Cáritas: Exequiel Olivo cuenta su experiencia con los inundados de La Plata
|A casi dos meses de las inundaciones que azotaron a la ciudad de La Plata y sus alrededores, Exequiel Olivo, voluntario del equipo de emergencia de Cáritas Paraná, regresó finalmente a su hogar en la capital entrerriana. Relató su experiencia al frente del equipo de la institución eclesial y pidió que la gente no se olvide de seguir colaborando.
Fueron 45 días los que este voluntario pasó coordinando el operativo de emergencia organizado por Cáritas Argentina a raíz de las inundaciones sucedidas. Tras ello, contó su experiencia, dio cuenta del trabajo realizado y brindó detalles acerca de la misión de Cáritas frente a las situaciones de emergencia o catástrofes.
El Equipo de Emergencia de Cáritas Argentina está conformado en su mayor parte por voluntarios de la Región Litoral. En esta región, diez años atrás, la institución eclesial tuvo un importante papel para paliar las consecuencias de las lluvias que cayeron sobre la ciudad de Santa Fe y alrededores. En esta oportunidad, Exequiel coordinó y organizó el depósito de donaciones, en plena colaboración con Cáritas La Plata.
¿Cómo organizaron el trabajo?
“En un principio, desde Cáritas La Plata se hizo una asistencia generalizada, donde se brindaba ayuda a los afectados por las inundaciones, ya sean afectados de gran magnitud o de menor magnitud. A la vez, se asistió a quienes ya vivían en condiciones precarias y que, a raíz del temporal, vieron agravadas sus situaciones. La ayuda consistió principalmente en suministrar alimentos y ropa. En ese entonces fueron 10.000 familias. Hoy se está ayudando a unas 30.000 que fueron muy afectadas por las inundaciones y por lo cual continúan sufriendo las consecuencias. A estas, además de la parte material, se les brinda acompañamiento y contención”, relata.
La etapa actual, el “después”, implica la reconstrucción de las viviendas, las refacciones de los hogares, conseguir electrodomésticos, cocinas, heladeras y otros enseres necesarios. También se acompaña la recuperación de los proyectos productivos, emprendimientos de quienes, debido al agua, perdieron las maquinarias, los insumos y cuanta herramienta de trabajo poseian. “Hubo quienes tenían un taller de carpintería y perdieron las herramientas. Estamos en la etapa de ayudarlos a recuperar sus actividades, sus medios de vida, es decir, apuntamos a la promoción humana”, recuerda.
Según explicó este paranaense, el trabajo se realiza en conjunto con los sacerdotes y las parroquias de cada lugar. Son los voluntarios de las Cáritas de esas parroquias los que salen al encuentro de los hermanos y realizan los relevamientos, detectan las necesidades, ven la realidad que atraviesan.
¿Cuál es la misión del Equipo de Emergencia de Cáritas?
“El objetivo es dejar la capacidad instalada. Durante el tiempo en el que se está viviendo la emergencia, coordinamos la entrada y salida de donaciones, en conjunto con las personas que están en ese lugar. En ese proceso, buscamos los perfiles de quienes podrían llegar a continuar con la tarea que desempeñamos”, explica Exequiel.
“Así comenzamos a capacitar a esas personas que seguirán adelante con la organización de la ayuda. Armamos un organigrama de trabajo y las personas que se necesitan, de acuerdo a las tareas y a las funciones, a los roles, que son: encargado de depósito, coordinar cargas y descargas, otra persona para clasificación, un secretario de depósito, un coordinador general de la emergencia y un secretario de la coordinación general. De este modo, este equipo coordina la emergencia en el ámbito diocesano, en articulación con las Cáritas parroquiales”.
Los relevamientos son fundamentales para determinar la ayuda concreta que cada familia necesita y administrar los siempre escasos recursos entre las personas que realmente los requieren. “La misión de Cáritas es llegar al más pobre entre los pobres. Al ir y ver cómo están las personas, podemos constatar qué necesidades tienen y detectar si hay discapacitados que perdieron su silla de ruedas, entre otras cosas. Cáritas realiza un paso a paso personalizado”, profundiza Olivo.
