraron aumentos de más del 100% en algunos casos. Fuentes del sector cafetero atribuyeron la suba directamente a la importación.
Además, tras el cambio de gobierno en Argentina, los supermercados advirtieron por aumentos desmedidos de los proveedores. Para no perder clientes, los supermercados se negaron a trasladar a las góndolas los aumentos que los proveedores envían y hay productos que escasean, como el café.
Al contexto del país se le suma la situación internacional. El precio del café cerró el 2023 con un incremento del 11,8% respecto al 2022, según un informe de la Organización Internacional del Café (OIC).
El Indicador de Precios Compuesto de la OIC promedió en diciembre 175.73 centavos de dólar por cada 453 gramos producido, un aumento de 8,8% respecto de noviembre.
La OIC explicó que el aumento es producto del conflicto en el Mar Rojo, donde los rebeldes hutíes de Yemen atacan barcos de transporte comercial como venganza contra Israel por su campaña militar en Gaza.
La situación obligó a los buques transportadores de café a desviar sus trayectos, y en consecuencia, las empresas navíos incrementaron los costos por el tiempo extra que representan las nuevas rutas marítimas.