Clausura de AFA: Huracán hundió a Chacarita
|Huracán venció por 2-0 a Chacarita en Parque de los Patricios y tomó aire tras un par de malos resultados. Por su parte, el Funebrero se hunde y, tras cuatro caídas en fila, Fernando Gamboa podría dar un paso al costado de un momento a otro. Estudiantes no afloja.
El primer tiempo fue decididamente mal jugado y con pocas situaciones de riesgo, pese a que de arranca Franzoia obligó a Cejas. Tras esa acción inicial se prestaron la pelota, no hilvanaron tres pases seguidos a un compañero y exhibieron los motivos de sus compromisos: el Globo sufre proyectando los promedios del año que viene y el Funebrero, ni puede pensar en eso, hoy está en descenso directo.
A los 26, en la más clara de aquel soponcio, Eduardo Domínguez sacó un violento remate que desviaron entre Cejas y el travesaño. Chaca casi canta bingo tras una distracción de la última línea local, pero Morales pateó desviado.
El complemento arrancó de la misma forma que su antecesor, pero a los 11 minutos cambió el partido. Gino Clara capturó un rebote a la salida de un tiro libre y sacó un remate violento, desde 30 metros, que con la colaboración de Cejas se transformó en la diferencia entre uno y otro.
El gol agrandó al local, que jugó más y mejor con la pelota por el piso, y obligo a Chacarita que salió en busca del empate, que estuvo cerca de conseguir minutos más tarde, pero Monzón ganó ante Echeverría y Ramírez.
Sobre el final pudo ser para los dos, Toranzo reventó el pelo, Clara casi festeja por duplicado y Monzón volvió a esforzarse para sacar al córner un cabezazo de Frezzotti. En una contra, cuando ya se jugaban 43, fue Paolo Goltz el que sentenció el juego con un remate bajo.
Estudiantes festejó en Tucumán
Bajo la lluvia de Tucumán, Estudiantes construyó un sólido triunfo por 3-1 sobre Atlético que le permite continuar cerca de la pelea por el Torneo Clausura. El León fue de menor a mayor en el desarrollo, que se encaminó por completo cuando en el segundo tiempo su rival se quedó con diez hombres.
El conjunto local consiguió durante el primer período una mayor explosión arriba de la mano de un movedizo Emanuel Gigliotti, aunque careció de dominio en el mediocampo, mientras que fue el Pincha el que copó el centro de la cancha y se apoyó en la voluntad de José Sosa y en una creciente influencia de Juan Sebastián Verón.
No había transcurrido un minuto de juego cuando Gigliotti exigió a Agustín Orión pero enseguida Enzo Pérez se escapó por izquierda y Lucas Ischuk le cometió penal. Así fue que a los tres minutos y tras un tiro bajo y a la derecha del arquero de Mauro Boselli los de Alejandro Sabella ya estaban en ventaja.
El mismo y siempre complicado Boselli exigió luego otra vez a Ischuk y más tarde lo obligó a hacerle un penal ignorado por Sergio Pezzotta cuando intentaba llevarse una pelota que se le había escapado. Pero Orión también tuvo trabajo ante un córner casi olímpico y ante un intento de Gigliotti, quien no alcanzó a desviar un peligroso balón.
Con tanta paridad no sorprendió que, a los 45, Luis Rodríguez ejecutara un tiro libre recostado sobre la izquierda y Juan Azconzábal cabeceara en el primer palo para llegar a un justo empate.
Otra vez en el complemento Estudiantes repitió la fórmula de golpear desde el vestuario. Sosa, a los dos minutos, sorprendió con un lejano tiro libre que se coló alto y a la derecha de un estático Ischuk. Sin embargo, el arquero se reivindicó luego paliando los errores de su defensa, apareciendo ante un cabezazo y un mano a mano de Boselli, además de otras dos salvadas cara a cara frente a Sosa y Rodrigo Braña.
Pero después, tras una polémica en favor del local por una falta de Christian Cellay sobre el ingresado Fabio Escobar en el área, otro ingresado, Claudio Vargas, cometió una durísima falta sobre Gastón Fernández y se ganó su merecida tarjeta roja. Y ahí sí que se terminó el partido.
Lo que siguió fue un monólogo platense con el inclaudicable aliento local de fondo. A los 30, Boselli se escapó por derecha y anotó el tercero, por si hacía falta. Después, Ischuk volvió a trabajar ante Sosa, pero ya todo estaba dicho.
Estudiantes había logrado una buena victoria que lo ponía tercero y Atlético desperdiciado una chance más de sumar de local y soñar con mejorar su promedio, que lo mantiene en zona de descenso directo. Duro presente para los tucumanos que, para colmo, aún ni siquiera pudieron ganar en el certamen.