La situación actual
“Evacuados no hay –afirma-. Desde un principio hubo más auto evacuados que evacuados. Las familias de La Plata, especialmente de los barrios bajos, sintieron muy fuerte la ausencia del Estado. Allí, sólo llegó Cáritas. Hoy se sigue trabajando a través de los relevamientos que se hicieron, llegando a los hermanos que sufren con la ayuda más concreta posible y con total transparencia para luego rendir a la comunidad que aportó ayuda material y dinero”.
En cuanto a las donaciones, afirma que en un momento “llegaba tanta ropa y se tornaba una molestia y una preocupación para el desenvolvimiento y el trabajo óptimo del depósito”. Estas colaboraciones requirieron un depósito exclusivo para su almacenamiento.
“Hay que aclarar que la ropa no está allí estancada sino que sale y se va entregando, sobre todo ahora que hace frío. Lo que sucede es que, si bien hace falta ropa, lo más urgente en las familias o sus prioridades son otras y la principal necesidad es la de alimentos”, aclara.
Fecha límite
De acuerdo con lo establecido por el Equipo de Emergencia de Cáritas Argentina, hasta el mes de julio continuará la entrega de alimentos. Cáritas realiza la distribución de mercadería de forma personalizada. Se entregan cada quince días alrededor de cuatro toneladas de alimentos por parroquia, y allí, los voluntarios organizan la distribución.
Ensenada, Berisso y Los Hornos fueron los lugares más golpeados por las inundaciones. Hay que decir que en la zona céntrica también se vieron afectadas familias, de las cuales, la mayoría contaba con un buen pasar económico. Estas personas, en muchos casos, no se acercaron a pedir ayuda.
Sin embargo, Cáritas, en su misión de salir al encuentro de todos, también llegó a ellos, porque quizás no necesitaban ayuda material pero sí que la escuchen, que la contengan, o simplemente, tener con quien desahogarse.
No obstante, desde la sede central recordaron que “continúa la difícil tarea de reconstruir los hogares y acompañar a las familias que perdieron todo lo que tenían”, por lo que recordó que sigue trabajando en “el día después” y apelando a la solidaridad de todos “para que la realidad de nuestros hermanos afectados vuelva a la normalidad”.
De esta forma, renovó el pedido de ayuda en dinero, que puede coordinarse -junto a la ayuda en víveres- al 0810-222-74857, y se efectúa a través de la Cuenta Corriente Banco Nación Nº 35869/51 – Sucursal Plaza de Mayo 0085 – CBU 01105995-20000035869519, a nombre de Cáritas Argentina Emergencia (CUIT 30-51731290-4).
¿Cómo es el después para vos?
“Somos pocos los que quedamos en el después, como siempre”, sintetiza. “Cáritas continúa con las tareas en La Plata y alrededores. Hay algunas otras instituciones y organizaciones, pero, como siempre, somos pocos los que quedamos con el correr de los días. Son contadas las instituciones que siguen trabajando junto a la gente”, agrega.
Ya no es necesario el envío de donaciones por parte de otras provincias o de otras Cáritas Diocesanas del país porque se procura que la misma comunidad, junto a Cáritas La Plata y con el apoyo de Cáritas Nacional, puedan organizarse y hacer frente a las necesidades que surjan en adelante.
También valoró la asociación entre organizaciones sociales: “Fue una experiencia muy buena el hecho de haber trabajado tres instituciones juntas: Cáritas Argentina, Un techo para mi país y el Banco de alimentos. En mi experiencia, es la primera vez que veo tres instituciones trabajando juntas y de forma organizada y muy bien”.
¿Qué te depara a vos ahora?
“Un voluntario de Emergencia nunca descansa, siempre estamos alertas. Y en este proceso de rehabilitación, está previsto que volvamos en dos meses, porque no es que el Equipo de Emergencia de Cáritas Nacional los deja solos, sino que periódicamente volvemos al lugar y el contacto continúa permanentemente”, indica Exequiel.
“Cáritas hace una tarea diferente a la que desarrollan otros –observa-. Nosotros continuamos estando, seguimos al lado de los hermanos y a la vez garantizamos que toda la ayuda recibida vaya a destino. Cáritas realiza un acompañamiento cercano y brinda contención emocional y espiritual”.
Fuente: Prensa AICA.-