Caso Pelorosso: nadie habla… Silencio ¿y complicidad?
Lo ocurrido entre el Atlético Echagüe Club, el jugador Raúl Pelorosso, Boca Juniors, Temperley y el agente Mariano Nóbile aún provoca asombro en el seno del básquet profesional argentino. Repasemos brevemente: el base tenía todo convenido para seguir hasta fin de temporada en la institución de Paraná, y de hecho continuó jugando tras la vuelta de Carlos Buemo, como si su situación contractual estuviese resuelta satisfactoria y legalmente. Pero no… Aparentemente, proyectándose al 2018 solo hubo una prosecución verbal, y con el receso Pelorosso decidió cambiar de oxígeno volviendo a Buenos Aires.
En Echagüe hablan de “abandono”, de “incumplimiento de acuerdo”, de “defraudación”, de “incumplimiento” y se extiende la concepción esbozando desde calle 25 de Mayo que “Pelorosso se está manejando mal en su carrera por decisiones propias o mal asesoramiento”.
Mediante una comunicación oficial, Echagüe describió la coyuntura con suma y paradójica transparencia. Recordemos lo detallado TEXTUALMENTE por la propia directiva del AEC, titulando” Los directivos de Echagüe informan que el jugador Raúl Pelorosso, abandona el equipo que está jugando la Liga Argentina”. Según el club, “el jugador en cuestión comenzó la temporada en Boca en Liga Nacional, con contrato por toda la temporada.
Fue cortado el 16 de Octubre y reemplazado por un jugador extranjero, Keyron Sheard. El jugador y su agente Mariano Nóbile comienzan a buscar club.
El 21 de Octubre, en el primer partido de la temporada frente a Unión, se lesiona Carlos Buemo con fractura del hueso piramidal de la mano derecha, con una ausencia mínima de 30 días, o más.
Se tramita la autorización de recambio temporal entre el médico de Echagüe y la ADC, que es aprobado. El 29 de Octubre Echagüe llega a un acuerdo con Pelorosso como RECAMBIO TEMPORAL hasta el 19 de Diciembre de 2017, último partido de Echagüe del corriente año.
El acuerdo se realiza entre Echagüe, el jugador, su agente y Boca, que otorga el Pase (COT) temporal hasta esa fecha, y se presenta en la ADC.
A fines de noviembre, el Cuerpo Médico de Echagüe informa que Buemo estaba en condiciones de reaparecer, cumplido el plazo mínimo de 30 días.
En ese momento, Echagüe tenía lesionados a Eugenio Zustovich (rotura de ligamentos cruzados) por quien se había pedido el recambio, y Alejo Cardoso (luxación de clavícula) que había llegado en su lugar.
El cuerpo técnico de Echagüe propone a la dirigencia la posibilidad de continuidad de Pelorosso hasta el fin de temporada.
La dirigencia de Echagüe habla con el jugador y acuerda su continuidad hasta el final de la actual Liga Argentina, como recambio definitivo.
Se habla con su agente, y con Boca que acuerda la liberación del jugador por el resto de la temporada.
Por ello se solicita el RECAMBIO DEFINITIVO de Pelorosso en la ADC y se lo habilita para jugar.
Por ese acuerdo, el 28 de Noviembre Echagüe juega de local con Deportivo Norte y reaparece Buemo, y juega Pelorosso (quien era su reemplazante temporal hasta esa fecha). El acuerdo de continuidad por toda la temporada se realiza VERBALMENTE entre Echagüe, Boca, Pelorosso y Nóbile.
En los días siguientes, desde la Secretaría de Liga de Echagüe se elabora el contrato y se le entrega al jugador para la firma, que pide llevarlo y traerlo firmado.
Pasan los días y no lo presenta, la secretaria se lo reclama y contesta con evasivas. Luego de jugado el último partido el 19 de diciembre el jugador se va de Paraná y no participa de una actividad solidaria del equipo en el Hospital San Roque al día siguiente. El club no recibió ninguna comunicación de parte del jugador ni de su agente.
El 27 de diciembre Boca informa a Echagüe que Pelorosso estaba firmando la rescisión con ese club, pero que el jugador les había informado que no jugaría en Echagüe como se había acordado, sino que pediría su pase a Temperley.
