Coleffi admitió el contacto con Echagüe
|Diálogo breve, pero esclarecedor. Anoche anticipamos que la dirigencia del Atlético Echagüe Club habría mantenido contactos con el destacado entrenador bahiense Pablo Coleffi. El propio coach reconoció el interés del club paranaense en sucinta charla con Cuestión Entrerriana vía chat de Facebook.
“Agradezco a la comisión directiva de Echagüe, que en la persona de Marcelo Cassaretto se acordó de mí. Obviamente ellos evaluarán las condiciones antepuestas no solo desde lo vinculado a lo económico sino de manera especial en cuanto al proyecto deportivo, y tomarán la decisión adaptada a sus posibilidades”, admitió Coleffi, quien si bien deslizó su optimismo respecto a las tratativas abordadas auguró “lo mejor para que Echague pueda quedarse en la máxima categoría ya que Paraná, por su historia en el básquet, cantidad de equipos y chicos que juegan a este deporte y por la tradición que hay, merece tener una plaza de Liga Nacional”.
El carismático técnico optó por evitar precisiones y/o deslizar mayores comentarios, habida cuenta del respeto a la etapa de negociaciones, sabiendo -obviamente- que en la Ley de la Oferta y Demanda del mercado, los directivos de la institución paranaense pueden estar dialogando con otros colegas.
Vale la pena reflexionar… La coyuntura del Caso Barsanti, la rescisión del acuerdo con Maffei en diciembre, ¿no daban para que estas diligencias o indagaciones se hayan cristalizado con mayor oportunismo?
Obviamente… No era lo mismo si Maffei se bajaba del barco antes, o si los patrones decidían su suerte con mayor antelación viendo su muy floja campaña y los infecundos recambios adoptados; tampoco es lo mismo el hoy que a mediados de diciembre…
Se fue Maffei, dejó las chances de dos recambios y Barsanti utilizó uno que solo en un partido dio síntomas positivos y en la gira por el noreste ratificó todos los dichos (deportivos…) acerca de él durante y especialmente luego de su etapa universitaria pese a poseer un talento indiscutible.
Por lo tanto, ofrecer el cargo de entrenador jefe con toda el agua que corrió bajo el puente ya representa una responsabilidad, un compromiso mayor para el que acepte.
Seremos más claros… Quien acuerde hoy, es carne de cañón. Tiene que arreglar MUY BIEN en lo contractual (sueldo y condiciones/proyecto) para no sufrir en la pelea franca por el descenso y poder quedar “pegado” en el desprestigio de una lucha por mantener la categoría.
Sin ir más lejos, en la última temporada, Miguel Volcan Sánchez pudo hacer TODO DISTINTO con Sionista respecto a lo desarrollado por Sebastián Svetliza. Aunque… eso no ocurrió, más aún… profundizó los males ya que se aferró a un libreto y características en lo SINGULAR, dejados como herencia por el renunciante y hasta falló en los últimos recambios.
Quien llegue a Echagüe debe poner punto final a situaciones límites en la FORMA, en el MODO, de jugar. Y para ello debe tener espalda, contando solo con una ficha para cambiar y con el triple malestar de dolencias psicofísicas de toda índole, inclusive con un Franco Barroso que no ha jugado en el 2017 y NADA se ha informado acerca de la severidad CONCRETA de su lesión.
Por eso… si bien Barsanti podrá estar al frente en los primeros días de febrero, tanta incertidumbre es tóxica. Nociva. Sigue la dirigencia de Echagüe manejando tiempos ostensiblemente diferentes a la realidad coyuntural, a la problemática cada vez más aguda.
Sea Coleffi o quien fuera, la decisión debe ser tomada AYER. No hay ninguna duda.