Claudia Butta asumió en el Instituto de la Discapacidad
En la ceremonia que fue interpretada en lengua de señas, Urribarri resaltó que “Claudia ha sido muy clara en sus conceptos, deseos y en la política que pretende desarrollar en el área de discapacidad”.
En la oportunidad, Urribarri recordó a su madre, una docente rural de Arroyo Barú que “leía mucho y escribía muy lindo. Ella decía que el amor no es lo que siente uno por una persona, sino lo que uno está dispuesto a dar por esa persona”.
Agregó que hace un bastante leyó que “tiempo útil es el que uno define hacer las cosas que siente, vaya si hay amor y tiempo útil en Claudia por haber dejado un lugar muy cómodo, porque estaba en la justicia, donde cumplía determinado horario, hacía su trabajo y luego se iba a la casa, para asumir esta responsabilidad”.
En este sentido, dijo que desde que comenzó a dialogar con ella sobre la función, “hace tres meses y si bien cuando yo decidí convocarla conocía de sus valores como los conocen muchos de los que están acá, pasó algo que quiero que lo sepan porque le da más brillo a la llegada de Claudia. Como ocurre normalmente le decimos al responsable de cualquiera de los Poderes si necesitamos un funcionario vamos a hacer una adscripción, un tramite de dos días, pero no pudo ser. Ella un día me dijo que estaba dispuesta a pedir licencia sin goce de sueldo en su trabajo y venirse a trabajar con vos”.
Resaltó que este hecho fue también “un problemita que puso a prueba la vocación, valentía, el amor que tiene por las personas con capacidades diferentes y las ganas de ella”.
Destacó que Allende de Butta “dijo algo que creo tiene que resaltarse. En el mundo la sociedad evoluciona por lo que hacen por los demás, por las personas diferentes y gracias a Dios en ese sentido hemos evolucionado mucho en Argentina, lo que no significa que hemos alcanzado lo que queremos, falta muchísimo más. Pero justamente de eso se trata. La llegada de Claudia es para fortalecer, elevarnos, para solidificar una tarea con instituciones intermedias y toda la sociedad civil, para que cuando no esté ni Urribarri ni Claudia quede en el área un esquema de trabajo”.
Al comenzar la ceremonia, que se realizó en el salón de actos del CGE, el gobernador le entregó a Allende de Butta el Decreto Nº 1056 por el cual se la designa presidenta del Instituto Provincial de Discapacidad y sus hijos un ramo de flores.
Una nueva mirada sobre la discapacidad
La flamante funcionaria, quien estuvo acompañada de sus hijos y nietos, agradeció la “actitud” del gobernador Urribarri por la convocatoria a trabajar “sin objeción alguna en un área tan sensible como lo es la problemática de la discapacidad, dando cuenta así del cumplimiento de la normativa vigente que expresa claramente que estas cuestiones de gobierno deben estar a cargo de representantes de organizaciones de la sociedad civil o de personas con discapacidad, valorando su decisión de legitimar los derechos de todos ciudadanos que la portan”.
Resaltó luego “el compromiso de este gobierno con el desarrollo de acciones que permitan garantizar el derecho de cada persona con discapacidad a la vida privada, gozar de los bienes culturales, a participar plenamente en los procesos democráticos y a vivir en una provincia sin discriminación ni exclusión”.
Y afirmó: “Consagramos aquí una nueva mirada sobre la discapacidad que deberá contribuir a poner al día nuestra legislación y políticas públicas”.
Consideró necesario impulsar una transformación de las actitudes de la sociedad “promoviendo no sólo un cambio en la legislación de los países sino también en la mentalidad de las sociedad tendiente a provocar un cambio social que asegure la plena inclusión de las personas con discapacidades todos los ámbitos de la comunidad”.
“Según la Organización Mundial de la Salud alrededor del 10 por ciento de la población mundial tiene algún tipo de discapacidad y el 80 por ciento vive en países en desarrollo, convirtiéndose entonces en la mayor minoría del mundo. Estas cifras aumentan constantemente con el crecimiento de la población, los avances médicos y tecnológicos y el proceso de envejecimiento, careciendo a la vez de las mismas oportunidades de las que goza el resto de la comunidad”, precisó Butta.
En este sentido, mencionó los obstáculos físicos, culturales, arquitectónicos, económicos y sociales que sufren las personas con discapacidades lo que ocasiona que sean “objeto de discriminaciones producto del prejuicio o la ignorancia, no teniendo en muchos casos los servicios básicos y esenciales para el desarrollo de una vida digna”.
Celebró el establecimiento de la Ley Provincial N° 9891, “sancionada en esta gestión en un contexto histórico y quizás único en el país ya que pudo impregnarse de documentos de derechos humanos como es la Convención Internacional ”. Mencionó que la norma provincial adhiere a la Ley nacional N° 24.901 que establece el sistema de prestaciones básicas en habilitación y rehabilitación integral y declara de interés público el desarrollo integral de las personas con discapacidad en igualdad de condiciones acceso, oportunidad, derechos y deberes que el resto de los habitantes.
También se refirió al rol de los educadores y consideró que “los agentes educativos tienen la gran oportunidad de dar un significado y un sentido diferente a la vida de cada niño y niña. Cada persona con discapacidad merece esa mirada individual que no lo plafone, que no lo estigmatice, que no lo marque. Las escuelas deben ser puentes que faciliten la integración de la persona con discapacidad a la familia, a las escuelas, al trabajo, al uso del tiempo libre, a la sociedad”.
También dijo que desarrollarán acciones que permitan la concreción de ciudades accesibles que sean el resultado de un proceso social, de reconocimiento gradual de necesidades por parte de quienes la habitan con y sin discapacidad.
“Otro punto fundamental para esta gestión será asegurar el derecho a la salud, entendida en su dimensión biopsicosocial para lo cual trabajaremos estableciendo y fortaleciendo redes con las áreas específicas del gobierno provincial y a nivel nacional y municipal”, expresó Butta.
Finalmente manifestó: “Vamos a trabajar de un modo participativo, inclusivo, abierto y democrático al cual convocamos y comprometemos a todas
las áreas del gobierno, Poder Legislativo y Judicial y muy especialmente a las organizaciones sociales de la provincia. Emprendemos hoy un accionar responsable que parta de las necesidades reales de las personas con discapacidad, que vaya impregnando de ética y transparencia cada acción que realicemos, asegurando las condiciones para el acceso pleno a los derechos humanos en por de alcanzar la mejor calidad de vida para las personas con discapacidad que habitan el suelo entrerriano”.
Una formación de vida, profesional y social
Hace 15 años Claudia Butta, que tiene ante todo una causa personal, su hijo Facundo que ha sido el impulso fundamental para su tarea, fundó la Asociación Paranaense de Síndrome de Down (Aspasid) junto a un grupo de padres. La institución está desarrollando actualmente un proyecto educativo y terapéutico donde se atiende a 42 jóvenes, de los cuales muchos ya se han insertado laboralmente con el acompañamiento de Aspasid, con equipos de profesionales y docentes en tareas áulicas.
Butta es profesora en discapacitados visuales y especialista en estimulación temprana. Se desempeñó durante 10 años en la UCA e integra el Consejo Federal para la Discapacidad y el Foro de la Discapacidad en Paraná, además de cooperar con el Consejo Municipal para la Discapacidad.
Hace 32 años que desempeña funciones en la Justicia , lo que le ha permitido también contar con otros elementos para trabajar en la integración de los niños y jóvenes con discapacidad.