Desde la dirigencia de Echagüe se llama por teléfono al jugador, que no responde.
Se le mandan mensajes de texto whatsapp, que no responde.
Lo mismo se hace con su agente. Al rato el agente responde los llamados e informa que el jugador ha decidido irse a Temperley el resto de la temporada, que él no estaba de acuerdo pero era una decisión del jugador y su padre, pese al acuerdo verbal con Echagüe, ya descripto.
A la fecha el jugador no ha tenido ninguna comunicación con la dirigencia de Echagüe ni devolvió la indumentaria entregada por el club.
Desde la dirigencia de Echagüe se lamenta la actitud del Raúl Pelorosso que defraudó la confianza puesta en él por la dirigencia, cuerpo técnico y jugadores, incumpliendo el acuerdo verbal existente.
Se entiende que se está manejando mal en su carrera por decisiones propias o mal asesoramiento.
Los pagos a jugadores en Echagüe están al día, y las condiciones de vivienda y comidas son las apropiadas para un jugador profesional, según lo acordado. Nunca el jugador manifestó al club alguna disconformidad.
Pelorosso jugó 14 partidos en Echagüe con promedios de 19,6 minutos, 5,9 puntos, integrando la rotación habitual de juego dispuesta por el cuerpo técnico.
Su presencia en cancha fue la más importante en el básquet profesional sea en Boca o Temperley. En Boca ingresó pocos minutos en el Súper 20 en 3 partidos.
En Temperley en la temporada anterior había jugado promedio 17,1 minutos.
Desde Echagüe se destaca la relación con el club Boca Juniors, y se informa que las actuaciones se derivarán al área jurídica del club para la realización de las acciones que correspondan”.
Insistimos… comunicado textual desde calle 25 de Mayo.
Reflexiones…
No hay mucho por agregar. Todo está tan claro… No obstante, vale la pena recalcar algunas averiguaciones hasta hoy NO transparentadas por las partes:
-en una Liga “Súper Profesional” como la Argentina (al menos de ello se jactan los directivos de la Asociación de Clubes), ¿está bien que los clubes, deportistas y representantes se muevan “de palabra”?
-O sea… ¿hay acuerdos verbales que están contemplados reglamentariamente por la AdC desde su propio estamento Legal?
-La Asociación Argentina de Jugadores, ¿convalida este tipo de “convenios” o “pactos” extra-normativos?
-¿Compite en regla un equipo que solo concertó un compromiso de continuidad en forma VERBAL o está “flojo de papeles”?
-Solicitado el “RECAMBIO DEFINITIVO” aludido por Echagüe, ¿se lo habilita apropiadamente en la AdC sin un papel que avale ese acuerdo hasta fin de temporada y no hasta fin del pasado año?
-¿No le genera a la AdC mínimamente preocupación lo que se publica OFICIALMENTE en su web a través de un parte de Prensa del AEC?
-¿Qué derechos posee un jugador que acordó un pacto verbal con una entidad?
-¿Boca Juniors avaló a su vez ese convenio oral?
-¿No era que Boca acordó la liberación del jugador por el resto de la temporada, según lo detallado por Echagüe en parte de prensa?
-¿Cómo un agente no protege a su representado y convalida un acuerdo “verbal”?
En definitiva, ¿todo quedará inmerso en un silencio que puede interpretarse como espurio? ¿Todos terminarán siendo cómplices de una operación hipotéticamente oscura? Claro que, de tratarse solo de una “DESPROLIJIDAD”, lo actuado por las partes es realmente contradictorio, y, sin hesitar, primariamente el comportamiento del basquetbolista distaría de ser el ideal.
Echagüe, con un “sincericidio” admirable ya expuso. Y hasta hay clubes que esperan explicaciones más consistentes. Pelorosso, Nóbile, AdC y AdJ optaron, hasta hoy, por el mutismo. Una Liga Nacional que por esta clase de manejos, pierde seriedad inconcebiblemente.
Foto: Gentileza Face Oficial Fotos Básquet Echagüe – N.M.-