Brutal ataque al bolsillo de los trabajadores: El gobernador de Río Negro reveló que el Gobierno quiere que el piso de Ganancias sea 1.5 millones de pesos
|Luego de la reunión que encabezó el Ejecutivo nacional con representantes de las 23 provincias y la Ciudad de Buenos Aires, como un primer paso hacia el Pacto de Mayo, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, reveló este sábado que el Gobierno propuso la reversión del Impuesto a las Ganancias con un piso de 1.5 millones de pesos.
“En la Patagonia, nosotros tenemos un costo de vida muchísimo más alto que en el resto del país. Obviamente que al ser más alto el costo de vida son más altos los salarios. Por más que se ponga un piso de un millón 500 mil pesos, en la Patagonia afecta a prácticamente toda la masa salarial”, remarcó Weretilneck.
Durante una entrevista con radio Mitre, el mandatario provincial detalló que ese piso “fue lo que planteó el Gobierno y hubo posiciones disímiles”, ya que “hubo algunos gobernadores que dijeron que sí y muchos que no”.
“En un tema tan sensible que ninguno puede comprometer el voto de un diputado o un senador”, anticipó el rionegrino, quien ya había planteado su posición negativa respecto de restablecer la cuarta categoría de Ganancias.
Para Weretilneck, se trata de “un impuesto que durante 100 años pagaron quienes perciben un salario”, por lo que “más allá del impacto en las finanzas, es un hecho de absoluta justicia”.
“Con la caída del poder adquisitivo de los salarios en el último año…Cargarle sobre eso otra reducción más a alguien que percibe un salario es inclusive hasta exagerado, no se puede permitir bajo ningún tipo de vista”, argumentó.
En ese marco, el mandatario provincial planteó que “se logró correr el eje” del tema Ganancias como uno de los principales puntos de conflicto. “Parecía como que los gobernadores íbamos a apoyar la Ley Bases si nos daban Ganancias, pero ayer quedó claro que hay una decisión de los gobernadores de acompañar lo que el país necesita en esta época, pero no hay una imposición de ‘dame esto para acompañar'”, sostuvo.
“Sabemos que estamos ante un gobierno nuevo, aceptamos lo que el pueblo argentino decidió y aceptamos el gobierno. Lo que necesitamos es previsibilidad. No podemos dejar que caiga más nuestra masa coparticipable. Gobierno tras gobierno vamos viendo que nuestra masa de coparticipación va cayendo”, alertó.
Respecto de las eliminación de fondos fiduciarios, Weretilneck precisó: “Los que nos interesaban eran 4, que son los que financian a las provincias el desarrollo eléctrico. Hay algunos que a las provincias no nos tocan y por mí el Gobierno puede hacer lo que quiera con esos fondos. Hoy es un tema que no creo que pueda llegar a trabar el acuerdo”.
En esa línea, planteó el “polémico” manejo de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) en “todos los gobiernos”, ya que “depende de qué lado de la ventanilla estás te dan o no”. Por eso motivo, pidió “sacar esa estructura” y que las provincias reciban el dinero para tener “una relación clara y lineal con el Gobierno nacional”.
El mandatario rionegrino calificó como “sincera” la reunión que compartió con sus pares en la Casa Rosada y consideró que “la posibilidad de que el Gobierno hable con los gobernadores es auspicioso y bueno”.
“Todos los gobernadores valoramos el diálogo como instrumento de gestión. Fue una reunión sincera y duró cuatro horas porque a medida que fue avanzando cada uno explicó, planteó cómo se ve el Gobierno central desde el Interior y cómo impacta cada una de las medidas, así como también a lo que aspiramos del vínculo entre las provincias y la Nación”, puntualizó.
En torno a la Ley Ómnibus, cuya nueva versión tendría 190 artículos, el gobernador dijo ser “optimista” respecto de la posibilidad de que se pueda avanzar en su aprobación, pero dijo que dependerá de “la muñeca negociadora del gobierno central”.
“Respecto de lo que ayer vimos, diría que soy optimista de que se puede avanzar, pero depende del texto fino de la ley y de la muñeca negociadora del gobierno central. Es un Gobierno poco proclive a aceptar ideas de otro, con un sesgo autoritario bastante importante. Hay que ver si existe el sentarse a dialogar y aceptar modificaciones y distintos puntos de vista”, concluyó.